Capítulo 11

10.6K 832 151
                                    

Voy tan absorto en mis pensamientos, llevo una hora caminando por todos lados, el cielo está oscuro.cuando menos me lo espero, tropiezo con un hombre alto, su fragancia masculina inunda mis fosas nasales, esa fragancia me sobrecoge por completo, me siento embriagado. Antes de que caiga me toma entre sus brazos, puedo sentir toda la energía qué hay entre nosotros. Mis ojos se posan en ese rostro perfecto. Esteban está muy serio, sosteniéndome con sus grandes manos. Los dos estamos en completo silencio. Me pongo rojo, la cercanía de aquel hombre me altera, mi corazón se acelera , como cada vez que tengo contacto con chicos guapos de edad madura. Repongo el equilibrio, respiro profundo y me apartó de sus brazos.

—Abraham, que sorpresa. ¿Que haces por aquí solo tan tarde?—Dice , sin dejar de mirarme. Sin duda me incomoda demasiado.

—Estaba dando una vuelta—Digo desviando su mirada.

—¿Tan tarde?—Analiza mi aspecto—No te vez muy bien.

—Si. No , no creo estar bien. Solo estoy triste , problemas de Adolescentes—Lo veo. Es Tan perfecto. Intimidante.

—No creo que sea solo un problema de Adolescentes—Pone una mano en mi mejilla. Su piel cálida contra la mía me paraliza—¿Que te pasa?.

Posó mi mirada en el suelo.

—No creo que le interese.

—Claro que me interesa.

—¿Porque le interesaría?

Se pone nervioso , analiza su respuesta. Algo inusual en el.

—Pues,Porque ...mmm , pues eres mi Alumno. Me interesa ayudar a mis chicos.

Sin pensarlo digo.

—No parecía ayudarme mandándome a Correr por la escuela—Pongo los ojos en blanco. Por un momento olvido la tristeza.

—A veces hay que ser duros. Pero ¿A caso sufriste alguna lesión? ¿Te moriste por correr? Obviamente no. No seas Inmaduro.

—Bueno, Creo que tengo que irme. Mañana hay escuela , tengo que cobrar fuerza para soportarlo mañana—vuelvo a soltar sin pensarlo.

Me sonrojo , el queda como piedra. No se esperaba eso. Doy media vuelta , decidido a irme. Camino rápido , pasos largos, me voy sin despedirme, tal vez esto me cueste mi calificación, que no existe claro. Esteban me alcanza. Se posa frente a mi.

—¿Conque tienes que soportarme?—Dice lento , sexy.
No se que decir. Mis mejillas arden. Estoy muy incómodo.

—Perdone el atrevimiento Señor Torres. Pero es la verdad—Me armo de "Valor"— aunque me cueste mi calificación , que no existe claro, pero usted es una persona muy desesperante , como estresante.

—¿Crees eso?—Me mira muy serio. Sus mejillas rojas.

—Todos lo creen. Solo lo soportan y eso varios de nosotros, porque es Guapo. Guapo he intimidante.

Al parecer no me canso de cagarla. Primero le digo que es muy estresante para luego irme con que es Guapo.

—Me sorprende Joven Juárez. Estoy muy sorprendido por todas estas revelaciones. ¿Debería sentirme Alagado o enojado?

—Si , no le importa , tengo que irme...

Antes de que pudiera decir pío , habla.

—Déjame llevarte en mi coche.

—No , eso sería muy extraño. Aparte , puedo caminar , es lo que quiero por ahora, respirar y pensar. Si no le molesta. Me voy.

—Por favor déjame llevarte , Ya es tarde , te pueden asaltar , o algo peor. En verdad puedo llevarte. Si te pasara algo , me lo lamentaría mucho—Mi expresión cambia y la de el igual, se apresura a decir —Lamentaría que le pasará algo a un Alumno cuando tuve la oportunidad de ayudarlo.

—Está bien. Aceptaré porque es tarde y estoy muy cansado.

Caminamos una cuadra, su carro (que en realidad es una camioneta pequeña Ford , modelo reciente) está estacionada a un lado de un parque. Saca su llave con control, abre lo seguros. Para después abrirme la puerta derecha de su camioneta. Un detalle bastante extraño. Los asientos son de piel, vidrios polarizados, una camioneta ideal para su dueño. El toma su lugar , enciende la camioneta y le doy mi dirección. Cuando entramos al tráfico , trata de romper el silencio incómodo.

—Ahora si me vas a contar porque estás así.

—¿Cómo?

—Te veías triste. Antes de mencionar lo Guapo y arrogante que soy.

—Ah si—Miró por el cristal—Cosas sin importancia.

—Nadie se pone triste y a llorar por nada—Me mira de reojo.

—Pues problemas , Familiares, estupideces.
Entonces recuerdo que el problema empezó por no querer realizar mi tarea. Que en ella incluía tarea de Álgebra.

—No creo que le importe.

—Puedo escucharte , veremos en qué puedo intervenir.

—Profesor , Mandón , chofer de Uber ¿y ahora Psicólogo? Ahora usted me sorprende Señor Torres—No puedo evitar sonreír.

—Algo así , Joven Vega. Ahora cuénteme , porque estaba deambulando a estas horas por la ciudad.

—Pues se podría decir que discutí con mi madre. Por una tarea. Ella dijo cosas que no debía decir. Cosas que me hicieron sentir terrible , aparte de recordar otras. Fue inevitable sentirme así. Salí de mi casa y fui a perderme un rato.

—¿Que tipo de cosas?

—Pues cosas. En verdad no se ni porque le dije.

—No hay problema —Pone una mano en mi pierna y me tenso.

—Perdona si te incomode, no era mi intención.

—Está bien.

Ahora que la tristeza se desvanece , me preocupa la tarea. Soy el más raro del mundo. El más surrealista.

—¿Ya hiciste la tarea?—Suelta para desviar toda la tensión que se encuentra en el carro.

Pongo cara de pocos amigos. Miro por el vidrio. Termino un problema para empezar otro. El nota la expresión de mi rostro.

—No la has hecho ¿verdad?. Tienes que aplicarte Abraham. Estás por reprobar y te das el lujo de no hacerlo. Lo tienes que hacer —Dice en tono autoritario.

—No tengo mente para hacerlo, puedo pasar el parcial con los trabajos que le he entregado.

—Yo digo que no.

Entramos a mi calle. A cinco casas de la mía le pido que pare.

—Aquí está bien , Gracias.
Antes de que diga algo más , quito el seguro y me bajo.
Esteban es alguien irritante. No puedo creer que allá aceptado que me trajera , no puedo creer que después de que me tocara mi pierna no pudiera pasarme de año. Entro a mi casa. Mi padre y Mi madre están sentados en el comedor. Cenando. No tengo ganas de hablar con ninguno de ellos , así que me voy a mi cuarto.

Placer Entre Lineas:Guarda Silencio. #1 [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora