Capítulo 6| Invitado inesperado (parte 1)

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Muy decidida miró desafiantemente la pared del pozo. Comenzó a calentar los músculos de su cuerpecito dando ligeros brinquitos a la vez que estiraba las manos los pies y sacudía las caderas de un lado a otro con las motivantes palabras de...

— Yo puedo, esto no es nada comparado con el examen de extraordinario de álgebra.(¬‿¬)

Inflando los cachetes una y otra vez, oxigenó sus pulmoncitos. De sus brillosos ojitos emanaba firmeza. Casi quería cantar de lo fuerte, segura y motivada que se sentía. Apunto estuvo de comenzar la escalada, levantó ganozamente un piecito cuando....

—¡RUUAAUUU!♪♪♪♪— un feroz rugido la hizo retroceder dos temblorosos pasos. A su dirección se dirigía un fiero animal que avanzando bruscamente anunciaba intensas ganas de devorar.

La alarmada muchacha alzó la mirada sólo para observar como las filosos dientes de un alargador hocico se asomaban lentamente con los orificios nasales, de la bestia, olfateando el lugar hasta detectar un peculiar olor humano....

—¡RUUAAUUU!♪♪♪—un satisfecho y terrorífico rugido resonó con fervor.

—¡Estoy muerta!— Quetzali ensanchó muy aterrada los ojos. Su imaginación llegó hasta el grado de sentirse masticada por el mortal filo de los  asesinos dientes.
Sin nada mejor que hacer, comenzó a temblar dramáticamente peor que una gelatina mal hecha.

El monstruoso cocodrilo fijó sus complacidos ojos sobre su desahuciada presa...

—¡RUUAAUUU!♪♪♪—con este último rugido la monstruosa bestia intentó descender a por su festín sólo que antes.......

—¡¡AAAUUUUUUUUUUUH!!♪♪♪—un impetuoso aullido azotó con exagerado dominio todo el boscoso lugar. Seguido de ello resonó un potente ......

—¡¡GAAAAAARG!!♪♪♪♪—←[intento de gruñido feroz😅]

La intriga, incertidumbre y el pánico, volvieron apoderarse de la muchacha. Dejando caer la pequeña mandíbula de su boca, sin saber nada más que hacer, Quetzali se resigno a soportar un terrible gruñido ya que ni siquiera con las orejas cubiertas pudo obstaculizar.

«Acaso ¡¿otra bestia más desea saborear mis huesi.....!». Sin que antes terminará de entregarse al terror, percibió la cercanía de potentes pasos a su dirección....

—¡RUUAAUUU!♪♪♪—El feroz cocodrilo no se quedó atrás, volteando bruscamente, se alejó con extrema rabia detonada en cada rugido que daba.....

«¡Reacciona estúpida!». Con una despiadada cachetada mental, Quetzali regresó a la realidad aplicando el bien dicho, dicho "patitas pa que las quiero"....

¡PUMMM!♪♪♪.... Un potente golpe retumbo por todo el bosque; rugido, gruñido, rugido, gruñido. Extremo odio y osadía sacudían los tímpanos de Quetzali, poderosos golpes colosionaban con ferocidad.....

—¡GARRG!♪♪♪ ¿Cuántas veces te he dicho ¡¡¡QUE NO TE METAS CON LOS MÍOOOS?!!!—una fría voz masculina, marcada con extrema rabia, cuestionaba con ferocidad.. ...

—Jajajajajajajajaja......— después de una prolongada carcajada burlona contestó con tosco desprecio— criatura insolente, sabes bien que todo lo que entra en mi territorio me pertenece. No tengo que repetirte que la muerte será tu castigo por entrometido ¡RUUAAUUU!♪♪♪

Después del potente rugido, procedió un escandaloso gruñido, seguido de ello se hizo el silencio de palabras, intensificando la Poderosa batalla que se dejaba sentir con la Tierra retumbando, el crujido de ramas quebrarse y feroces golpes despiadados.

¡PUMMM!♪♪♪

¡CRACK!♪♪♪

¡CRACK!♪♪♪

¡RUUUAAUUU!♪♪♪♪

¡CRACK!♪♪♪♪

¡GARRRG!♪♪♪♪♪

¡CRACK!♪♪♪

¡PUMMMM!♪♪♪

.........

