»DECISIONES DIFÍCILES«

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Virgo subió al piso principal, olvidando la candela encendida que cayó en la cama donde yacía su inerte madre.

Tropezó al apenas salir por la trampilla y otra vez más, chocando su costado contra el reposadero del sillón que movió lanzándolo hacia la pared.

Sus manos se aferraron con desespero a la madera pegada, tratando de quitarla por su propia fuerza. Tenía que morir, no soportaría el rechazo de su padre cuando supiera la verdad, cuando supiera que él mato a su madre, a la persona que amaba.

Arrancó una tabla sin darse cuenta de la sangre que recorría sus manos, saliendo de sus dañadas uñas. Empezaba a perder la cordura.

Para cuándo se dio cuenta de lo que le rodeaba, el humo era más presente, oprimiendo sus pulmones para respirar provocandole toser con fuerza y ahogarse al buscar aire limpio. Su casa se estaba quemando.

Su cuerpo cayó de rodillas, su cabeza hacia el suelo, tosiendo tan fuerte que su garganta quemaba. La presión del aire contaminado contra sus pulmones, sus ojos llorosos, su nariz picaba. Con su camisa, tapó su nariz y boca, tratando de usarlo como un filtro para respirar mejor. Funcionaba poco.

Al mirar atrás, pudo percatarse de las enormes llamaradas que empezaban a salir por la trampilla y empezaban a consumir todos los pocos muebles que tenía en su camino.

Soltó un grito de terror al pensar que moriría quemado, abrasado por las llamas ardientes de aquel incendio.

- ¡Ayuda! -.gritó dañando sus cuerdas vocales, sintiendo de nuevo el horrible ardor en su garganta, más un extraño gusto a óxido, haciendo que su voz melmara más.

~°~

- No entiendo el porqué tardaron tanto, par de subnormales... -.mencionó con enojo Piscis caminando con rapidez por la calle vacía, guiando al grupo.

- Ya... Estamos aquí... Deja de quejarte, grandullón.. -.Aries iba cargando su arma mientras Libra cargaba la suya con una expresión de extrema felicidad. Era su arma preferida desde que empezó con sus videojuegos.

- Todo es por culpa de Aries y su obsesión por su hermano...-.soltó Libra fingiendo enojo de su parte.

- ¿Obsesión? Yo no siento obsesión alguna por Leo... -.miró a la derecha, evitando miradas.

- A veces, me gustaría follarmelo duro contra el muro, macizo contra el piso, lento en el pavimento, contento contra el cemento, sin pena en la arena, consuelo en el suelo, despacio hacia el espacio, fuerte bajo el puente, picante contra el estante, violento contra... -.mencionó con malicia Libra, siendo interrumpido por su rubio amigo con un violento golpe en su brazo.

- Te reventaré los ojos para que no lo veas nunca más... -.le señaló con desdén.

- No... No tienes obsesión alguna... -.mencionó sarcásticamente.

- Oigan... ¿Aquella no es la casa de Virgo? -.habló Sagitario señalando una casa a lo lejos de la calle, ardiendo en llamas.

- Creo que sí... Pero, ¿qué no dijo que hoy se quedaría en casa...? -.mencionó Acuario agarrado del brazo de Capricornio. Este venía algo incómodo, estaba demasiado cerca.

- ¿Piscis? -.

Cáncer le miró con preocupación al ver que había dejado de caminar, chocando con él al prestarle más atención al pleito entre Libra y Aries que al camino.

De un pronto a otro, el chico pelinegro comenzó a correr, creía haber escuchado a alguien gritar por ayuda, creía haber escuchado la desgarrada voz de Virgo.

The Purge: Zodiac[Yaoi] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora