Fetiche Oscuro

CAPÍTULO 8.

Michael

La película trata de un joven (entre treinta y treinta y cinco años) que junta a personas con particulares extraordinarias y crea espectáculos para las personas usándolos a ellos como la atracción. Es increíble lo feliz que se ven cantando y bailando frente a todos, antes temían exponerse en público debido a que son "diferentes" al resto, pero ahora ya no eran fenomenos, eran los protagonistas de las sonrisas y emoción de los espectadores.

Cada vez que todos me preguntan porque razón me encanta tanto la música, no se que responderles. Ya que no se trata de palabras, sino de sentimientos. La canción que ahora mismo esta cantando un nuevo personaje en la película no hace más que erizarme la piel, un bola de sentimientos encontrados me atacan, no puedo separar la vista de la pantalla. Es como si todo mi alrededor desapareciera por completo.

Agacho la vista al sentir que algo toco mi rodilla y veo que Adam juntaba la suya con la mía y la volvía a separar. Al notar que trata de llamar mi atención, junté mi rodilla con la de él, pienso que va a separarla pero no se mueve, lo veo de reojo y me sorprendo al notar como fija la mirada en nuestras rodillas unidas. Sonrío al ver que el hace lo mismo. Aprovecho que no se da cuenta de que lo cachado y giró mi vista nuevamente a la pantalla.

La canción ha terminado y ahora los personajes intercambian cortos diálogos. Un escalofrío recorre mi espalda al sentir como Adam sitúa su mano en mi pierna y comienza a masajearla sin llegar a mi subir demasiado, después de un par de segundos se detiene pero no aparta la mano. Siento un cosquilleo el cual no puedo ignorar, se siente muy bien así que decido dejarlo.Lo veo de reojo algo molesto pensando en su mirada juguetona pero me sorprende ver que su atención esta en la película.

Después de un par de minutos siento como su mano comienza a presionar levemente causándome espasmos en mi entrepierna. Decido detenerlo entrelazando nuestras manos. Giró mi rostro regañandólo con la mirada, el me sonríe y lleva mi mano junto a la suya sobre sus piernas, dandome a entender que quiere que nos quedemos así el resto de la función.

Suelto un suspiro y decido complacerlo solo por esta vez.

Adam

Sonrío satisfecho y continúo prestandóle atención a la función. Michael no es el único que ama este tipo de películas, a mi también me fascinan, pero para ser honesto ahora no puedo concentrarme. Tenerlo tan cerca hace que me sea más difícil controlar las ganas que tengo de besarle. Pero si quiero que disfrute de esta cita tanto como yo, tengo que aguantar un poco. Lo complacere solo por esta vez.

...

Minutos después la pantalla comenzó nuevamente a trabarse. Pero ahora se quedo congelada la imagen. La gente comenzaba a decir comentarios, que a pesar de ser quejas, también eran graciosos.

—Ya me acabe las palomitas en puras pinchis pausas—gritó una señora.

—Regresen el dinero-gritaron otros más.

—No se preocupen-gritó un joven sentado entre la gente llamando nuestra atención—sé como arreglarlo. Cuando diga ya, todos cuenten hasta tres.

Yo mirándolo con pena por ver lo ridiculo que se veía diciendo eso. ¿De verdad cree que le harán caso? Cuando el dijo "Ya" me sorprendí al escuchar a Michael contar mientras movía nuestras manos entrelazadas de arriba abajo al momento de decir un numero. No pude evitar reír y menos cuando todos estaban contando junto al chico que estaba de pie animandólos. Todos gritaron eúforicamente cuando la imagen en la pantalla se descongeló.

¿En serio funcionó?

Todos comenzaron a prestar atención a la película, aunque aun se escuchaban algunas risas. Pasaron un pocos segundos y la pantalla se volvió a congelar, esta vez en lugar de reclamos solo escuché como todos gritaron "Ahhh" y comenzaban a reir, al igual que Michael y yo. Las caras que tenían los personajes en la pantalla en verdad eran muy graciosas. Algunas personas comenzaron a levantarse.

Nuevamente todos comenzamos a reír cuando en la pantalla se mostraba un perrito a causa de la sombra de la mano de unos de los que estaba en la cabina de arriba, la responsable de reproducir la película a través del reflector. Al parecer quieren entretenernos para evitar que nos retirémos. Todos reían y comenzaban a grabar la escena realmente divertida que ocurría en la sala. Cuando la película volvió a reproducirse todos seguían riendo sabiendo que en algún momento se trabaria, por desgracia los personajes mostraron una escena triste que nos hizo a todos prestar atención en silencio. Al parecer el joven que junto a todas aquellas personas con características únicas, ahora se comportaba de forma grosera con ellas. No quería que entraran en la fiesta que tenia ya que en ella solo había personas privilegiadas, no quería que lo avergonzaran. Los personajes salieron de aquel salón y comenzaron a cantar, la letra me hizo identificarme con la canción. Habla sobre que ellos a pesar del dolor ya no se ocultarán, que así son y nadie logrará afectarlos. Que las heridas a pesar de que sigan ahí, ellos seguirán adelante. Salgo de mis pensamientos al sentir un ligero apretón en mi mano entrelazada con la de Michael. Dirijo mi vista a él y el esta observandome. Pasa su vista a mis labios y entrecerro los ojos al ver como se acerca. Siento como suavemente aprisiona mis labios y los besa delicadamente.

Siento que mi corazón explotará en cualquier momento.

—¿Creí que no querías que nos besaramos?—dije sintiendo como juntaba su frente con la mía.

—Parecía que ibas a llorar. ¿Estás pensando en lo mismo que cuando me esperabas en el café?

—No es nada—dije apartandóme de él y regrese mi vista al frente.

Sentí su mirada sobre mi pero decidí ignorarlo y solo presione mas el agarre en nuestras manos, intentando decir que deje de verme. Justo un segundo después todos comenzaron a quejarse nuevamente ya que la película volvió a trabarse. Esta vez las personas se pusieron de pie y fueron a la salida. Mientras que todos se retiraban, Michael y yo solo observabámos en silencio. Cuando nos quedamos solos, mire de reojo a Michael quien no apartaba la vista de la pantalla.

—Michael...

—Dime—me tranquilice al notar su tono suave.

—Quiero que me beses de nuevo.

Me entrestecí un poco cuando solo mi mano pero un segundo después tenia mi rostro entre sus manos y el me besaba tiernamente.

Besa tan bien que siento mi cuerpo temblar de la excitación. Puse nuevamente mi mano en su pierna y la deslizaba desde su rodilla hasta unos pocos centimimentros de su entrepierna sintiendo como su cuerpo se tensaba, poco a poco se fue relajando. Abrí un poco más mi boca cuando sentí su lengua demandado que lo hiciera. Inicie una lucha entre nuestras bocas, compitiendo por el control, proporcionandonos más placer del que podíamos imaginar. Sin saber que hacer con tanto placer recorriendo por mi piel, decidí presionar su miembro por encima del pantalón, podía sentir su pre-erección.

—Adam espera...aqui no—dijo con dificultad mientras dejaba escapar uno que otro jadeo.

—Solo dejame besarte un poco más—dije en forma de suplica.

—Ustedes dos—dijo un empleado desde abajo.

Maldición.

Rápidamente nos separamos y disimuladamente me acomode el cabello ya que Michael me lo había desordenado completamente mientras que él se acomodaba la ropa.