Luego de sentir esa extraña sensación en mi estómago, volvi a mi asiento como si no hubiese sentido nada.
¿Habra él sentido lo mismo? ¿O sólo soy yo? Nunca había cruzado palabra con alguien tan grosero y mal educado como él, por lo cuál siento que debió haber sido eso.
Wesley revisó los test unos minutos y luego me llamó.
-¿Me puede decir que significa esto?- dijo mostrando la hoja de mi compañía anterior.
-Hmmm...- no sabía qué decir.
-¿Por qué dice esto?- señalando a la opinión que puse en su hoja.
Respiré y me tranquilizé. No iba a dejar que me castigen por culpa de este tipo.
-Ok, escuche, yo le insistí y en serio que lo hice, pero este tipo no es más que un maleducado. ¿Vio qué puso en mi hoja?-
Sin responder, buscó la hoja.
-Oh...- alzó las cejas- Muy bien, Sr. Hemmimgs -él miró- acá, ahora.
Y se levantó de su asiento de manera fastidiosa y caminó hasta donde estaba.
-Expliqueme esto ahora- Le pasó mi hoja.
-La observó- ¿Qué tiene de malo? La estoy felicitando y deseandole que ojalá no se queme.
Já, pero es que este tipo no puede ser más sin vergüenza.
-No sé si usted sabe, pero entre nuestras reglas de oro en Saint Bosc School está la convivencia. Se van a disculpar y entregarme una hoja como corresponde.
-No lo haré- respondió
-¿Por qué?
-No me voy a disculparme por desear el bien y felicitar.
Vale decir que desde que se levantó hasta ahora, yo lo único que hacía era parecer dura ante este tipo. No me dejaré intimidar ni mucho menos me disculparé.
-¿Y usted que hará al respecto?- dijo Wesley dirigiendose a mi.
-No me disculparé con alguien que fue grosero conmigo.
-¿Así que ninguno se disculpará?- esperó unos segundos, sin respuesta- Muy bien, castigados.
-¿Qué? ¿Por qué?
-río sarcasticamente- No me lo pregunte, señorita.
-Como sea- habló el tercero y procedió a tomar asiento.
Simplemente di vuelta los ojos y me senté.
Muy bien, castigada el primer día de clases. Genial.
Giré para sacar materiales de mi mochila y este tipo me miraba.
-Imbécil- musité.
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ANTÍTESIS.
FanfictionEra la peor pesadilla del mismísimo diablo, en un disfraz de un humano tan precioso y exquisito como lo era romper las barreras de lo que toda la vida era un temor y un trauma. Pero a la misma vez era tan malévolo, frío y dominante. Haciendo de tod...