Avanzando

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Un año después de su huida,  Aome ya estaba prácticamente repuesta de todo lo que había sufrido y decidió que era hora de dar el paso siguiente, iba a solicitar el divorcio, lo que hizo en la propia ciudad de Tokio, se había detenido todo este tiempo de hacerlo ya que al llegarle a Koga los papeles del divorcio, seguramente se enteraría de donde estaba Aome y no quería ser encontrada antes de tiempo, afortunadamente cuando se fue, se llevó todos sus documentos, incluida su acta de matrimonio y con un abogado que Sesshomaru contrato para ella, fue llevado el caso.


De acuerdo a ley de Tokio, el divorcio era efectivo ya que incluso Aome desde hace un año no vivía en el domicilio conyugal por lo tanto no había ningún impedimento; aún más, que poseía la grabación como prueba de la infidelidad de Koga.


Esa tarde mientras Aome levantaba la demanda de divorcio, era entrevistada por el asistente del juez.



— ¿Está usted segura del paso que va a dar?

— Si.

— ¿Considera de que no hay forma de solucionar su situación con el demandado que no sea con el divorcio?

— No, no hay otra forma.

— Hay algún otro motivo por el cual desee proceder para la disolución del vínculo matrimonial, que no sea la causal de culpa que cometió el demandado en contra de usted. — Aome solo titubeo un momento.

— No.

— ¿Cuáles son sus demandas en contra del demandado? ¿Desea usted obtener alguna compensación por el tiempo que usted estuvo en sociedad conyugal?

— No. No deseo nada de él, tan solo que el divorcio sea establecido, no deseo nada de sus bienes materiales, no los necesito.

— Esta usted segura de lo que solicita señora de Koga. — Para establecer la demanda de divorcio tuvo que usar su nombre real.

— Si. Tan solo deseo que mi matrimonio con el señor Koga sea disuelto.

— Le agradezco su tiempo señora, sería todo por el momento, posteriormente le avisaremos de la resolución del juez.

— Gracias.


Tan solo salió del juzgado y afuera la esperaba Sesshomaru. Desde aquel día de su reencuentro se habían visto con mucha frecuencia, inclusive Sesshomaru había contratado los servicios de publicidad de Suikotsu para su empresa, todo esto con el único fin de poder pasar más tiempo con Aome, su relación ahora era una llena de confianza y apoyo mutuo, eran "demasiado cercanos"



— ¿Cómo te fue querida?

— Todo salió bien... ¡o eso creo!

— No te preocupes, estoy seguro que todo estará bien.

— Gracias por acompañarme. — Aome solo le dedico a Sesshomaru una sonrisa capaz de derretir un tempano de hielo.

— No es nada querida Aome, ya te había dicho que siempre cuentas conmigo



La sonrisa caballerosa de Sesshomaru también animaba en verdad a Aome; ella aun recordaba el día que llevo a saludar a Sesshomaru con Miroku, ellos se habían conocido en la universidad hacía mucho tiempo; cuando tanto Sesshomaru como Inuyasha eran amigos de Aome. Lógicamente ya no se acordaban él uno del otro. Y el tiempo había pasado, sino fuera porque Sesshomaru practicaba mucho deporte y un poco de artes marciales, hubiera regresado a su casa con un ojo morado.

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