Malec One Shots.

You're special...

Alec ayudaba a Raphael con las flechas para que tuviera una mejor puntería al lanzarlas.

-Solo concentrate y esta vez lo.lograrás -le dijo a su hijo con voz suave.

Alec era el instructor de él en la academia del instituto de Nueva York al igual que Jace. Raphael amaba que ellos le enseñarán los trucos para ser un mejor shadowhunter, ya que el pequeño los admiraba mucho a ambos.
Raphael soltó la flecha con sus tembloroso suspiró ansioso porque diera en el blanco. Pero el objeto se desvió y se clavó en la puerta de madera principal.

Raphael bufó.

-Tranquilo -dijo Alec acariciando su cabello- Ya lo lograrás, yo tampoco lo logré a la primera

Raphael sonrió, un poco más aliviado.

-Ya es un poco tarde y debemos irnos a casa amigo

Ambos recogieron las armas y las colocaron en su lugar antes de partir hacía el loft.

El aire fresco del invierno era aún un poco tolerable pero eso no le impedía a Alec en abrigar a su hijo con todas las capas de ropa que eran posibles para que no enfermará.

-Alec, ¿Estás seguro que el pobre.Raphael respira? -preguntó Izzy que aparecía de una habitación.

Alec la miró mal.

-Es para que no coja un resfriado Izzy, aún sigue siendo muy propenso

Era cierto Raphael llevaba mucho tiempo viviendo con ellos pero aún así aún era muy delgado y se enfermaba con facilidad.

-Despideté Raphe -le dijo Alec.

-Adiós tía Izzy

Isabelle acepto con mucho gusto el abrazo y los besos que su sobrino le daba, amaba mucho a sus sobrinos, y le gustaba mucho cuidarlos aunque por razones desconocidas Alec y Magnus no la dejaban cocinarles a los pequeños.

-Adiós cariño, saluda a tu papá y a Max de mi parte -le sonrió.

Raphael sonrió asitiendo. Antes de que ambos salieran del instituto.

****

Cuando entraron al loft el delicioso olor a comida inundó las fosas nasales de ambos.

Raphael corrió hacía la cocina dónde Magnus estaba terminando de preparar la cena.

-Papá -le dijo abrazandolo por las piernas-

-Hola pequeño amigo -le sonrió Magnus cargándolo- ¿Cómo estuvo el día?

-Bien papá y el tío Jace me enseñaron como defenderme en un ataque, y tía Clary me enseño como dibujar runas, ¿dónde está Max?

Los ojos del niño observaron por todo el lugar frunciendo el ceño al no encontrar a su hermano menor.

Magnus suspiró colocando a Raphael de nuevo en el suelo se llevó una mano al cabello.

-¿Ocurré algo Magnus? -la voz de Alec sonaba alarmada.

-Es solo que Max ha estado enojado durante todo el día, se encerró en su habitacióm negándose a hablar conmigo

Alec frunció el ceño y se encaminó a la habitación del pequeño. Golpeó dos veces la puerta hasta que se abrió lentamente dejando ver al pequeño Lightwood Bane en una cómoda pijama color verde.

-Hola Max -saludó Alec.

Max lo miró fijamente, normalmente él esperaba que Alec regresará del trabajo para pasar con él el resto de la noche y llenarlo de besos. Por eso sabía que algo andaba mal, su hijo no hizó ninguna de esas cosas. El pequeño frunciendo el ceño y luego pusó su atención de nuevo en sus juguetes.

Alec se acercó lentamente hacía él sentándose a la orilla de la cama, acarició el cabello azul de Max.

-¿Está todo bien? -preguntó susurrando

Max negó.

-¿Quieres decirme que está mal?
Volvió a negar.

Alec frunció el ceño cuando Max se recostó en sus regazo y pequeños sollozos se escuchaban.

-¿Oye, que ocurré? -Alec alzó suavemente la carita de su hijo, sus ojos vidriosos y las lagrimas le caían por sus mejillas.

Max jadeó y sorbió su nariz.

-¿Soy un mounstro?

Alec abrió los ojos totalmente sorprendido de que algo así saliera de su boca.

-Claro que no -dijo rápidamente- ¿Porque dices eso?

-Dos chicos en la academia de Raphael me dijeron que era un mounstro

Unos golpes se escucharon silenciando a Max, del otro lado de la puerta apareció Magnus y Raphael. Los dos miraron confundidos hacía Alec. Magnus se acercó tomando al pequeño Max en sus brazos acunandolo mientras que Alec le susurraba lo que él le había dicho.

-Escuchamé Max, tú no eres nada más que especial, eres un buen niño y nosotros te amamos mucho -le dijo Magnus dejando un beso en su mejilla- No debes hacer caso a comentarios absurdos blueberry

-Ellos dijeron que tú también eres un mounstro papá -dijo apenas audible-

Magnus sonrió levemente. Había pasado mucho tiempo en el cuál Magnus no había escuchado ese mote y claramente sabía sobrellevarlo mejor que Max.

-Bien entonces creo que ambos somos mounstros.

Magnus cerró sus ojos momentáneamente para luego abrirlos y mostrar sus ojos de gato, él sabía que a Max le gustaba cuando los mostraba así no lo hacía sentir solo.

Raphael se acercó a su hermano y lo abrazó fuertemente.

-Yo te quiero Max y cuando vuelva a la academia patearé el trasero de cualquiera que quiera hacerte daño

-Veo que ha pasado mucho tiempo con Jace -dijo Magnus.

Max rió, una hermosa y infantil carcajada.

-Papá y yo somos cazadores de sombras no dejaremos que nadie les haga daño

Alec sonrió asintiendo.

-Sí Max, todos te amamos y para nosotros y tu familia no eres un mounstro, eres especial y siempre lo serás.

Alec lo abrazó y Max se recostó en su pecho sintiendose mejor, sabía que no estaba solo, pero había muchas veces en los cuales los niños habían sido crueles con él. Pero justo ahora ya no le importaba porque estaba feliz del amor que su familia le daba.

Y siempre lo haría.