.........

........

La contienda era ruidosa, violenta e intimidante para aquellos pocos desafortunados que la escuchaban.

Independientemente del impetuoso combate, Quetzali, junto con sus temblorosas manitas, se encargaba de ascender como podía; sujetándose de una que otra rama o arbusto, que por ahí se encontraba, hasta alguna que otra roca o raíz.

« ¡Me tengo que ir, no puedo quedarme, necesito huir ¡pero ya!!». Confiando en su instinto apresuró la escalada, nada tonta, no esperaba salir viva después del feroz combate.

Dos metros por arriba del suelo, con exagerada dificultad se sujetaba a duras penas, cargando gotas sudorosas que comenzanban a recorrer su angustiado rostro. Los minutos pasaron y  misteriosamente se hizo el silencio. Ante ello, muy nerviosa, detuvo la escalada cuando una sospechosa mirada embargo sus ojitos «¿La batalla se alejó, o acaso culminó? no no no no no no. Debo apresurarme, tengo que huir»

Cinco minutos han transcurrido. Dificultosamente la joven logró asomar lentamente la cabeza, sondeando con unos entre entrecerrados ojitos sospechosos, un lugar devastado de gruesas ramas destartaladas. «creo que es seguro».
Después de pensar a su favor suspiró algo aliviada comenzando a salir del lugar. Una vez fuera del traicionero pozo, se levantó con lentitud limpiándose la tierra y  hojarasca podrida. Un poco más relajada, comenzó a sonreír animandose mentalmente hasta que....

¡CRACK!♪♪♪♪.... El quiebre de una rama tras su espalda, le inserto un espeluznante pánico, que desencadenó salvajes ¡Tucun! ¡Tucun! de pavor ...

«¡ No...puede..ser!». Sintió el pánico volviendo a devorar su pecho. Supuso que se encontraba terriblemente acechada, y no por cualquier cosa, no, lo más probable es que sea por uno de esos monstruos combatientes de hace un rato; de un lado estaba el macabro cocodrilote y del  otro ¿¿¿????. La incertidumbre le erizó la piel, ella no sabía porque, pero aún sin conocer la apariencia de la otra posible y monstruosa bestia, sintió un pánico mucho mayor azotando su corazón.

Respirando con agitación, la chica subió por reflejo la temblorosa palma de su mano posandola en el pecho...¡Tucun! ¡Tucun! ¡Tucun!..... retumbando de pánico sintió su corazón. No podía más, sentía su cuerpo próximo a caer y ni siquiera le hacía frente al monstruo tras ella.

Tragando valerosamente, tras unos eternos segundos, (4), decidió enfrentarse al misterioso problema. Girando con lenta dificultad su rígido cuerpo, volteó sólo para sentir la sensación de ser impactada por un mortal rayo....

«¡Maldita seaaaa!». Retrocediendo un par de pasos, instintivamente logró tambalearse a favor de no caer al suelo. Frente a ella, sus enormes ojos de temerosas pupilas dilatadas, observaron a una imponente bestia denominada como lobo feroz, y no cualquier lobo, no, este era un ser supremo de una grandísima altura de por lo menos 1.30 metros. Su fino pelaje era de un gris metálico en la parte del lomo, cabeza y cola. Mientras que la parte del hocico, pecho y estómago eran de un blanco puro. Sus fieros ojos, eran de pupilas marrón claro e iris gris verdoso. Del hocico sangrante, resultado de la culminante batalla contra el cocodrilo, la majestuosa bestias desnudó un par de colmillos amenazantes, lanzando a la temerosa chica, una desdeñosa, mirada asesina acompañada de un —¡Garg!♪♪♪— tosco gruñido despreciante.

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Según yo revise cada palabra que redacte. Espero que no haya ningún error.

Agradezco su atención, dedicada a este capítulo.😄

Muy bien cambio y  fuera y nos vemos al siguiente capítulo.😄

                      1066  palabras (¬‿¬)
                            

MUNDO PARALELO [en busca del retorno]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora