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Estiró su cuerpo por completo y bostezó con cansancio. Se sentía agotado, el trabajo le estaba consumiendo poco a poco sus fuerzas, aunque le hacía olvidare de todo el desastre en el que se había convertido su familia en los últimos meses. No había día en el que él no se torturara con cada maldito secreto que había en su familia, en el que no se culpara por lo que le había sucedido a su hermana.
Extrañaba a Briana.
Extrañaba a su hermanita, extrañaba que siempre lo hiciera sentir mejor, extrañaba llegar a casa agotado y que ella le hiciera algún masaje para relajarlo, extrañaba que lo regañara por no cuidarse como debería, extrañaba verla hacer pucheros para conseguir todo lo que quisiera.
Siempre había sido demasiado apegado a Briana, por la sencilla razón que, Briana era alguien frágil, alguien a quien él deseaba proteger de todo daño.
Con Brisa siempre había sido diferente. Le llevaba nueve años de diferencia, la había visto crecer siendo una niña llena de dulzura. En aquellos momentos obviamente él lo único que deseaba era proteger a sus hermanitas. Pero, una vez cuando él quiso proteger a Brisa, ella se protegió sola y se alejó por completo de sus hermanos.
Brisa había madurado a tan temprana edad, se había hecho independiente y no deseaba que nadie la ayudara. Se había vuelta demasiada callada e incluso fría con ellos.
Cada vez que él buscaba acercarse a ella, lo único que lograba era que se alejaran aún más. Brisa había creado una barrera gigante para que nadie lograra llegar hasta ella. Claro, le había dolido ver como Brisa se quedaba sentada leyendo algún libro o dibujando, mientras él y Briana se divertían jugando... Sin Brisa.
No recordaba en que momento todo había cambiado entre ellos, no recodaba exactamente el momento preciso en el que dejaron de ser tres, para convertirse en dos. Había algo malo en Brisa, él lo había notado cuando dejó de hablar hasta por los codos, cuando dejó de emocionarse por cosas tan pequeñas, cuando empezó a odiar el helado, cuando empezó a dormir en su propia habitación, cuando dejó de hablarle o abrazar a Briana.
Él sabía que su hermana estaba mal, sin embargo, no hizo nada para descubrir que era aquello.
Y se sentía terriblemente culpable.
Desde que Briana se había ido, él ni siquiera había podido hablar con Brisa, preguntarle cómo se sentía. Tal vez, solo tal vez, Brisa también sentiría el mismo vacío que sentía él, al darse cuenta de que Briana ya no estaba con ellos.
Estaba consciente de que la relación de sus hermanas, había ido en picada y que normalmente solo pasaban discutiendo por cosas que Brisa le hacía a Briana. Las escuchaba discutir, escuchaba como Briana sollozaba cuando Brisa se iba y lo único que deseaba era poder ayudarlas, pero él no sabía cómo.
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Muerta por 28 días [FEM#1]
RomantizmBriana Smellie es una chica que cree tener todo y ser completamente feliz, pero ¿Alguna vez te has preguntado que sería de las personas de tu alrededor, si murieras? Esa pequeña pregunta la torturó por mucho tiempo. Sabía que todos lo responderían s...