The Ending {Elijah Mikaelson}

30

—Tu tía acaba de llegar. —Sonó la voz de Klaus a través de la puerta y Sky suspiró una vez más. Cuando lo escuchó irse, Sky se llevó las manos a la cabeza, sentía mal el hacerle eso a Elijah, pero ya estaba comenzando.

Salió de su habitación, cansada, no había dormido y el sol aún no salía. Llegó al baño y lo vio, en la bañera estaba Elijah, con el agua casi hasta el cuello y gracias al cielo eso cubría la mordida que lucía asquerosamente infectada.

Ahí estaban Klaus, Sol y Kailan. Los tres vieron a Sky, como preguntándole si estaba segura de lo que iban a hacer. Ella asintió, pero decidió algo más:

—¿Me darían un momento a solas? —Preguntó jugueteando con sus dedos en forma nerviosa. Los tres asintieron y salieron del baño, luego Sky se acercó a donde estaba Elijah y le acarició la mejilla. —Espero que con esto sientas algo de culpa y entiendas una parte de todo lo que pasa por mi cabeza. —Se acercó y le besó la mejilla, luego los labios. —Elijah... —Murmuró recostando su frente contra la mejilla de él.

La puerta se abrió y volvieron los otros tres, que se quedaron viendo la escena con ternura. Sky adoraba a Elijah a pesar de todo.

—Esta vez no necesitamos que alguien entre, sabemos lo que buscamos. —Dijo Kailan, vertiendo todas las hierbas en la bañera.

Sky le dio un último beso en la mejilla a Elijah y se levantó, después salió de ahí, aunque Sol y Klaus se quedaron a ver que pasaba. Sky no soportaba el olor de esas hierbas.

Fue hacia la habitación de Ethan y Raven y los vio, cada uno en su cuna, ambos despiertos como si supieran lo que pasaba. Sky se acercó primero a Ethan, sus ojos cafés brillaban y sentía que esa mirada era una mirada de perdón, que le gritaba que estaba bien.

Raven era otra cosa, en sus ojos verdes parecía haber molestia a pesar de que era una niña de solo meses de edad. Raven parpadeó y Sky se arrodilló  antes de recostar la frente contra la madera de su cuna.

—Saben que es lo mejor. —Se disculpó con sus propios hijos, golpeándose contra la cuna de Raven, mientras ella se chupaba el dedo pulgar viendo a su móvil de estrellas.

—¿Qué haces? —Preguntó la híbrida Sol extrañada.

—Pensé que había una astilla en la cuna. —Se excusó, negándose a aceptar su momento de debilidad en el cual llegó a pensar que lo mejor sería dejar a Elijah sin recuerdos. —Pero me equivoqué, vamos. —Interrumpió antes de que Sol lograra hablar y se acercó para sacarla de la habitación de los mellizos.

Rebekah y Vee estaban en su departamento. Freya y Keelin en el suyo cuidando de Hope y Alice. Jesse y Hayley debían de seguir en la fiesta mientras Maya y Logan estaban con Ryan en su nuevo departamento. Estaban solos haciendo aquello.

—Esta niña... —Se quejó Sol dejando de caminar frente a la habitación de Hope, se soltó de Sky y entró. —Es necia como su padre.

Sky también entró y vio que sol sujetaba en sus manos una especie de cadena de oro que en sus dos esquinas tenía unas manijas de plata.

—¿Qué es eso? —Preguntó Sky, tomando el objeto para verlo. Podía ser un buen collar.

—Algún objeto oscuro. —Contestó Sol, tomando la otra manija. —Klaus me dice que Hope los saca de la bodega y los trae a la casa para verlos, yo pienso que es peligroso.

—Ya hablas como una madre. —Dijo Sky con una sonrisa, viendo los ojos claros de Sol. Era adorable la relación que tenían Sol y Hope, a Klaus le alegraba que se llevaran así.

—Voy a llevarme esto, una niña no debería de tener objetos creados por brujas. —Sol caminó hacia la salida y Sky soltó la manija.

—Hoy habrá un baile, Marcel lo organiza. —Resonó la molesta voz de Tatia y Sol apretó el objeto oscuro, logrando que una especie de descarga eléctrica le recorriera el cuerpo, pero la ignoró debido a la molestia que sentía por tener a Tatia ahí. Ella en cambio, estaba recordándose contra el umbral de la puerta. —Y Nik también, están abajo hablando de eso.