"Iconic"

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Pasó martes y miércoles sin novedades, completamente casual. Las dos semanas de exámenes finales se aproximaban y parecía que Naruto con todo y todo, exentaría las materias que inscribió en el semestre.

Sin embargo, de momento esas cosas ya no le importaban. Seguía sin comprender que era F7, ni siquiera con el internet pudo encontrarlo y solo le quedaba la expectativa con la cuenta que debía crear en la dichosa página. Algo le susurraba que tal vez la respuesta se encontraba ahí.

Era la hora de la comida del jueves, ciertamente los profesores y alumnos ya estaban cansados pidiendo que el semestre terminara; no es como que la gente prestara atención o le importara lo que hacía el que estaba a su lado para esas alturas del partido. Caminaba a paso lento para dirigirse a casa; su padre tenía muy ocupado el resto de fin de semana y ese preciso día tenía un simposio acerca de unas bacterias o algo así. Cruzó por el edificio principal de la facultad, pasando la puerta casi escondida a uno de los lados que llevaba a los cubículos de algunos profesores, entre ellos el de su papá. Se detuvo unos minutos a pensar, sujetó bien su mochila y se fijó en que nadie lo viera entrar.

Cerró tras de sí, notando que ninguno de los maestros o secretarias se encontraban alrededor. Siguió en su búsqueda hasta que estaba frente a la puerta del cubículo de Minato; de su pantalón, sacó la llave que este le dio desde que empezó la carrera por si necesitaba cualquier cosa, desde tomarse cinco minutos, hasta ayudarle al rubio mayor con algo; finalmente cosas típicas de padre e hijo.

Dio una vista de 360°, hace mucho que no iba, pero parecía que todo estaba igual. Su silla de cuero frente a la puerta de entrada y su computadora de escritorio también mirando a la misma dirección. Una repisa llena de documentos a su izquierda, un librero a lado cayéndose de archivos y lógicamente libros, a la derecha un archivero y en su escritorio papeles por todos lados; ciertamente estaba lleno de cosas pero no del todo desordenando.

Respiró profundo, estaba dispuesto a hacer lo que había planeado en cuanto pasó al lado del pasillo principal.

Inmediatamente encendió la computadora, antes de iniciar sesión, el aparato solicitaba contraseña que Naruto no tardó en poner; su padre le había explicado que su fecha de nacimiento era la clave para acceder. El servidor inició y cuando se conectó a internet, tecleó la página con la que ya estaba familiarizado.

De nuevo pedía Número de usuario y contraseña.

-"Parece que tampoco está guardada aquí" –pensó. Dio un pequeño suspiro, llevándose un dedo a la boca, lo mordió, intentando planear el siguiente paso- "Papá es olvidadizo. Debe de estar apuntada en algún lugar" –seguía maquilando en su cabeza. Estaba seguro que la contraseña debería de estar por ahí.

Se acercó a unos papeles sueltos en el escritorio; los hojeó intentando dejarlos en la misma posición en la que los encontró. Lo último que quería era que Minato se diera cuenta de algo. Revisó la mesa completa, movía archivos, papeles, copias, cuadernos y nada. Regresó a la computadora, tal vez en alguna nota, algún documento guardado... nada.

Revisaba lo más rápido que podía, la verdad era que le daba un poco de miedo que alguien lo descubriera o mejor dicho, que su padre lo encontrara.

Se dirigió al archivero, pero ahí solo estaban folders llenos de información vieja acomodada por fechas, artículos científicos, tesis y un montón de cosas aburridas. Pasó de nuevo al escritorio, trataba de hacer el menor ruido posible; las paredes que lo rodeaban no permitían ver hacia dentro pero sí hacia afuera, eso le daba un poco de ventaja tal vez. Abrió los cajones, de nuevo más libros y agendas; lo checó todo sin resultado aparente.

Optó por el librero, pero se notaba que no podía estar ahí, dado que no le cabía nada. No pudo haber dejado un papel o documento con la contraseña porque sería imposible de sacar entre tantas cosas.

Mister catatonicDonde viven las historias. Descúbrelo ahora