KOGA
La noche ya llegó, ni siquiera sentí el paso del tiempo. A pesar de que no he comido nada desde esta mañana no siento apetito.
Todo el tiempo pensando, tan solo recordando. ¡Esa tonta! No sé porque me había olvidado de todo esto. ¿En qué momento dejo de ser lo más importante para mí? ¿Qué me sucedió para que lastimara tanto a la única persona que me valoraba por mí mismo?
Recordé desde nuestros tiempos del instituto cuando la conocí, me parecía la chica más hermosa que hubiera visto; toda ella, su cabello lacio y negro, su piel clara y sus hermosos ojos marrones; aún su carácter alegre y su forma de ser tan espontanea, su ingenuidad de la cual yo siempre me burlaba; solamente para esconder lo mucho que me gustaba; desde entonces yo era muy popular, aun así siempre buscaba estar con ella, solamente a su lado.
Tuve suerte de que a Inuyasha le gustara Kikyo desde los tiempos de la primaria, ya que a Aome al principio le gustaba él. Cuando me di cuenta de que tenía el paso libre para conquistarla, no me detuve hasta que ella me aceptara a mí. ¡Lo cual no logré en mucho tiempo!
A Aome no le importaba mucho lo popular que fuera, ni que fuera el principal delantero del equipo de la escuela; tanto era su desinterés por mí, que al principio solo era mi amiga, yo solo era uno más de los que la rodeaban, me las fui ingeniando para que siempre estuviéramos solos ella y yo, cuando ya estábamos en la universidad por fin logre que me aceptara como su novio, yo era feliz; por fin la tenía para mí...
Pero no pude asimilar bien los cambios, mi popularidad era mayor; fui elegido para ser el capitán del importante equipo de futbol de los Lobos Yokai y repentinamente me vi rodeado de atención, de fama, de dinero y de muchas chicas; que sin ningún compromiso me ofrecían sexo de ocasión.
Pero ella seguía igual, siempre estaba a mi lado, aunque estábamos en diferentes carreras, me las arreglaba para seguirla viendo, aún recuerdo la primera vez que logre hacerla mía; me costó mucho que se relajara para que pudiéramos hacer el amor; mientras la hacía mía, me sentía en un sueño. Esa tonta siempre ha sido muy hermosa, su cuerpo muy estilizado, su cintura estrecha, sus caderas torneadas y sus largas piernas, sus senos redondos y abundantes; toda ella es muy hermosa.
También recordé el terrible día en que el hermano de Inuyasha, Sesshomaru la conoció, yo me di cuenta de inmediato que Aome le interesó a él; Sesshomaru jamás salía con nadie, solo se la vivía en los estudios y luego en su carrera; pero cuando conoció a Aome de inmediato se hizo amigo de ella, me parecía extraña la actitud de Sesshomaru hacía Aome.
Un día lo comprobé, cuando por accidente tome su tableta que había dejado entre las cosas de Inuyasha y encontré una fotografía de Aome; había sido tomada desde un punto alto, supongo que de un salón de clases en el primer piso, Aome estaba en el patio junto a un amigo suyo, yo me enfurecí cuando la vi.
Cuando enfrenté a Sesshomaru por esa fotografía, él me aseguro que Aome y él solo eran amigos, que los sentimientos que tenía eran algo unilateral y que no me preocupara; él nunca intentaría interferir en mi relación con Aome, aunque no lo conocía muy bien; a partir de ese momento siempre luche por alejarlo de Aome y distanciarnos de él. Lo cual logré con cierto éxito.
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Volver a vivir
FanfictionDurante un muy corto matrimonio Aome debe tomar decisiones importantes para su futuro... ¿Qué hacer cuanto tu autoestima, tu dignidad y el respeto que deberías recibir son destrozados? Adaptación usada con el permiso del autor Aerielus, de la...