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13 de julio

Perdón por tardar tanto en volver a escribirte. Las cosas no salieron muy bien el sábado y estuve juntando fuerzas para contarte todo. Todavía hoy no puedo escribir esto sin largarme a llorar.

Fuimos al cine y nos sentamos los cuatro atrás de todo. Apenas empezó la película Marcel me abrazó y me dio un beso. Yo le respondí como había practicado con Sofía y se ve que le gustó.

Al ratito me pone la otra mano en la pierna y al otro ratito ya estaba debajo del vestido, con los dedos me rozaba la concha por encima de la tanga. Yo lo dejé porque no sabía muy bien cómo reaccionar y algo me gustaba también. Tenía vergüenza, un poco porque ya me sentía un poco mojada y otro poco porque encima le estaba mojando la bombacha a mi amiga y se la tenía que devolver así, sucia (no la podía traer a mi casa, si mis papas la veían me mataban, y si la veía Javier se pajeaba o se la ponía en la boca sin saber que los flujos eran mios)

Pero después se desabrocho el pantalón, agarró mi mano y me dijo que se la tocara por arriba del bóxer. Dudé un poco pero me ganó la curiosidad y le mandé mano. Marcel no se conformó y saco la pija ahí nomás, en el medio del cine, decía que no nos estaba mirando nadie y que yo le gustaba mucho y esas cosas; pero yo no me sentía bien en esa situación. Entonces quise sacarle la mano de la tanga pero me agarró la mano más rápido y me la llevo a su entrepierna.

Así fue cómo toque mi primera verga.

Estuvimos así un rato: yo casi pajeándolo a él y el rozándome la concha con los dedos. No te voy a decir que no me gustaba en ese momento, era algo que nunca había sentido pero entonces se complicó: Marcel sacó su mano, me agarro la cara, me dio un beso y me dijo: "Chupamela..."

Yo no quería a hacer eso ahí...

Pero eso no fue nada. Lo que siguió fue peor...

Perdoname Marco pero no puedo seguir escribiendo más por hoy. Siento que me duele el alma. Me siento tan chiquita ahora.


Cuando junte más fuerzas te voy a contar mejor.

Primero violaron su menteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora