LATINA ―5SOS.

04: ¡BOLLITO AL AGUA!

—Ah, y-yo ya lo sabía—titubee un poco y mi tío comienza a burlarse de mi. 

Nojoda chico, tengo a una raza única en frente de mi ¿Cómo hago para no titubear? Este si es arrecho.

—¿Eres fan nuestra?—pregunta y asentí lentamente—. ¿Quien es tu favorito?

Pongo mi mano en mi mentón fingiendo pensar.

—No tengo un favorito, lo siento. Para mi todos son geniales.

Él se lleva la mano al pecho fingiendo indignación.

—Calum, deja de acosar a mi bebita con tus preguntas—interviene mi tío para luego abrazarme—. ¿Dónde están los chicos?—pregunta mirando hacia todos lados.

—Fueron a comprar comida, no deben tardar en volver—responde Calum mientras está masticando.

—Está bien, ¿Podrías enseñarle a Cia su habitación?—le pregunta y este asiente con la cabeza—. Cariño, si estos idiotas te hacen algo solo llámame inmediatamente.

—¿Con cuál teléfono?—pregunto moviendo las manos exageradamente.

—Le quitas disimuladamente a Calum el suyo y me llamas—me abraza y susurra—. Pronto te compro uno.

—¡Oye!—se queja Calum.

Mi tío se endereza y deja de abrazarme.

—Ya me voy, cuídala bien—entrecierra los ojos y se gira hacia mi—. Nos vemos, mocosa.

Me despedí con la mano y finalmente sale de la casa. Dejándome a solas con Calum. 

Ay mi madre.

—Así que, ¿Cia?—pregunta con confusión—. Creí que tu nombre era Grecia. Es igual que la CIA de los Estados Unidos—hizo una pose extraña.

—Realmente lo es. Cia es un apodo, me llaman así desde pequeña—le explico sonriendo.

—Bueno, Cia, ¿También puedo llamarte así?—me pregunta y asiento con la cabeza—. Sígueme, te mostraré tu habitación.

Subió las escaleras y comencé a seguirlo.

Esta casa la siento más y más grande cada vez que camino, o probablemente yo soy muy pequeña.

Llegamos al largo pasillo. Hay cinco habitaciones, tres de un lado y dos de otro.

—Ven.

Avanzamos rápidamente por el pasillo. Calum toma mi maleta y la abraza a su pecho.

Abrí la puerta con lentitud y asombro al verla tan ordenada, al parecer, sabían que aceptaría quedarme. 

Bueno, ¿Quién no lo haría?

Toda la habitación esta pintada de un bonito azul celeste con algunas notas musicales pintadas con negro. Hermoso.

La cama es inmensa, me encanta. Es un cuarto, realmente perfecto.

—¿Te gusta?—la voz de Calum me hace reaccionar.

—¡Me encanta!—chillo emocionada—. Muchas gracias—le agradezco sonriendo en grande.

—Para nosotros fue todo un placer—me sonríe de vuelta—. Dejaré tu maleta aquí, si quieres puedes descansar un rato y cuando lleguen los chicos te aviso, ¿Te parece bien?—asiento con la cabeza y él se retira de la habitación.

Me lancé a la cama y me puse a pensar, ¿Será todo esto real o otra de mis fantasías?

Seguí pensando hasta que mis parpados me ganaron y caí en los brazos de chavez.