EXTRA 4.

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Luciana se probaba el vestido que había elegido para el casamiento de su hijo.

Su pequeño ya tenia 22 años, pero para ella seguía siendo su bebé.

Habían venido a casarse a Uruguay, era un país tan lindo.

Su pancita de varios meses resltaba, el vestido rosa pálido que había elegido era algo ajustado.

Le encantaba.

Tocaron su puerta, dijo un "pase" y ahí entró el padre de su hijo y la niña que venía en camino, su esposo.

-Te ves preciosa.- Apareció atrás abrazándola por la cintura y tocando su panza.

-Tu te ves tan guapo.- Contestó besándolo.

-Nunca imaginé vivir esto y me alegra que sea contigo, el amor de mi vida.

Mauro la dió vuelta admirando su belleza, la admiraba como persona y madre.

A su esposa, mejor amiga y doctora.

Toco la panza y sintió una patadita de la hermosa bebé que se encontraba allí.

-Tenés que ir con nuestro hijo. Dile que lo amo, que estoy orgullosa de él.

-Le dire, ten cuidado mi amor.

Duki besó su mejilla y Lu salió, bajó las escaleras con sumo cuidado.

Los ascensores la hacían marear y no quería vomitar el lindo vestido que tenía puesto.

Caminó por la iglesia, rápidamente saludo a Igancio el cual estaba nervioso, sus manos sudaban.

Se sentó al lado de sus suegros.

Sandra le sostuvo la mano.

-Papá estoy nervioso.- Bas no dejaba de mirarse al espejo, no daba más de los nervios. -¿Estabas nervioso cuando te casaste con mamá?

-Demasiado, mis manos sudaban a más no poder, pensaba que al llegar ella no estaría. Que se había arrepentido pero cuando la vi, con su vestido blanco de sirena y vos a su lado, todo mi miedo desapareció y solo sentí felicidad. Veras a esas personas allí que te aman, apoyan y ese nerviosismo desaparecerá.

-Te amo.- Abrazó a su padre.

-Yo también hijo, es hora.

El novio entraba por la iglesia y ahí lo esperaba el amor de su vida.

Su padre tenía razón, el miedo que alguna vez sintió desapareció.

En ambas partes.

Mauro se sentó al lado de su esposa y sostuvo su mano libre.

"Puede besar al novio"

Y así sucedió, los novios se besaron.

Todos aplaudían y gritaban.

Bas llegó al lado de sus padres abrazandolos junto a su ahora marido, Ignacio.

Le dió un beso a su futura hermana y saludo a los otros presentes.

Lu, dam, ecko y Dani lloraban.

Mientras que los hijos de estos nombrados se avergonzaban.

-Te amo Scot.

-Te amo Lombardo.

Ambos se besaron, como el primer beso que se dieron ese día tan especial para ambos.

El día que todo cambió entré ellos.

Lucy »DukiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora