Capítulo 31 -•- Vamos a la fiesta

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        —¿Iremos a la fiesta verdad? —preguntó Michael, ya he perdido la cuenta de cuantas veces lleva preguntando; siempre hay un no de por medio.

      —No lo sé —conteste.

      Mi herida no volvió, los malestares se fueron y estoy bien, llevo una semana bien y sin asesinar a alguien más y me da miedo hacerlo si voy a la fiesta.

        —¡Vamos! Nunca vamos a una.

        —Porque las fiestas no son lo nuestro.

       —¡Caroline, vamos esta vez y ya! —con sus insistencias me hace cambiar de opinión.

        —Bien, vamos, pero que no se te haga costumbre.

        —Sabía que sederías —me abrazo y dio un beso en mi mejilla.

       —Tú sólo me quieres llevar por su Helena no va.

        —Sí, pero también para que te diviertas.

        —Si claro —rodé los ojos.

       Al día siguiente de que la herida fue sanada, desperté rara, no puedo dejar de pensar en mis manos manchadas de sangre por ir asesinado a cada persona que veo. Hay rumores de que Jade me quiere golpear y acabar conmigo, no sé porqué, pero ha dejado que toda la escuela se entere y eso que no viene aquí, no me molesta en absoluto, puedo acabar con ella en un abrir y cerrar de ojos.

        Nos adentramos a la cafetería para comer algo, al pedir las cosas nos dirigimos a una mesa donde ya está Dante, Michael se sentó conmigo enfrente de él.

        Al dejar mi manos sobre la mesa está comenzó a elevarse, Dante y Michael empujaron rápidamente la mesa hacia abajo otra vez, por suerte nadie más vio.

       —¿Van a la fiesta? —pregutó Dante cuando comenzamos a comer.

        —Está claro que sí ¿verdad Caroline?

        —Contra mi voluntad pero voy, ¿tú vas?.

        —Sí, voy con Ivan aunque me abandones, él sólo va por las chicas —no me sorprendería que así fuera.

        —Tú vas por las chicas también? —de reojo pude ver como una sonrisa traviesa se forma en los labios de Michael.

        De tan sólo pensar se Dante estará con alguna chica compartiendo babas me dan celos y ganas de matarla, quiero golpearme contra la mesa por esos pensamientos y por haberlo dicho.

         —Voy por una en especial, la cual parece no captar indirectas. —Lo miré con los ojos entre cerrados, me sostuvo la mirada. Nuestro contacto visual acabo cuando Michael habló.

       —Yo pienso decirle a Helena que sea mi novia —dijo sonriente.

       Pero entonces yo lo contradije.

       —La conoces hace poco.

        —Pero me gusta.

        —Pero no la amas... ¿Qué caso tiene estar con alguien que no amas?.

        Algo extraño pasa, es como si pudiera saber lo que pasa por Michael o lo que siente... todo, como si estuviéramos conectados y por eso sé que él no le ama, algo se lo impide... algo como... un viejo amor.

        —¿Qué pasa contigo? —me preguntó un tanto molesto.

        —Digo la verdad, algo te lo impide, tú no le... —Entonces calle al darme cuenta del daño que podía provocarle— olvídalo... No me hagas caso, ve por ella, haz que sea tu chica.

El bosque ll •Transformación•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora