Eat ☾y.m☽

二

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— Despierta

Canturreó Jimin en el oído de Yoongi quien aún seguía dormido tapando su rostro con una almohada por los rayos del sol que entraban por la ventana que su novio había abierto.

Se removió en la cama y volvió a acomodarse para seguir durmiendo.
Jimin se puso encima de este y destapó su rostro para lograr hacer que se despertara.

— Min Yoongi, depiertaaa

— ¿Qué quieres?

Respondió el mayor un tanto irritado por el comportamiento del menor, él mejor que nadie sabía que odiaba que lo despertaran así y más si era fin de semana.

— ¡Feliz cumpleaños!

Sacó un espantasuegras del bolsillo de su pantalón y lo sopló en el rostro del mayor aventando confeti que guardaba en su mano por toda la cama.

El mayor se sacudió el confeti del cabello y rostro y miró serio a Jimin.

— ¿Por esto haces que me levante a las...

Miró la hora en el reloj despertador que había sobre su mesita de noche y prosiguió quejándose.

— ... 11 de la mañana?

— Anímate, como hoy es tu día te complaceré en todo lo que me pidas.

Enseguida el pálido sonrió de lado y alzó las cejas, tomó al menor de la cadera y lo atrajo más hacia él para abrazarlo y darle un corto beso en los labios.

[...]

— Jin hyung ¿podrías pasarme las serpentinas que están en esa caja?

Mencionó Jimin señalando una pequeña caja rosa llena de adornos para fiesta que había traído Seokjin para ayudar con los arreglos.

Jin caminó hasta el lugar que había señalado el pelirosa y tomó la caja que estaba sobre la mesita de la sala para luego entregarle lo que le había pedido.

— Aquí tienes

Estiró su brazo para entregarle las serpentinas a Jimin quien estaba sobre una pequeña escalera poniendo varios adornos que colgaban del techo.

Unos minutos más y todo el lugar estaba arreglado. Jimin planeaba sorprender a su novio cuando este llegara de su trabajo y viera todo el lugar adornado por su cumpleaños.

Como era un día especial, se dió el lujo de preparar carne para la cena, a Yoongi le encantaba la carne y era lo que siempre le pedía al menor para cuando llegara de un largo día de trabajo pero este siempre se negaba diciendo que debía de comer más sanamente y un montón de cosas más que siempre le había dicho su madre.

Colocó dos platos con cubiertos en la mesa decorada con un gran mantel blanco y varias velas aromáticas junto con un florero en el medio.
Incluso trataría de esta vez probar algo de lo que había preparado para ambos.
Puso una botella de vino blanco junto con dos copas y se apresuró para ir a arreglarse, en menos de una hora Yoongi regresaría a casa.

Terminó de cepillar su cabello y puso un poco de loción en su cuello, se miró en el espejo preguntándose si con eso estaba bien, nunca estaba satisfecho consigo mismo.
El sonido de un coche aparcándose frente a su casa lo sacó de sus pensamientos y se dirigió a la cocina.

— ¡Estoy en casa!... ¿Jimin?

Yoongi entró por la puerta y al encontrarse con la casa en completa oscuridad una sensación de preocupación invadió su cuerpo.
Enseguida sintió unos brazos rodeando su cintura tranquilizándolo, ese aroma le parecía familiar.
Se dió la vuelta y al hacerlo las luces se encendieron encontrándose con una vista bastante tierna.

Jimin vestía sólo un suéter color coral bastante grande para el que le llegaba un poco abajo de los muslos y dejaba ver un poco sus hombros, suspiró aliviado al ver que al menos llevaba unos pantalones cortos de mezclilla algo desgastados debajo sino Yoongi podría saltarse la cena e ir directo al postre.

— Feliz cumpleaños~

Dijo Jimin con un tono coqueto guiñándole un ojo al mayor.