Cold as nobody (Camren)

Capítulo 23

Narra Lauren

-Ésta es... ¿la habitación de Sofía?

-Sí, déjame sola.

-Claro que no, estás mal. ¿Te has acordado de ellos? -me senté junto a ella y se incorporó rápidamente.

-¿Y sabes de quién ha sido la culpa? 

-¿Qué intentas decir?

-Que esto es lo que no quería, por lo que no tenía a nadie cerca, has estado en peligro parece que atraigo a la muerte o a qué mierda sé yo.

-No seas imbécil, las cosas ocurren y punto.

-No, Lauren, creo... creo que lo mejor es...

-Ni lo digas, no me apartaré de tu lado, Camz, nunca.

-Ésta noche ha sido peor que los dos años acompañada de una botella y la soledad. Lo prefiero.

-No me puedes hacer esto, Camila.

-Estarás mejor sin mí, hazme caso. -me abrazó. -Si aún así quieres quedarte esta noche aquí estás en todo tu derecho. 

Se volvió a acurrucar en la cama. No podía seguir discutiendo con ella, salí en silencio de la habitación cerrando la puerta. Las lágrimas corrían por mis mejillas aterrizando en el suelo, decidí llamar a Alexa, ella me consolaría aunque fuese a través de un teléfono. 

-Hola, buenas noches, hotel El Camino al Señor, qué desea. -oh, no recordaba que era viernes y que seguramente se habría bebido hasta el agua del canario que tiene.

-Alexa, ¿estás muy borracha como para no poder consolarme?

-¿Qué ha pasado? -trató de vocalizar mejor.

-Camila... estoy en su casa... me...

-OOOOOH, ESA BLANCA, SE VA A CAGAR, VOY PA' ALLÁ.

-NO, NO, ESPERA. 

Tarde, ya había colgado. Maldita sea, esta mujer no está muy bien de la cabeza normal pues ya en estado ebrio... Me puse a ver la tele un rato para tratar de entrener mi mente pero coincidía que todo lo que echaban eran pelis románticas y dramas, POR QUÉ. Tampoco fue un gran problema ya que Alexa tardó unos escasos 10 minutos en llegar.

-¿Cómo has llegado tan rápido? ¿No habrás cogido así el coche, no?

-Hay una fiesta en casa de Juliana.

-Diana.

-No me suena.

-No, digo que no es Juliana, sino Diana.

-Ah, bueno sí, esa. He venido corriendo.

-Tampoco hacía falta.

-HE TARDADO MÁS PORQUE NO QUERÍA DERRAMAR LA BEBIDA PORQUE ES LA ÚLTIMA CON WHISKY QUE QUEDABA. -cierto, llevaba un vaso de plástico en la mano.

-¿Por qué gritas?

-Tengo la música metida en los oídos y me confundo, perdón. Pero el tema importante es, ¿dónde está la niñata esa?

Volví a recordar lo sucedido y empecé a llorar de nuevo fuertemente, Alexa me abrazó y nos dejamos caer en el sofá. Estuvimos así bastante tiempo, después le conté todo lo ocurrido y por qué Camila actuaba de esa forma.

-¿Sabes qué vas a hacer?

-Bu...

-Calla, no es una pregunta lo siento si te lo ha parecido, te voy a decir qué vas a hacer. Vas a fingir salir con otra chica, Camila no podrá soportarlo y se replanteará las cosas.

-Ni hablar, lo que necesita encima es que yo la hunda más.

-La controlaremos, yo tampoco quiero que se haga daño. Mañana se lo diremos a las chicas y entre todas te ayudaremos.

-Pero sabrá que es mentira, sabe que estoy hasta los huesos por ella.

-Pero aún así dolerá, porque no sabrá si estas realmente saliendo con otra para sacarla de tu cabeza y esa otra podría ocupar su lugar... ¿entiendes?

-Ya... vale. No se me ocurre otra forma, porque cuando se cierra así es imposible hacer nada. En dos años no he podido hacer nada.

-Por qué no te vienes un rato a la fiesta de Mariana.

-DIANA.

-Mira que estás pesada con la Diana esa.

-Qué... mira mejor déjalo. Y no, no quiero ir, prefiero asegurarme de que Camila no comete ninguna locura.

-Pues mañana estás obligada a salir, no quiero que te amargues.

-Vale, mañana soy toda tuya.

-Genial, te quiero. FIESTAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA. 

Y allí va otra vez, corriendo con el vaso en alto... Dios, mi estómago ruge como si no comiese hace años. Camila y yo comimos un sandwich antes de ir a la playa pero de eso hace unas 4 horas, prepararé algo y le subiré por si acaso quiere.

Cené en el salón y antes de dirigirme a mi habitación, la suya en este caso, pasé a ver cómo estaba y si tenía hambre. Pero cuando abrí la jodida puerta no estaba.

-Mierda, mierda, mierda.

Narra Camila

Poco después de la conversación con Lauren me entró un hambre brutal así que decidí ir a la cocina, pero mientras bajaba las escaleras escuché una voz que reconocí era de Alexa, continué mi camino hasta que distinguí mi nombre y me detuve a escuchar. Me enteré acerca de sus planes y la ira me inundó, ¿de verdad haría eso sabiendo el daño que me provocaría? Muy bien, "amor", si quieres jugar yo soy el peor rival que puedes tener. Hace tiempo que no utilizo la ventana, espero que esta vez el cálculo no me falle.

Narra Lauren

Era inútil buscarla, podía estar en cualquier parte y ni siquiera me cogería el móvil. La esperé en el sofá. No estuvo mucho tiempo fuera, llamaron a la puerta al cabo de una hora más o menos. Cuando abrí entró agarrada de una chica que casi no podía mantenerse casi en pie, ella parecía estar borracha también.

-Katie, te presento a mi exnovia-amiga, Lauren.

-Encantada jiji.

-Ven, vamos. -comenzaron a subir las escaleras, entonces Camila que iba en segundo lugar se giró y me hizo gestos de burla moviendo la cadera en señal de que se la iba a tirar. No me podía creer lo que estaba pasando.

Narra Camila

En realidad ni estaba borracha ni pensaba hacer nada con Katie, simplemente dormir. Pero así Lauren aprendería la lección. Nos acomodamos en la cama y no tardé en oír un gran portazo, un portazo que hizo vibrar los cimientos de la casa.