Relatos de risa y llanto.

IV

Voy a dedicarle un capitulo a la risa, si exacto a esas carcajadas que salen de la nada, por algo gracioso que escuchamos. A esas sonrisas inesperadas que te hacen sentir vivo, y por sobretodo feliz.

Pero es que lo mejor de las risas es cuando te duele la panza de tanto reirte, ese momento en que miras a la persona que te hizo reir, y en tu mente pensas lo agradecido que estas de que ese alguien este al lado tuyo. El momento en que pensas la felicidad que te generan las risas inesperadas.

Y es que hoy me levante pensando en todas las personas con las que alguna vez comparti una risa, un chiste, un abrazo.

Y quizas no todas lean esto, quizas si pero no saben que el mensaje va para ellos. O quizas les de exactamente lo mismo. Pero no importa, ese no es el caso.

La cosa es agradecer en un día tan especial como hoy, a todos los que alguna vez estuvieron pero ya no. A todos los que estuvieron y siguen a mi lado. Y a los nuevos que estan por llegar y con los que compartire momentos magicos. Solo es eso, gracias por sacarme risas y sonrisas. Pueden parecer cosas insignificantes, pero son momentos inolvidables. Es que atesoro cada risa en mi, para recordarla cuando en realidad quiero llorar.