YO NO SOY ELLA

Capítulo 2

Capítulo 2

La bella mujer se quedó dormida a eso de las 6:30 am. Y se levantó pasado el mediodía ¿Qué demonios había sucedido en la madrugada? ¿Habrá sido su estúpida imaginación o realmente no estaba sola? Lo peor de todo era que ni siquiera se podía ir de aquel lugar, no tenía donde vivir y lo que ganaba no le alcanzaba para nada.

Se duchó y luego se vistió, arregló su cama y luego bajó al primer piso, todo estaba en absoluto orden. Suspiró y cerró los ojos, todo había sido parte de su imaginación.

<<Si, eso debió ser>> Se quiso convencer a si misma.

Comenzó a ordenar todo, lamentablemente su amiga no podría ir ayudarle ya que tenía que ver algunos asuntos en la escuela de su hijo, pero no había problema, _____ podía hacer eso sola.

El reloj marcó las 15:10 hrs. Había pasado la hora demasiado rápido, pero por lo menos ya tenía gran parte avanzado, aunque realmente la casa era demasiado grande, y sus muebles eran unos cuantos, le daba incluso vergüenza tener que invitar a alguien, había espacios vacíos, no tenía cuadros que adornaran las paredes, no tenía nada.

<<Que miserable soy>> dijo para si misma al mirar a su alrededor.

Fue a comprar algo para comer, su estomago estaba vacío y su cuerpo comenzaba a sentir las consecuencias de aquello. Regresó a casa a los pocos minutos, al entrar se sintió muy extraña, un frio cubrió su cuerpo y una sensación de miedo la invadió. Cerró la puerta y miró para todos lados, todo estaba en orden, pero algo capturó su atención y aceleró su corazón, unos pasos medianamente fuertes se sentían en el segundo piso. Tragó saliva ¿Sería algún ladrón?, no supo de donde demonios sacó valentía, pero subió las escaleras con mucho cuidado, evitando hacer ruido, al llegar al pasillo del segundo piso, los pasos cesaron, miró todas las puertas de las habitaciones, quizás había alguna entre abierta, pero estaban cerradas.

Cualquiera pensaría que realmente era una estúpida, pero puerta fue abierta, todo estaba en orden hasta que por último abrió la puerta de su habitación, todo estaba como lo había dejado, cerró otra vez la puerta y comenzó a bajar las escaleras, pero al llegar a la mitad, de reojo vio una sombra pasar, posó su vista rápidamente en aquel lugar, no había nada.

Todo lo que había sucedido quiso ignorarlo, pero en su mente rondaba todo aquello, comió lo que había comprado, y luego fue hasta la cocina, la cual aun faltaba por arreglar algunos detalles. Salió de esta y subió las escaleras nuevamente hasta su habitación, se había manchado la playera con salsa. Buscó entre su ropa algo limpio y luego se quitó lo que tenía manchado, en aquel instante sintió una respiración detrás de ella, se giró rápidamente y había… NADA.

Sus ojos se cristalizaron, aquello ya no le estaba gustando, estaba más que claro que nada era producto de su imaginación, había algo que habitaba su casa. Se puso la playera rápidamente mientras que sus lágrimas caían, pero muchas veces había escuchado que no había que demostrar el miedo o sino aquella cosa, fuera lo que fuera que habitaba su casa, se volvería mas fuerte.

—¡Seas lo que seas y aunque me quieras fuera de aquí, esta es mi casa! —Dijo al aire, quien la viera pensaría que estaba loca.

No pasó ni siquiera 20 segundos cuando en el baño se escuchó como el gran espejo se rompía, entró rápidamente y todo estaba en cientos de pedazos. Aquel ser no estaba con juegos.

Recogió todo con mucho nerviosismo, sus manos parecían verdaderas gelatinas, temblaban demasiado, quería ser fuerte, pero esto era mucho. Tiró a la basura todo el espejo y siguió con su tarde, acomodó otras cosas más y el reloj ya marcó las 20:50 hrs. Ni siquiera tuvo ánimos de comer algo, solo apagó las luces del primer piso y subió las escaleras hasta su habitación, encendió la luz y fue hasta el baño para darse una ducha rápida, salió envuelta en una toalla y luego se vistió, secó su pelo y se acostó. No se sentía capaz de apagar la maldita luz.
Miró de extremo a extremo su habitación, todo estaba en orden, pero de pronto algo totalmente horrible comenzó a suceder. Su ropa de cama comenzó hacer jalada hacia abajo, no pudo evitar soltar un grito de terror, ya no podía más, el miedo la había invadido. La luz se apagó y en ese instante ni siquiera pudo moverse para correr lejos, el miedo la tenía paralizada. No se veía absolutamente nada en la habitación, todo era completa oscuridad y un frio casi invernal se comenzó a sentir, comenzó a escuchar pasos, de pronto estos se detuvieron y su cama se hundió a su lado, sintió la respiración agitada de alguien muy cerca de su oído.

—No… No me hagas daño —Dijo con terror en su voz, tenía mucho miedo, sabía que aquella cosa o lo que fuera que estuviera a su lado, no era humano.

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Hola chicas, Espero que les haya gustado el segundo capítulo, se que el cap es muy corto, pero intentaré que los que siguen sean un poco más largos. U.u
Por favor comenten n.n