Capítulo 21

9.7K 666 110
                                    

—¿A donde me llevas?

Vamos en la carretera. No a dicho ni una sola palabra desde que salimos de su casa. Supongo que ni el sabe a donde vamos.

—Es sorpresa.

—No sabes a donde ir verdad.

—No. no tengo idea de a donde van de cita los jóvenes. ¿Quieres ir a algún lado?

—Sorprendente , Ya te lo dije.

Se queda meditando un poco. Estaciona el carro en Walmart.

—En efecto , me sorprendiste.

—Aún no sabes lo que voy a hacer.

—Aún así está bien. Merezco un día mas de descanso.

Suena su teléfono. Saca un celular del siglo pasado , un pequeño teléfono de teclas para mandar mensajes de texto y llamar. Contengo la Risa , no puede ser , que el teniendo mas dinero tenga un teléfono así , y yo teniendo problemas económicos tenga uno más moderno. Aunque es cosa que no me importa mucho , pero si es muy curiosa. Cuelga y me mira confundido.

—¿Que tiene tanta gracia jovencito?

—Usas computadoras de última generación pero un celular del siglo pasado.

—Claro que usó un teléfono de gama alta. Este es solo para llamadas del trabajo. Ahora vamos a comprar unas cosas.

—Disculpe señor.

—Creo que alguien no va a pasar el parcial ni el semestre—Dice en tono serio.

—Calla perverso Sexual , ahora vamos a comprar—Miro a varias parejas , hermanos que parecen tener la edad de Esteban acompañados con sus hermanas de quince—¿No te da pena o miedo que te vean conmigo?

—Para nada. Solo estar contigo Vale la pena correr el riesgo de ser arrestado.

—Eres muy lindo.

El se queda impresionado ante mi comentario. Me mira y antes de que diga algo , avanzó a la entrada. Compra carne  , verduras , Helado de Vainilla , entre otras cosas , para luego regresar a su casa.

—¿Una cita en tu casa?

—Poco a poco. Aparte no se de citas , estoy haciendo un esfuerzo—Sonríe , desde la mañana que me revelo su "secreto" parece más relajado.

La oleada de confesiones me tiene consternado y confundido. Pero para nada asustado. Mi madre una vez dijo «Los jóvenes de ahora ya no se asustan con nada»  puede que verdad.

—Puedes dejar de pensar por un momento y ponerme atención—Ordena—¿Me puedes ayudar a cocinar?.

—¿No tienes alguien que te ayude?—Digo en tono de broma.

—Si , pero le di un mes de vacaciones.

—Que buen jefe eres.

—Se lo merece , es una buena tipa, aunque la extraño , soy malísimo para las cosas del hogar.

—Ya lo veo-Digo mientras pasó mi dedo por una mesita polvorienta.

—Que exigente eres.

—Manos a la Obra ,Jefe.

—Que inmaduro eres.

—No es mi culpa que te gusten menores.

—Ya—Pone los ojos en blanco , y lleva las compras a la cocina.

Su cocina es lo contrario a su cuarto. Aquí todo es blanco , Plata y con toques de varios colores. Hay una barra color blanca con detalles de madera. Detrás de ella todos los artilugios de las cocinas , pero más moderno. Una tarja , estufa , horno , microondas, refrigerador. Muchísimos cajones. Es muy luminosa. Pone las bolsas en la barra. Me mira.

—También esto es muy nuevo para mi.

—Para mi también. Jamás había salido en una cita con alguien mayor de veinte años.

—¿En serio?

—Si, me causa mucho estrés y alteración las personas mayores , altas y guapas , en especial los hombres.

—¿Yo no te causo eso? Así que guapos.

—Claro que lo haces. Me pones muy nervioso.

—¿Nervioso?—hay deseo en sus ojos.

El está detrás de la barra. Yo estoy sentado en un banco de metal al otro lado. Empieza a caminar lento , yo me tenso. Se posa detrás de mi. Se me recarga demasiado, rozando su miembro en mi espalda, lento.

—¿Ahora estás nervioso?—lo dice lento y con alta carga sexual.

—D-demasiado Señor Torres.

—¿No vas a escapar?

—¿Qué te hace pensar eso? Si no lo hice cuando me contaste aquello , que te hace pensar que lo haré ahora.

—Quiero sentirte.

Estoy ardiendo. De todos los ofrecimientos que eh tenido. Este es el que más deseo. Soy muy inseguro y no estoy preparado.

—Quiero conocerte más.

Se aleja rápido de mi. Lo veo. Está enojado. Tan voluble. Ahora si tengo miedo. Está hecho furia.

—Porque mierda no solo puedes decir que si y ya, solo quiero conocerte , quiero conocerte—Dice imitándome—Eres un chiquillo estupido , no todo en la vida son citas y flores—Está muy enojado.

Me duele lo que está diciendo. No tolero este tipo de actitudes.

—Eres un chico inmaduro disfrazado del profesor Perfecto , en verdad , está mierda de rabieta es muy inmadura. Si no quiero es no. Aún puedo demandarte—Su rostro cambia de aspecto , de enojo a confusión—Arregla tus mierdas mentales , cuando estes seguro me hablas.

Me dirijo a la salida. Pero el , una vez más , es más rápido que yo , me alcanza , me toma del brazo, se inca ante mi , muy nervioso, preocupado.

—Perdóname demasiado Abraham. De esto es de lo que te hable. La furia llega de la nada por cosas tan tontas. Es difícil vivir así. Perdóname te lo pido. Si ya no me quieres ver lo aceptaré , pero te pido mil disculpas , quiero luchar contra estos mil demonios que me asechan y no me dejan vivir. Es difícil , muy difícil Abraham.

Se me ablanda el corazón al verlo ahí. Todo lo que dice suena sincero. Quiero ayudar a este hombre que apenas conozco, pero no tengo idea de cómo hacerlo. Apenas soy un adolescente buscando ser amado , no buscando armar a alguien que está desecho de muchas formas.
Me agacho hasta donde está y lo abrazo. Es lo único que se me ocurre. Al tacto se pone rígido ante la acción ,para después apaciguarse y el abrazarme igual.

—Perdóname.

—Todos explotamos , unos más que otros, así que no te preocupes.

—Deberías dejarme aquí tirado. Creo que estoy cometiendo un error al meter a alguien tan Perfecto como tú a mi terrible mundo. Soy un profesor de Mierda.

—No lo haré. Ahora vamos a tener esa cita. Me urge conocerte más.

El sonrie.

Placer Entre Lineas:Guarda Silencio. #1 [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora