La hora de entregar los regalos llegó cuando Duncan Weiner pilló a estos chicos compartiendo saliva. Los molestó y quizo hablar con Justin; le dijo que lo encontraba un buen chico y que si no cuidaba a su hija iba a romper todos los lazos que podrían tener de hoy en adelante. Con un apretón de manos y un adolescente avergonzado se adentraron a la sala donde estaba el árbol con los regalos.
—Bien, antes que nada quiero yo dar mis regalos —el padre habló frente a todos—. De un momento a otro encontré el regalo perfecto para una visita inesperada —miró al castaño—. Como amigo de mi hijo; te cederé cumplir tu sueño desde aquí —lo atrajo a su lado—. A pesar de que no tengo algún contrato de producción, me gustaría que grabaras canciones desde el estudio que mandé a construir cuando joven, en un rato Celia podría mostrártelo.
— ¿Me está tomando el pelo? —Intentó bajar un poco toda la emoción que estaba sintiendo en el momento—. Oh, muchas g-gracias, Señor Weiner —su voz le tiritaba y unas palabras se le quedaron estancadas en la garganta.
—Toda la familia se sintió bendecida con escuchar tu voz, ellos me dieron la idea y solo la llevaré a cabo —se abrazaron y el ojimiel volvió a su lugar.
—Para mi niña, Celia —la posicionó delante del árbol—, fuiste algo difícil este año pero supiste tomar las riendas de tu vida y estoy muy orgulloso de lo que lograste sola —besó su frente—. Tu regalo es este —le entregó un sobre—, me costó saber lo que te gustaría pero recordé esas veces que me pedías viajar.
— ¡Europa! Nunca me dejaste ir con ustedes —le golpeó suavemente en uno de los brazos para echarse a llorar de inmediato a su cuello—. Te amo, papá.
—Y eso no es todo, conversamos con tu hermano y está dispuesto a acompañarte —sollozó fuerte y se cambió de cuerpo, Connor la sostenía sonriente de la cintura.
—Estaré cinco meses fuera de servicio, no te lo dije pero me tendrás que soportar por mucho tiempo.
Siguieron entregando los regalos, los abrían ansiosos, más los niños que los adultos. Justin le pidió que le acompañara afuera nuevamente y le entregó una pequeña caja. Agradecida, la abrió.
—Esto es preciosos —un collar con una pequeña perla de dije—, pero es imposible que lo acepte.
—Dios, Celia —rió—. Lo compré con mi dinero y no es algo que vaya a dejarme sin comida. Acéptalo por todos los regalos que me hiciste estos días.
—Gracias, Justin —murmuró con las mejillas sonrosadas y lo besó. Sus labios la tentaban e iba a darse el gusto de hacerlo lo más posible.
—No puedo creer que tu madre haya dado datos de actuación a mi madre, espero que le vaya bien y deseo con mi vida salir del barrio pronto —le acomodó un mechón a la chica detrás de la oreja—. Es la mejor navidad que he tenido en años.
FELIZ NAVIDAD!!! Ya se acaba el año y creo que fue demasiado bueno, espero que disfruten mucho hoy <3 Nos leemos en cualquier otra historia si les apetece pasarse por las de mi perfil.
Gracias por todo.
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Everyday is christmas © O.S.
Hayran Kurgu'No quería recibir nada de ella pero terminó en su casa junto a su familia' portada por: rauhlbooty biebsirenz 2017 ©