Cold as nobody (Camren)

Capítulo 38

Narra Lauren

A juzgar por la luz que entraba a través de la ventana debía ser tarde, no demasiado. Estiré mi mano sobre la cama aún con la cabeza ladeada tratando de encontrar el cuerpo de Camila. Me soprendió el descubrir que no estaba. Dios mío, y si se ha largado...

-Oh, veo que está despierta. -mi tía Ana estaba en la puerta, la cual estaba abierta. -¿Has dormido bien?

-Excelente, ¿y Camila?

-Esa chica es una maravilla, lleva trabajando desde las 8 de la mañana.

-¿Trabajando?

-Se levantó, habló con Richard y un rato después salió de su habitación con su traje de jardinero remangado por todos lados, estaba adorable. Dijo que iba a arreglar los jardines de todo el pueblo, cosa que creo es imposible. -sonrió y se fue.

-Esta chica está loca... -me levanté rápidamente y me metí en el cuarto de baño a despertarme de una vez por todas. 

Mientras bajaba la escalera en dirección a la cocina traté de llamarla pero no contestaba al teléfono. Cogí un pastel de chocolate y lo deboré. Sólo Lucía estaba en el salón viendo la tele mientras tomaba un tazón de cereales.

-Ey, ¿ha vuelto Camila?

-No, lleva toda la mañana fuera. Con el traje de jardinera se veía ROSA CON ESPINAAAAAAAAAS.

-No te preocupes, cariño. -me dijo mi tío que pasaba en ese momento por la sala. -Teniendo en cuenta la forma que tenía de comer ayer seguramente esté aquí en cuanto huela el delicioso plato que está preparando tu abuela con mi ayuda. -me guiñó un ojo.

-Bueno... no puedo hacer nada mientras tanto. -me senté en el sofá, admirando los maravillosos dibujos "Bananas en pijamas"...

Dos horas después, 13:15 de la tarde.

Todos prepárabamos ya la mesa para comer y Camila aún no regresaba, empezaba a preocuparme de verdad. Pero entonces llamaron al timbre y corrí hacia la puerta. Al abrir me encontré a mi novia toda llena de barro, restos de hierba y Dios sabe qué otras cosas.

-Sabes que no me gusta despertarme sola... 

-Perdóname, mi amor. -me contestó felizmente. -Te daría el beso de buenos días pero dudo que te apetezca mucho con toda esta suciedad por enci... -la callé con un beso.

-Yo te beso hasta en esqueleto, idiota. Anda entra. -me eché a un lado.

-¿Tengo tiempo para una ducha? -preguntó observando a mi familia colocar los cubiertos.

-No es cuestión de que tengas tiempo o no. Debes hacerlo. No pienso dejarte que sientes el culo en mis sillas así. -le contestó mi tía Ana. Vaya, parece que se llevan muy bien.

-Ehto eh eselente. -le contestó con un acento extraño, imitando a los pueblerinos de aquí, mientras corría escaleras arriba. -RICHARD. -gritó.

-¿Sí?

-GRACIAS. -y escuchamos como una puerta se cerraba. Me giré para encarar a Richard, quien sonreía.

-No la dejes ir nunca. -me dijo.

Narra Camila

Mientras el agua recorría mi cuerpo no podía parar de pensar en lo feliz que haría a Lauren con el dinero que había obtenido hoy. El cual era sorprendente ya que los jardines aquí eran amplios, por lo que llegaron a pagarme hasta 100$, y teniendo en cuenta que hice alrededor de casas en un tiempo récord... 

Ese dinero, junto a algunos ahorros, que recuperaría más adelante gracias a mi trabajo en el club, la haría la chica más feliz del mundo, por lo que también me lo haría a mí.

El resto del día fue de maravilla, ya me había aclimatado a estar allí, y después de la comida incluso vimos todos juntos una película. Por la tarde estuvimos jugando a juegos de mesa, como extrañaba esto... Finalmente ya entrada la noche, mientras la cena era preparada Lauren y yo salimos a dar un paseo. 

Íbamos cogidas de la mano y notaba su mirada intensa en mí mientras caminábamos.

-¿Qué miras?

-A ti. Eres mi cosa favorita para mirar.

-Mi cosa favorita para mirar es la pizza.

-¿AH, SÍ? -soltó mi mano fingiendo enojo y comenzó a andar en dirección contraria.

-DÓNDE VA, USTED. -la retuve.

-Suéltame o grito "policía".

-No serías ca...

-POLICÍA, POLICÍA, ALGUIEN INTENTA SECUESTRAR A ESTA BELLA DAMA, POLI... -le tapé la boca y ambas empezamos a reír. Se giró y me abrazó. -Mañana por la mañana diremos adiós a todo esto, ¿lo has pasado bien?

-Mejor de lo que esperaba, como tú decías, son buena gente. Muy buena.