Cold as nobody (Camren)

Capítulo 24

Narra Camila

No volví a saber nada de Lauren hasta el lunes en el instituto, cuando iba tan tranquila a mi taquilla y escuché unos gritos a mis espaldas, era su grupo, ella incluída, discutiendo algo en alto y de repente Alexa salió del círculo que la rodeaba y empezó a correr hacia mí. Los ojos se me abrieron como platos y no sabía que hacer. Detrás de ella venían las demás corriendo pero no hacia mí, más bien para detenerla a ella. Justo cuando pensaba que besaría el suelo por tercera vez en menos de cuatro días Ariana apareció como un ángel para apartarme. Sus amigas pudieron sujetarla al fin una vez la esquivé.

-Eres una hija de puta, Camila, una mujeriega de mierda y vas a morir sola.

-ALEXA, BASTA. -le gritó Lauren.

-¿Ahora eres un toro, Alexa?

-Camila, no calientes las cosas, simplemente vete. -me rogó Vero.

-Como ordenes, vámonos, nena.

Le cogí la mano a Ariana y nos marchamos. De reojo pude ver como todas se quedaban de piedra y Alexa seguía diciendo insultos en alto. Llegamos en silencio hasta mi taquilla. 

-¿Y bien? ¿Puedes explicarme por qué pasas de odiarme a cogerme de la mano en un par de días? -me preguntó apoyada en la pared.

-Ahora tengo prisa, ¿podemos comer luego juntas y te explico? ¿Te espero en la cafetería entonces? -se sonrojó.

-Cla... claro. Hasta luego. 

Si Lauren pensaba que mi jugada de anoche era la única se equivoca, esto no ha hecho más que empezar, y Ariana acaba de conseguir el papel protagonista.

Narra Lauren

No entendía absolutamente nada. No he estado tan confusa en toda mi vida, de verdad. ¿Ariana? ¿Nena? Alexa interrumpió mis pensamientos, el descanso acababa de empezar y por ahora sólo estábamos las dos en la mesa de la cafetería.

-¿Vamos a hablar con las chicas de mi plan?

-Ahora mismo no puedo pensar con claridad.

-Pues parece que ellas dos se lo pasan muy bien.

Miré en la dirección que me señaló para encontrarme con una sonriente Ariana que no podía quitar la cara de tonta enamorada y al otro lado de la mesa Camila, contándole algo. De repente aparecieron las demás.

-Mi profesor de Matemáticas es racista.

-Normani, no es racista, no puedes intentar convencerlo de que te haga media con un 2 y un 0 en los exámenes.

-NO ME LO PUEDO CREER ALLY, ¿TÚ TAMBIÉN RACISTA?

-No puedes justificar todo porque seas negra. -le dijo Dinah.

-No puedo justificar todo porque soy negra porque soy negra, ¿no?

-Ejem, ejem... chicas. -Alexa atrajo la atención de todas a mi cara de alma en pena.

-Oh, Lauren... cómo estás. -preguntó Dinah.

-Todo lo mejor que se puede con eso -señalé la mesa de Camila- riendo cada 2 minutos. Todas la miraron pero sus caras se pusieron muy pálidas.

-Quizás hace 2 minutos estaban riendo pero ahora... -dijo Vero con la cara descompuesta. Empecé a darme la vuelta.

-NO, NO, NO, NO. -gritaron todas. Y entonces lo vi.

-Dime, ¿sigues negándote ahora a mi plan? -me preguntó Alexa al oído.

-Búscame a la mujer que pueda hacer retorcerse de celos más fuerte a Camila Cabello. 

Narra Camila

Me tocó almorzar con Ariana apesar de que hubiera pagado por no hacerlo. Al principio sólo hablábamos de tonterías como por qué las palmeras de chocolate se llamaban así y no corazones, hasta que llegamos al tema importante.

-Bueno, Ariana, esto es difícil para mí. ¿Sabes que he dejado a Lauren? Por eso la pelea de hoy.

-No tenía ni idea. ¿Y por qué? Siempre se os vio muy unidas.

-Digamos que fue más bien una amiga con la que llegué a tener derecho a algo más. Mi soledad me empujó a ello. Pero la chica que realmente llamaba mi atención no era ella.

-Pero te estás desviando del tema, yo quiero saber por qué ahora estás así de normal conmigo otra vez.

-Espera, joder, dame tiempo. Supongamos que me doy cuenta que realmente necesito a esa chica y me odio por estar con otra, y ese mismo día sucede algo que me hace descargar la tensión acumulada por esa misma razón, y la descarga le cae a esa chica.

-...

-No sé si lo estás entendiendo.

-Lo que entiendo es que estás deprimida por romper con tu novia y tratas de arrimarte al primer ser vivo que sabes que no te rechazará porque se muere por ti, y eso es horrible. -se levantó y cogió sus cosas, pero la agarré rápidamente del brazo poniéndome también de pie.

-TE LO JURO, POR FAVOR, CREEME. HAS SIDO TÚ DESDE EL PRIMER DÍA QUE NOS CONOCIMOS EN LA FIESTA DE GEORGE.

-DEJA DE MENTIRME. -me golpeó en el pecho con sus delicadas manos mientras lágrimas comenzaban a brotar de sus ojos. Pude notar como la mesa de Lauren me observaba de repente, todas a la vez, menos ella. Este era mi momento.

-Si no me dejas hablar a mí deja que ellos lo hagan. 

Y entonces la besé, no se resistió en ningún momento, relajó sus manos dejándolas caer en mi pecho. Entreabrí los ojos para ver a Lauren mirándonos.

Perfecto.