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Carlos:

Lo mire... Me miro, en su mirada había furia, y lo comprendía Alexander y Mía últimamente se unieron mucho, y se que a el no le parece justo nada de lo que le estoy haciendo.

-Eres un maldito imbécil, ¿sabes que haría yo con una chica así?, ¿lo sabes?-Escupió muy molesto se que me quiere moler a golpes.

-Lo se, ya eso lo se, le prometí cambiar, y eso haré, pondré todo mi empeño gracias por cumplir por mi, y estar cuando ella mas te necesito-Lo mire fijamente y luego baje mi cabeza en señal de arrepentimiento.

-¿Cumplir?, ¿por ti?, creo que te equívocas Alexander, yo jamas cumpliría por ti, ya que lo único que has echo es destruirle la vida, al contrario Mía se a convertido como en hermanita y no me gusta ver a mi hermana sufrir, ¿estamos?, así que ten respeto y trata la como lo merece algún día la harás morir de un disgusto.

-¿De que hablas?- le dije totalmente confundido.

-¿Que?, ¿ahora me vas a decir que no sabes nada sobre los ataques de Mía?, que mientras tu estabas de lo mas feliz en Caracas, o haciendo de las tuyas a ella le daban fuertes dolores de cabeza, se le hace muy difícil retomar el oxigeno, ¿acaso no sabes que a dejado de comer?, que lo único que hace es llorar, insonmio, me e tenido que quedar aquí con ella 6 días para verificar que todo esta bien, tanto que ya Mariani cree que ella y yo tenemos algo, Mía esta mal, y es por tu culpa, espero que ahora que lo sabes la cuides, me retiro- Sin mas se fue, dejándome ahí como el total idiota que soy... Mi pequeña. Mi hermosa esta mal, realmente mal, y mientras ella estaba aquí llorando, enferma, yo allá con Elly de lo mas tranquilo.

¿Porque tengo que ser tan imbécil?, un ruido me hizo sacar de mis pensamientos, sentí a Mía tocer, me dirigí rápidamente a su habitación y la veo totalmente roja, intentando respirar.

-Mía, ¡MIA POR DIOS! ¿¡QUE PASA!?- Estaba asustado realmente asustado.

-N...No p... U edo res.... P ir.. Arr, N.  O ...P U ...E DO.- Decía entrocortado mientras intentaba tomar aire.

La tome en mis brazos y rápidamente baje el ascensor con ella, en planta baja me encontré a su hermanastra que iba entrando al departamento, yo solo la mire y seguí desesperadamente hacia mi auto, no hay tiempo, se puede morir, pensaba una y otra vez, mientras sentí a Luisana correr detrás de mi, nos montamos rápidamente en el auto, y cuando me dirigía a la clínica Mía quedo inconsciente, entramos y la atendieron de inmediatamente, estaba aterrado, mi pequeña lleva viviendo esto durante casi una semana entera y yo no lo sabia... O Dios, puede morir, de sólo pensarlo el alma se me destroza, Luisana se acerco a mi y en su mirada podía ver enojo.

-Esto no es nada mas que tu culpa, ¿acaso no te basta que la mama de Mía este en un psiquiátrico?, que su padre no le de la suficientemente atención que necesita, y encima viene un idiota a destruirla- Escupió molesta, se que tiene razón, se que tiene mucha razón, sin darme cuenta las lágrimas empezaron a salir, no me salían las palabras, sólo asentí y me senté en una de las sillas a esperar.

Mi angustia creía, una hora y no sabia nada de Mía, no quiero que le pase nada... Quiero que este bien, mire y vi que venia un doctor.

-¿Familiares de la señorita Jhonson?- Dijo el doctor terminándose de acercar.

-Yo... Yo soy su hermana, ¿digame, como esta ella?- Dijo Luisana con mucha cara de angustia.

Yo solo me acerque con ella y me quede en silencio esperando a que el doctor hable.

-Pues, la señorita no lleva un orden alimenticio adecuado, y esta un poco anémica, según los estudios que le hicimos tiene las defensas bajas, y el dolor de cabeza lo produce la causa de estrés, enojo, tristeza, depresión etc... Y como tiene las defensas bajas le afecta mucho entre la respiración y todo eso, la señorita tiene totalmente prohibido, estresarse, agitarse o enojarse, debe estar en reposo durante todo un mes y empezar a retomar su vida alimenticia de nuevo y normal, por suerte no fue nada grave así que ya pueden retirar a la paciente y ya saben, mucho cuidado.

Luisana y yo asentimos y vemos como Mía se acerca a nosotros con una gran sonrisa y me abraza.

-Te quiero mucho, gracias por estar aquí y traerme- me mira y me da un corto beso en los labios.

-No hay de que pequeña, aquí estoy para lo que necesites hermosa, ahora vamos, debes descansar- La miro y esbozo una gran sonrisa, me siento feliz de que este bien.

-Quisiera irme a tu casa, ¿puedo?- me lo dice casi en un susurro cuando ya íbamos llegando al auto.

-Claro que si pequeña, dejamos a Luisana y nos vamos a la casa-Nos montamos en el auto y lo pongo en marcha.

El camino se hace corto y silencioso, pero no un silencio incomodo, es un silencio agradable, dejamos a Luisana y veo a Mía cabeceando se que se quedara dormida, tomo rumbo hacia la casa y cuando llegamos efectivamente Mía estaba dormida. Me dirigí a su asiento y la cargue, la lleve hasta a mi habitación le quite sus zapatos, cuando le iba a quitar su ropa ella se despierta, y con una sonrisa dice;

-Me siento tan feliz de estar contigo- Me atrae hacia ella y me da un suave beso.

-Yo también me siento feliz estando contigo hermosa, ahora a descansar- Retire su ropa hasta que quedo solo en bragas y lo coloque una camisa mía holgada, me desvestí yo hasta quedar en bóxer y me recoste junto a ella hasta quedarnos plenamente dormidos.

N/A, HOLAA GATITOS!!, Se que es corto lo se, el próximo sera mas largo! Por fin Carlos sera un hombre de verdad, Hasta el siguiente cap, los amo😻😻

Enseñame a Amar.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora