...Secretos Del Pasado...

Capítulo 20: "¡No te comprendo Victoria!"

*5 de diciembre*
(César ve algo por la televisión que lo hace sudar frío y aflojársele las piernas) (Agarra el teléfono y para más de contra, el teléfono al que llamaba estaba apagado) (Su desesperación llegó al momento máximo)
C: (agarra de nuevo el celular y le marca a Gaby, su eterna confidente)...¡contesta por Dios!
Gab: bueno!?
C: Gaby al fin! Dime cómo está Victoria! (Con voz temblorosa)
Gab: César? Qué te pasa? Por qué estás tan alterado?
C: Gabriela cómo voy a estar sin saber de tu hermana!?
Gab: bueno, bastante que la has tenido abandonada porque ni una vez las has ido a ver al teatro!...(Un poco molesta, por supuesto que se ponía de parte de Victoria pero al fin y al cabo sabía que sería demasiado arriesgado que él fuera a verla, precisamente a ella, al teatro más aún que no era en el DF)... pero para responderte la pregunta te digo que obviamente ella está en su gira, TRA-BA-JAN-DO y a mí sí no me vengas con celos que con los de Victoria me basta y me sobra!
C: es que tú no entiendes! Yo no te estoy hablando de eso! Es que no lo sabes todavía?
Gab: saber qué!?...
C:....es que...
Gab: Ay César por favor! Me va a dar un infarto! Qué pasó!?
C: acabo de ver una nota en la televisión que decía que Vicky había sido hospitalizada hace poco, creo que por un desmayo...no sé bien! Pensé que lo sabías! Por eso te llamé (se le hacía de nuevo un nudo en la garganta que prácticamente le impedía hablar y se le aguaron de nuevo los ojos)
Gab: qué dijiste? No, por favor! Dime que es mentira! Estás seguro?
C: NO LO SÉ! no lo sé, ok! A mí nadie me ha llamado! Para colmo ella tiene el móvil apagado...
Gab: voy a tratar de comunicarme con alguna de las que están allá en Mérida con ella...Me tienen que decir algo! Jacky...eso! Jacky debe saber algo! Debe estar con ella, como siempre.
C: (pensando)...-Jacky, por qué no me llamó si siempre nos ha apoyado...¿POR QUÉ DEMONIOS NO ME LLAMÓ?-....Ok, llama a alguien y me dices por favor! Lo más rápido que puedas, de todas maneras ahora mismo arreglo todo y en el primer vuelo que consiga me voy para allá.
Gab: está bien, ahora te llamo, yo también me voy para allá...
C: espero tu llamada.

***10 min después***
(Suena el móvil de César)
C: dime Gaby... qué pasó? (Con cada músculo de su cuerpo en tensión)
Gab: tranquilo, ya llegó al hotel, fue una crisis de estrés y ya sabes, la gastritis y sus cólicos, además de, bueno, ya sabes también, la colitis...le hicieron análisis y la medicaron contra el dolor pero ya está mejor, se va a dormir ahora...
C: pero hablaste con ella?
Gab: (se queda pensando en si le contesta o no).
C: Gaby dime!
Gab: es que...
C: Gabriela, me estás preocupando! Qué pasa!?
Gab: es que ella me dijo que no te llamara que...
C: qué cosa? Acaba de hablar!
Gab: que no quería que tú te enteraras! Está bien encabronada contigo, César!
C: pues no me interesa! Aunque estemos bravos ella sigue siendo muy importante para mí! Me tiene que decir todo acerca de lo que le pasa!
Gab: yo lo sé cubano...lo sé! Pero qué quieres que haga! Ella es así de difícil!
C: ya veremos cuando llegue a Mérida...vamos a hablar muy seriamente!
Gab: pero ya te vas?
C: sí, gracias a Dios conseguí un vuelo para dentro de 50 minutos, estoy recogiendo algo de ropa...
Gab: y cómo vas a hacerle para justificarte?
C: Ay Gaby, no sé, no tengo cabeza para inventar mentiras ahora...y menos para discutir con Vivian...
Gab: está bien, cuñado, y que hagas buen viaje. Beso...ahhh y no discutan, por favor! Se me parte el alma verlos así...
C: Trataré, trataré
Gab: byeee. Ahhh por cierto, cuando llegues allá para dónde vas a ir porque que yo sepa pues no sabes dónde está el hotel donde están!?
C: coño! Verdad! No había pensado en eso!
Gab: jajajaja te paso la ubicación por Whastapp, va? Beso.
C: gracias, bye. (Cuelga)

***1:30 am, Mérida, hotel***
(César medio que se había disfrazado, obvio que no quería que lo vieran y lo reconocieran; logró colarse en el hotel por la puerta trasera para el servicio y comenzó a caminar por los pasillos. Subió piso tras piso y ni rastro de ninguna de las actrices, por una parte maldijo el hecho de que no viera a ninguna porque estaba perdido en ese lugar tan grande pero por otro lado agradecía al cielo que nadie lo hubiera visto porque se armaría una grande. Como un milagro para él, vio a Jacqueline salir de una habitación y caminar a lo largo del pasillo y entrar en otra; corrió hasta el cuarto de donde salió Jacky, entró, cerró la puerta y se escondió detrás, quitándose el gorro y el abrigo que traía; ya lo estaba sofocando)