♥El Rompe Corazones ♠TodoBakuDeku★

Capitulo 2: ★Mi esposo★

Habían compartido la deliciosa comida y unos cuantos besos mas llenos de placer, Izuku se sentía tan feliz, sus manos recorrían el bello rostro de su amante con interés, delineando esos carnosos labios que lo hacían perder la cordura.

Pero todo comienzo tenia un final y así como había llegado debía de irse...

Katsuki tomo su rostro y beso sus labios metiendo su lengua con afan sediento por compartir ese glorioso calor, e Izuku se movía al compás de sus besos haciéndolo gemir y ceder ante sus caprichosas caricias.

Deku se separo de él sabiendo que si seguía así perdería la noción del tiempo y ya era hora de volver, su esposo de seguro lo estaba esperando.

-Ka..cc..han..-susurro entre breves jadeos, mientras con la poca fuerza de voluntad que le quedaba lo miraba a los ojos y trataba de detenerlo.

Katsuki gruño molesto, el que lo apartara de esa manera solo significaba que debía de irse, a como siempre...

Maldijo en voz alta e Izuku sonrió por ello, era inevitable que no se enojara, por algo era un hombre posesivo con su amante y no lo culpaba, a él también le encantaba tentarlo hasta que ya no pudiese pensar en nada mas que su placer...

-¿En serio te tienes que ir?- pregunto con molestia mientras mordía su cuello tentando al peliverde a ceder sobre la idea de marcharse.

-Sa..bes...que...si...- musitó en un breve jadeo.

Un sonoro bufido volvió a salir de sus labios, pero no trato de detenerlo cuando el ojos esmeralda se levanto de su regazo y tomó la bandeja de comida para llevarla al fregadero, Bakugou aprovecho para ver el redondeado trasero de Deku bajo su camiseta y le encanto esa vista, su culo aun tenia marcada su mano por el ultimo acto que habían compartido y eso lo excito de sobremanera.

Podía aceptar que "su Deku" estuviera casado, puesto que la argolla en su mano no era algo que el peliverde ocultara, pero lo que no soportaba era saber que siempre debía volver a su hogar y acostarse con su estupido esposo el cual no tenia ni una puta idea de lo que hacia su marido cuando no estaba con el.

Su mente divagó todo el rato hasta que Izuku volvió ya vestido con unos jeans azules que moldeaban su redondeado y delicioso trasero, una camisa tres cuartos blanca con los tres primeros botones abiertos, sin olvidar esas zapatillas negras que le daban su toque juvenil.

Katsuki relamio sus labios, no podía evitarlo, de solo verlo vestido "su amigo" despertaba a la vida, Deku era como una jodida adición y el estaba realmente jodido por ello.

-¿Me veo bien Kacchan?- pregunto inocente el peliverde.

Bakugou sonrió de medio lado, sabiendo que era una leve provocación que ambos se hacían antes de despedirse.

-Te ves bien nerd de mierda, - menciono divisandolo de arriba hacia abajo - Tan bien que me dan ganas de quitarte esa ropa y tirarte a la cama hasta que grites mi nombre como las ultimas treinta veces...- respondió con toda la sinceridad del mundo.

Izuku no pudo evitar reír ante la respuesta, y se acerco depositando un leve beso en los labios del rubio. El beso de despedida.

-Me alegra saber que estoy bien vestido...Ahora me acompañas a la salida?- tomo su mochila e invito al rubio a seguirlo, Katsuki sin mas opción que acceder a su capricho se levantó de la cama con su habitual ceño fruncido.

Caminaron en silencio hasta la entrada donde un auto Yaris color blanco se encontraba aparcado, Izuku saco las llaves y metió su mochila, miro a Kacchan que lo ignoraba a como siempre hacia cuando estaba molesto y le tiro un beso al aire, sabiendo que el rubio explosivo siempre lo iba a observar hasta que saliera de su campo de visión aunque estuviera enojado.