Mi Amor O Mi Verdugo.

capítulo 14.

ISABELLA.

Desperte en sus brazos sintiéndome amada, no podía ni quería negarlo estaba perdida por este hombre que ni en mis mejores sueños hubiera podido imaginarlo, a su lado mis problemas y tormentos se sienten más fáciles de sobrellevar.

Me levante procurando no despertarlo, se veia tan bien, tan relajado, tan... sexy, Erick provocaba en mi el vivo deseo nunca me imagine desear tanto a alguien después de lo que pasó, por supuesto no es lo mismo, el me mostro el amor en el acto, hacer el amor es más que juntar dos cuerpos, es dejar el alma en cada caricia, cada beso, cada contacto por más mínimo que este sea, lo deseo con locura, lo amo con locura, no logro visualizar a otro hombre en su lugar, me niego y mi cuerpo lo reclama a él y nada más a el.

Me meto al baño a darme una relajante ducha, cabe decir el buen humor que me dejo mi futuro esposo, me seco el cabello frente al espejo, me observo detenidamente, tengo encima un par de kilos que para mi no pasan desapercibidos estoy a menos de dos meses de mi boda, si sigo comiendo a como lo hago Erick tendrá la razón rodare como una bolita por la iglesia, sonrio ante mi pensamiento.

Salgo del cuarto de baño, Erick aún duerme, tomo mi teléfono y me encamino a la sala, miro 6 llamadas de Leah, 4 de un número desconocido y 3 mensajes, decido marcarle a Leah.

-Isaaa..! -grita acelerada.

- Leah..? Que pasa? Estas bien? -me preocupo.

- Ni que me digas, he pasado un susto de muerte, literal casi muero, voy de camino a casa mi viaje se cancelo.

- Que dices? Como que se cancelo que paso, tu estas bien ?

- Si muñeca estoy bien, aun no dejo esta vida tienes pelirroja para rato pero ni te imaginas, escucha llevaba dos horas viajando sabes como soy me encanta ir picando mientras viajo, había estado tomando mucho líquido y tenía que ir al baño, aparque el coche en mini super en el camino, justo cuando me bajo y cierro la puerta alguien se lanza sobre mi y me lleva directo al suelo, me llevo el diablo tú no sabes estaba dispuesta a matar a esa persona cuando me percato que una camioneta se había pasado llevando mi auto, lo dejo hecho trizas, el imbecil venia borracho no podía creerlo, el maldito casi me mata!! - grita histérica- el punto es que si no ha sido por Tylor quien sabe si la cuento...

- Dios mio!! No puedo creer lo q me dices... gracias a Dios estas bien, no puedes abandonarme me escuchas, te quiero Leah - estoy al borde de las lágrimas no quiero perder a nadie más, no puedo, Leah no, es mi hermana.

Estoy muy emotiva todo me ha caido de golpe y pensar en que Leah pudo haber muerto me llena mas de angustia..

- Tranquila mi Isa, estoy bien muñeca, de mi no te libras fácilmente... yo no pienso dejarte sola, juntas en todo recuerdas? - su voz suena entrecortada.

-En todo Leah!- limpio mis lágrimas.

- Estas muy llorona, no estas en tus dias? - escucho risas al otro lado de la línea una aparte de la de ella.

- Que graciosita!... quién mas esta contigo?- se queda callada.

-Bueno pues, recuerdas que te dije que alguien me salvo la vida? Voy con Tylor de camino se ofrecio a llevarme y vamos en su auto porque al mio ni con el seguro lo miro como era -suspira- ya era hora de uno nuevo no crees? - rie.

- Leah Atenea, te conozco y no vienes con él sólo porque te salvo la vida como dices y no cambies el tema, algo bueno debe tener - digo sonriendo lo sé, la conozco ella es llevadera con quien quiere y esto sono muy fácil como para ser solo agradecimiento.

- Ni te imaginas, ya lo verás cuando llegue - dice pícara.

- Lo sabia - ambas estallamos en carcajadas.