*CAPÍTULO 1 – ¿A esto le llaman suerte?
Lunes 23 Octubre
Parece que hoy será un gran día... bostecé y como cada mañana me levanté lentamente y fui a hacer el desayuno.
El olor de las tostadas recién hechas siempre hacen que espabile al empezar un nuevo día.Mi nombre es Hikari Relish, tengo 20 años, por el momento estoy estudiando Bellas Artes en la Universidad, el curso me va bastante bien pues se me da bien el dibujo tradicional y la pintura, ambas cosas me apasionan. Desde pequeña dibujo todo lo que capta mi atención a mi alrededor.
Cambiando de tema, vivo sola.... Sí, sola. Ni familiares, ni compañeros de piso todos esos rollos me agobia y nunca he tenido pareja, mis amigas dicen que es por que soy muy tímida y no he llegado a lanzarme, quizás sea por eso que tampoco se me de bien hablar con chicos. ¡Ahggg! ¡Son tan difíciles!
En fin, siempre voy a la mía, estoy bien así... o eso creo.Mientras las tostadas se preparaban fui al baño y me lavé la cara, cojí la toalla para secarme y me miré al espejo. Tenía una expresión triste. Me quedé pensativa por unos minutos mientras me observaba, de fondo se escuchó un pitido agudo y empezó a oler a humo.
-¿¿Hmm?? – asomé la cabeza por la puerta del baño mientras iba secándome la cara aún húmeda.
Volvió a sonar el pitido.
-¡OH NO!¡Lo había olvidado!- exclamé mientras corrí agitada hacia la cocina.
Rápido paré la tostadora. Las tostadas se habían quemado.
-¿Porqué tendré tan mala suerte?- suspiré y retiré las tostadas de la máquina de la que todavía salía algo de humo.
Deposité con cuidado de no quemarme las tostadas churrascadas en un plato y miré la hora.
-Las ocho y veinte...- volví la mirada a las tostadas.
Del sofá saltó una gata blanca, Yuki. Parecía tener hambre. Se acercó a pedir.
-Si pequeña, tendrás tu gran almuerzo ahora...-me quedé parada un instante- Espera... Hoy estamos a lunes... ¡¡NO!! ¡¡TENGO CLASES!!
Como una loca me dirigí a la habitación y me puse lo primero que pillé. Cojí una galleta y salí de casa a toda prisa.
Al llegar al portal abrí la puerta de golpe y me choqué de morros con una chica que al parecer estaba a punto de llamar a un interfono. El impacto hizo que las dos cayéramos al suelo.
-L-Lo siento. – dije avergonzada – ¿Te has hecho daño? – le pregunté sin levantar la mirada.
- ¡¡Hmmp!! ¡¡¡¡TU SIEMPRE IGUAL!!!
Al sentir esa voz enfadada levanté la cabeza rápidamente.
-¡¡LORETA!! ¿Qué haces aquí?- la miré boquiabierta.
Ella se levantó sin decir una palabra, se sacudió y extendió su mano hacia mi.
-¿Tú qué crees? ¡¡Vamos a llegar tarde!!
Me ayudó a levantar y acto seguido me arreglé un poco para la carrera que nos esperaba. La Universidad está 5 calles más arriba de mi departamento, por lo tanto en unos 20 minutos llegamos.
-Gracias Loreta... Había olvidado que hoy había clases...
Agaché la cabeza... sabía que era hora de la bronca.
-Ya lo suponía así que he vuelto corriendo desde la Uni. para recogerte. ¡¡ERES UNA DESPISTADA!! ¡Me debes una! – Al decir la última frase su cara cambió completamente, estaba sonriendo de oreja a oreja.
- ¡QUE MIEDO DAS!- dije riendo.
Al parecer no ha sido para tanto, pero tengo curiosidad, nunca había dicho nada de "deber algo"... la miré y creo que reconoció mi expresión.
-Ya te diré qué quiero más tarde. - dijo en tono de burla sacando la lengua – Vamos caminando tranquilas, total, ya hemos perdido la primera clase...
Empezamos a andar, las calles a esa hora estaban poco transitadas, daba gusto esa calma.
Durante el paseo Loreta y yo hablamos de muchas cosas, pero no dijo nada sobre "lo que le debía". Aunque ya lo podía imaginar, al fin y al cabo es una de mis mejores amigas, tenemos la misma edad, estamos estudiando lo mismo y siempre hemos ido a la misma clase incluso en el colegio. Es una muchacha alta, rubia de ojos marrones, ¡una preciosidad! Por ese mismo motivo le van millones de chicos detrás. Qué más decir, es una chica encantadora y con mucho carácter, si la pillas en sus días a veces hasta da miedo...
Por fin llegamos a la Universidad, noté que Loreta tenía una mirada rara en su rostro.
- ¿Pasa algo?- pregunté preocupada.
- ¿Y tu bolsa?...
Me miré... efectivamente no llevaba mi bolsa.
-¡¡¡AHHHHH!!! ¡¡La he dejado encima de la cama!! –me puse las manos en las mejillas bruscamente.
Cómo puedo ser tan despistada... Dentro de la bolsa llevo los libros, el estuche, el almuerzo que prepare ayer... En estos momentos no sé que hacer.
Loreta me miró de nuevo y puso una mano en mi hombro.
-Tranquila, ves a tu casa y cógela. ¡Yo te cubro en clase!
Asentí con la cabeza mientras veía como entraba dentro del edificio. Tenía que darme prisa.
Corrí por las calles hasta llegar al piso, subí las escaleras y al llegar a la puerta rebusqué en los bolsillos de la chaqueta...-¿¡QUÉ!? – miré mis manos al sacarlas de los bolsillos.
Solo tenía el móvil... ¿Y las llaves? Te preguntarás.... Estaban dentro.
Deprimida dejé de buscar y me senté en el suelo apoyada en mi puerta.
Tenía ganas de llorar, puse mis brazos alrededor de las piernas, acurruqué la cabeza sobre ellos y cerré los ojos.
"Todo lo malo me pasa a mi"... esas palabras eran las que resonaban una y otra vez en mi mente.
De pronto abrí los ojos y miré a mi alrededor. Habían dos cartas junto a la puerta... ¿De quién serán?
CONTINUARÁ...
--------------------------
Bueno, espero que os haya gustado es mi primer capítulo >_<!!! Sé que no soy muy buena escribiendo, pero haré lo posible por mejorar, dejad comentarios si os ha gustado! Os lo agradecería mucho jeje!!! :3
Pronto subiré algún dibujo de Hikari... :P*YumeNoAsuka