MI ASISTENTE PERSONAL (COMPLETO)

capítulo 12

Era muy placentero poder estar lejos de todos por un momento, hacía mucha falta el poder tener una vida normal dónde, pudiera divertirme sin miedo a qué me fueran a regañar por llegar tarde al trabajo, o sólo por joderme la existencia, como solía pasar. 

Alcancé a Hae en la nieve y ahí mismo, hicimos una carrera colina abajo para ver quién ganaba. Íbamos a la par, no quería seguir más adelante o atrás, quería ir a su lado escuchando su risa.  Ese chico parecía todo un pro en la tabla, se movía cómo si hubiera nacido en ella, cómo si siempre hubiera estado atada a sus pies y esta sólo se moviera.

Ambos llegamos al mismo tiempo exhaustos y con el pulso a lo máximo que daba. Antes de que alguno dijera alguna palabra, nuestro cuerpo nos pedía un pequeño descanso de tanta emoción por un buen rAto. Mi respiración se hizo más calmada y le miré con una sonrisa

  - ¿Cómo podremos saber quién es el perdedor si ambos llegamos igual? -

  - Jum, no lo sé, quizá hagamos un juego en la cabaña o algo, estoy muerto de cansancio, sólo quiero echarme a la cama y descansar un poco -

Asenti pues yo también necesitaba lo mismo. La idea de hacer algo en la cabaña no sonaba para nada mal, mínimo estaríamos más abrigado bajo la chimenea con una taza de chocolate caliente

Dejamos el equipo en una recepción cercana a nosotros. De ahí nos fuimos caminando hasta nuestro hogar improvisado, viendo los bellos árboles enormes cubiertos de nieve. Nieve que hace unos momentos disfrutábamos en nuestro juego.

Llegamos y lo primero que hizo Hae, fue aventarse a la cama boca abajo, dejando salir un suspiro, que más bien pareció un gemido. Me acosté a su lado , o mejor dicho, sobre su espalda escuchando como renegaba que me quitara de encima

  -¡Bájate Hyuk!¡Me estás encajando tus huesos! -

  -¡Claro que no! Eres muy cómodo, ¿Sabías? -

Seguí molestando hasta que tuve compasión de el y me acosté a su lado.

Estábamos frente a frente, viendonos fijamente. Me acerqué a sus labios , cortando toda la distancia posible hasta llegar a sus labios y poder besar estos. Mi corazón se aceleraba cada vez que los besaba, sentía toda una fuerte corriente eléctrica desde mis dedos de mis pies, hasta el último cabello que tenía.

Acaricie su mejilla y así profundizar más nuestro beso.  Pedí permiso a sus labios de atacar con mi lengua, quería saborear todo su interior, su rico aroma a fresa que siempre emanaba. Abrió su boca un poco Y sacó su lengua tocando la mía de una manera muy sexy, haciendo un perfecto beso francés, saboreando todo su interior que era una delicia.

Sin darme cuenta, nos estábamos tocando, estábamos disfrutando de las caricias que uno al otro propiciaba sin queja alguna. Me separé sólo un poco de él y así poder quedar encima suyo. Sus mejillas estaban rojas, al igual que los labios hinchados que ahora tenía por mis besos. Metió su mano bajo mi playera, tocando mi abdomen con torpeza y miedo, pero aún así, se sentía muy rico.

Solté unos jadeos y mientras me tocaba, me deshice de mi ropa superior, así cómo de mis pantalones. Hae subió sus manos hasta mi pecho, acariciando mis pezones que se pusieron duros en ese momento. Los apretó con fuerza , haciendo que un quejido saliera de mis labios.

  - Perdón -

Susurró apenado y sólo le sonreí, No importaba si dolía o no, en ese momento tenía a quien tanto quería a mi lado, y ese era Donghae. Con agilidad también logré desvestirlo , quedando completamente desnudo ante mis ojos. Era mucho más perfecto de lo que lo había podido imaginar.