Entre Pinceladas (Camren)

Capítulo 6

Verla, así tan linda, tan ella. Camila es una hermosa chica tenía ese algo que inotizaba a la primera, su sonrisa. Tan bella. Llegamos a la cafetería y nos sentamos las cinco en una mesa, y les mentiría si dijera que no he pasado observando a Camila, es que es inevitable, es la mujer más perfecta del mundo. Ella reía de todas las tonterías de Dinah, esta chica era única, tenía tantas ocurrencias que eran agradables y muy divertidas.

-- ¿Cuantos años tienes, Lauren? - Dinah me pregunto.

--Dinah, eso no se pregunta a las mujeres - esa era Camila.

--No, está bien... Tengo 18 años -

--Vaya, ya eres legal - yo me sonroje.

--Dios!!, Dinah ya!! -

--Es que mírala, Mila, ella es perfecta y muy hermosa - todas comenzaron a reírse de las ocurrencias de Dinah. Camila no dejaba de verme, tenía una hermosa sonrisa en su rostro.

--Si lo es... Pero deja de molestar - me sonroje más, Camila aceptaba que yo era hermosa.

-- Mani, ayer escuché la nueva canción de beyoncé... --

Ellas comenzaron a hablar de esta cantante tan famosa, Ariana se fue con su novio y nos quedamos las cuatro, pero dos de nosotras estaban hablando animadamente de la cantante, Camila solo reí con esas locas, ella se acercó más a mi y me regalo una mirada, era de esas miradas que dicen más que mil palabras. Yo le correspondí.

--Somos las únicas normales, acá - dijo y señaló a las otras dos chicas.

--Si, eso creo...-

--Tus ojos cambiaron de color... - Dijo viéndome, con sus ojos marrones. Yo me sonroje.

--¿De que color están? -

--Son verdes muy claros - ella no dejaba de verme... - ¿Por qué....?

--Son así cuando... Cuando estoy viendo algo hermoso - por fin dije algo bueno, su sonrisa creció más y sus ojos se iluminaron. No deje de verla, ella es lo más hermoso que he visto en mi vida.

Ella tomó mi mano y la acaricio suavemente, me sonroje al sentir su tacto tan dulce y delicado.

--¿Siempre coqueteas con las chicas? - Su sonrisa fue de burla y yo sonreí igual.

--No... Contigo es diferente... Ya que eres perfecta y única.

Ella se sonrojo y arrugo su nariz, y fue lo más hermoso que mis ojos han visto. El tiempo de descanso se acabo, la siguiente clase se hacía presente. Todas caminamos a los salones, yo tenía laboratorio y las demás otras clases, Camila camino conmigo a la sala de laboratorio, si, ella tenía esa clase conmigo, tomé el valor de agarrar su mano y caminar así con ella. Su reacción fue hermosa, sonrió y apretó más mi mano. Así llegamos a él salón y nos sentamos juntas.

La hora de laboratorio pasaba lenta y aburrida, Camila estaba haciendo todo lo que la profesora decía, aveces se esquivaba y yo me moría de la risa por su cara de enojo. Luego de unas horas la clase terminó, también el día de escuela.

Camila se fue conmigo, caminamos a el estacionamiento, donde le diría que la llevaría a su casa, no se que me pasa con Camila, que cada vez estoy a su lado siento un alivio, me siento tranquila y feliz. Llegamos al estacionamiento.

--Bueno yo... -

--¿Quieres que te...? - No pude terminar ya que una voz masculina me interrumpió.

--Camila!!!... - Un chico corría a donde estábamos, con un ramo de rosas y una sonrisa tonta.

--Shawn, ¿que haces acá? - Camila lo abrazo, se veía muy feliz.