21 - Lexie

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Jajaja, si – Dije y me levante a por los platos, los coloqué en la barra y volví por los cubiertos y las servilletas, al terminar, me volví a sentar y escuché unos pasos a toda carrera por las escaleras - ¡Gideon ya te dije que no bajes corriendo las escaleras! – Levanté la voz mirando hacia la entrada de la cocina – El otro día ya te ibas cayendo, y si no es por mi te hubieses hecho mucho daño – Dije viendo a Gideon, que entraba vestido con unos jeans, unos tennis supra y una sudadera verde que tenia escrito en Francés "J'aime la norriture" en español traduce "Yo amo la comida", claro que ama la comida, puede pasar todo el día comiendo y no engorda, bueno, Gideon se detuvo en la puerta y se relamió los labios, arregló su sudadera y se sentó a mi lado, le faltaba arreglarse algo muy importante, el cabello, lo deje tranquilo a ver si se daba cuenta –

¡Pero esta vez no me caí! – Reclamó –

Tu mismo lo dijiste, "esta vez", y eso no es que nunca te vayas a caer – Dije mirándolo a los ojos, Gideon no supo que responder, solo arrugó la nariz y desvió la mirada hacia Papá quien nos veía divertido –

Dile a Dakota que no me sermonee – Dijo y me apuntó –

Tiene todo el derecho y el deber de sermonearte Gideon, y te dice las cosas por tu bien – Dijo Papá sacando el último hotcake del sartén y colocándolo en el desayunador –

¡Pero es injusto! – Dijo Gideon y volvió a arrugar la nariz –

Siempre has sabido que te sermoneo por tu bien Gideon – Hablé – Y gracias a eso te he salvado de muchas cosas – Dije y giré a mirarlo, este se encontraba igual viéndome, y estaba más tranquilo –

Si, lo sé Dakota – Dijo y bajó la mirada –

Nunca te digo nada malo Gideon – Dije y extendí la mano para arreglar su desordenado cabello, tal cual como lo hacía Mamá conmigo, Gideon se giró hacia mí para que me dejara ordenar bien su cabello – Listo.

Gracias – Dijo y volteamos a ver a Papá, este se encontraba ya sentado frente a nosotros y nos veía sonriente, pero con un atisbo de nostalgia en la mirada –

Me recuerdas mucho a Evangeline Dakota – Dijo y se sentó derecho en su silla – Sin duda alguna heredaste su carácter y manía por la perfección – Dijo y tomó un hotcake –

Si... - Dije y bajé la mirada, pero estaba atento a Gideon, cada vez que nombramos a Mamá, suele entristecerse – Vamos, empieza a comer Gideon – Dije y señale los hotcakes para tratar de contentarlo – Si no comes ya sabes, todos tus hotcakes serán míos – Dije y fue como por arte de magia, Gideon volvió con su energía y tomó 3 hotcakes de una sola vez, les untó mermelada y corto un gran trozo y lo llevó hasta su boca - ¡Trozos pequeños Gideon! – Dije y detuve su mano con el gran trozo de hotcake, devolví el tenedor al plato y tome el cuchillo, corté el gran trozo en 4 partes, y seguí con el resto de hotcakes, ya me es costumbre hacer esto para Gideon, ya que una vez casi se ahoga del gran bocado que se llevo a la boca – Ya, ahora si puedes comer – Dije y le devolví el tenedor, volví a mi plato y tome un hotcake, lo coloqué en mi plato y le pedí a Papá que me prestara la mermelada, este se encontraba viéndome divertido, moduló con los labios "Definitivamente, heredaste todo de Evangeline" y sonrió, lo devolví la sonrisa y negué con la cabeza divertido, me acercó la mermelada y empecé a comer –

Al terminar, Papá y Gideon recogieron los platos y los lavaron, yo aproveché y subí a mi habitación a por mí mochila y mi teléfono, al bajar, Gideon se encontraba en el sofá mirando televisión, me detuve un momento a su lado, estaba viendo una serie de caricaturas, unos minutos después bajó Papá, vestido de traje y terminando de atar su corbata –

Dakota, recuerda que Gideon entra tarde hoy a la escuela, así que yo lo llevaré – Dijo y se colocó al lado de Gideon en el sillón –

Bueno, yo me voy – Dije y me acerqué a Gideon – Adiós pequeñín – Dije y revolví su cabello – Adiós Papá – Dije y choque la mano con él –

Adiós Dakota – Dijeron a la par –

Yo sonreí y caminé hacia la puerta principal, la abrí, me despedí con la mano y salí a la calle, caminé tranquilamente hasta el instituto, al llegar, Chad me hizo una seña, se encontraba recostado de su auto con Julian a su lado.

Hola hermano – Dijo Chad y extendió el puño, choque el puño y repetí la acción con Julian –

¿Que cuent – Fui interrumpido por un chillido en el que iba mi nombre, y la única que chilla así, es Lexie Danford, la hermana gemela de Chad –

¡Dakota! – Chilló Lexie y se lanzó a mi cuello, intentando besarme –

Hola Lexie – Dije con un tono neutro, pero cortante, y procedí a alejarla de mí, escuche una risa por parte de Chad y Julian, imagino por la cara de Lexie –

¡Dakota!, ¡Vamos al cine el sábado! – Volvió a hablar Lexie, yo entorne los ojos, vi a Chad y me hizo una señal para que declinara la propuesta, aunque ya tenía planeado rechazarla –

No puedo Lexie, el sábado ya tengo planes – Dije y la mire frio –

¡Te acompaño! – Insistió –

No Lexie, es una salida de chicos – Dije y caminé hacia la entrada del instituto, Chad y Julian siguieron mis pasos –

Siento lo de mi hermana Dakota – Dijo Chad colocándose a mi derecha –

Tranquilo, ya debería sentar cabeza y aceptar que no quiero salir con ella – Dije y me pase la mano por el cabello –

Ya te debe tener harto – Dijo Julian –

Dúdalo – Respondí y seguí caminando por el pasillo del instituto, hasta que alguien chocó el hombro conmigo, y ese alguien era Giovanni McElroy, el hijo del entrenador McElroy, y por obvias razones, el capitán del equipo –

Achilles – Dijo y se detuvo junto a Will y James, sus seguidores, me recuerdan a Lexie con su séquito, Monique y Camille – ¿Temblando como gelatina por el partido contra Master Arrows?

-Gire hacia él para enfrentarlo – Esa pregunta te la debes hacer tu mismo McElroy – Dije enfrentándolo – Yo no fui el que no encestó el tiro libre que nos hubiese dado la victoria el campeonato pasado – Dije y seguí mi camino con Chad y Julian a mis costados –

¡Hasta Aquí!



Bonito DesconocidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora