Completa / Re subiendo
Scarlett Dinovik, una chica fría, distante, sin sentimientos.
Se enfrentará a una vida llena de peligros, problemas, muertes y sorpresas. Se verá teniendo sentimientos como odio, frustración, enojo, alegría, tristeza y amor.
E...
-Pasajeros del vuelo 637, con destino a Los Ángeles, favor de abordar el avión.- Me levanto tratando de quitar la pereza que acumulé estas dos horas sentada, esperando a que el avión llegara. Tomo mi mochila y acomodo las Ray Ban correctamente.- Repito, pasajeros con destino a los ángeles en el vuelo 637, favor de abordar el avión.- Camino con el boleto en mano directamente hasta la fila que debo hacer, donde a cada segundo se aglomera de más pasajeros.
- ¿Señorita? - Muevo mi cabeza de un lado a otro de manera rápida, sacándome de la distracción en mi mente, la miro de forma desconcertada. - Su boleto por favor. - Siento como de repente me pesa de manera terrible la mano en la que llevo el boleto, aunque muy a mi pesar, se lo entrego sin objeción. - Que tenga un buen viaje. - Me dedica una sonrisa a lo cual solo devuelvo un leve asentimiento, tomo mis cosas y me introduzco en el pequeño túnel que me lleva a la puerta del avión.
-... 1... 5... ¡12! - Mis asientos son los últimos de primera clase, eran los únicos doble disponibles ya que odio la compañía. Me pongo nuevamente los audífonos y dejo que mis canciones se reproduzcan de manera aleatoria. Miro a través de la ventanilla, el día está bastante nublado y los truenos se alcanzan a escuchar por sobre 7 years de Lukas Graham.
Visualizo las grandes gotas que golpean mi ventanilla y amenazan con ser una gran tormenta. El cielo se ilumina de forma esplendorosa entre varios tonos morados y azules, el avión comienza a tomar rumbo por la pista tambaleándose sobre el asfalto antes de alzarse para llevarme a mi nuevo destino.
- Prometo vengar por ti...- Una pequeña lágrima se escapa de mi ojo izquierdo, mientras apoyo mi cabeza sobre el asiento y me dejo ir entre los brazos de Morfeo.
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Siento una pequeña molestia en mi hombro mientras resuena una voz a lo lejos, que se hace más clara mientras los movimientos a mi cuerpo se intensifican. - Señorita... Señorita Dinovik...
Salgo de mi ensoñación de manera brusca y miro con gesto rápido a mi izquierda, en donde una azafata se encuentra un poco inclinada con gesto de pena por tener que despertarme.
- ¿Ya hemos llegado? - Somnolienta miro a todos lados con rapidez, pero frunzo el ceño al ver que seguimos en el aire y la miro interrogante.
- No señorita, pero estamos a punto de aterrizar, por favor, abroche su cinturón.
Me acomodo de manera recta en el asiento, abrocho mi cinturón y pauso la música. Hago una mueca al ver que dejarla correr, dejó poca batería en mi móvil. Recuerdo haber metido un cargador portátil a mi bolso y no dudo en conectarlo.
Espero pacientemente el aterrizaje, que no demora más de cinco minutos. Al bajar, soy la última en hacerlo. Decido pararme a la mitad de las escaleras al ver la increíble vista que me proporciona el lugar, un cielo totalmente despejado brillando en varios tonos del atardecer. Respiro hondo cuando la brisa me pasa por el lado, sintiendo ese olor salado del mar.
