LATINA ―5SOS.

19: Yo sabía que tu eras marico.

Andy el fotógrafo de los mocosos llegó ayer en la noche. Y desde anoche le estoy jalando bolas pa' que me haga una sesión.

—Mamagueva sea, Andy. Yo quiero una sesión, por favor—le pido por séptima octava vez en el día y hago un puchero.

—Y yo—me sigue Hannah.

—Y yo también—siguió Anne.

Crystal iba a decir algo pero la interrumpí.

—Marico, tengo hambre.

Todos mecánicamente giraron la cabeza hacia mi y me miran con cara de no me digas.

Hoy me iría a hacer otro tatuaje aquí en New york. Y ahora, los chicos están discutiendo quien va a ir conmigo.

—¡Yo debería ir, soy su mejor amigo!—grita Calum moviendo las manos exageradamente.

—¡NOSOTROS TAMBIÉN!—le gritan los demás al unisono.

Solté una carcajada y todos me miraron confusos.

—Voy con Luke y se acabó el problema.

—¿Por qué?—pregunta Crystal meneando las cejas.

Verga, esta loca mal piensa todo. Todo lo sexualiza.

—Porque él me acompañó la última vez, y no intenta detenerme a la mitad del tatuaje—respondo y le lanzó una mirada asesina a Anne.

Les explico, cuando me hice mi primer tatuaje Hannah y Anne me acompañaron. Todo estaba chill, pero cuando ya llevaba la mitad del tatuaje Anne dijo que era una mala idea y que me detuviera y bla bla bla. Al final, ella también se termino tatuando. Soy una mala influencia.

—Yo soy el acompañante más tranquilo—Luke sonríe.

—Cierto, ahora ¿Ya nos vamos?—le pregunto lanzándole una almohada.

Asintió y caminamos a la puerta.

—¡LUCIA ES REAL!—grita Calum.

Luke suelta una carcajada y yo solo ruedo los ojos.

Ya estábamos en la tienda esperando a que el tatuador trajera la plantilla.

—¿De verdad no estás ni un poco nerviosa?—me pregunta Luke.

Niego con la cabeza.

—Y yo que lloré cuando me puse el lip ring—confiesa y comienzo a reírme.

Ya lo sabía, pero ajá.

Él me mira mal.

—Tú no lloras, a veces siento que no eres humana—dice y hace una mueca.

—Si soy humana, pero no suelo llorar seguido. Sin embargo, hay veces que me pongo de llorona, cuando algo me lástima—explico y balanceo mis pies.

—A ti nada te lástima—bromea.

—Cierto.

Nos quedamos en silencio un rato hasta que él lo rompe.

—¿Me contarás quien es ese chico Yef?

Ups, esito. Él fue el único al que no le conté quién era porque sé quedó dormido.

—Bueno, él es mi ex novio, fue la primera y única relación formal que tuve—comienzo a decir—. Terminamos porque él se mudo a Italia, me rompió el corazón porque no me explicó si no hasta ayer el por qué se fue. Pero aún así es mi primer amor.