Estando en casa, al llegar de Red Robin, _____ directamente se resguardó en la comodidad del sofá y tomó su teléfono para holgazanear, dejando su mochila en el piso, a un lado de ella.
Sin embargo, no dejaba de sentirse desanimada, ahora, por que sus padres no le habían mandado algún mensaje en todo el día para saber como se encontraba, no sabía si preocuparse, enojarse o simplemente ignorarlo.
Al darse cuenta de todo el tiempo que perdió en internet, se puso de pie y se estiró, caminó a la cocina y abrió el refrigerador, tomó una botella de agua simple, la abrió y le dio un trago, después, cerró el electrodoméstico y se llevó la botella consigo al sofá.
Con pesar, tomó su mochila y sacó todos sus cuadernos con una mano, no recordaba si tenía alguna tarea u otro pendiente, siendo que no, regresó las cosas como estaban.
Estaban tan aburrida, eran apenas las 7 de la noche, por un momento deseó tener tarea para pasar el rato, siguió tomando agua hasta vaciar la botella y se le ocurrió una idea, ver televisión. Se sentía tonta por tan genial idea. Puede que haya algo bueno, pero no, a esa hora no pasa su serie favorita, a lo mejor en Netflix, pero no recordaba la contraseña, ella le tenía que pedir permiso a su madre para poder usarlo, ya que Clarisse creía que si se pasaba tanto tiempo, sus hijos se volverían más vagos.
Tomó aire y exhaló fuerte, pensó en leer un libro, pero no quería volver a levantarse del sofá, simplemente se acomodó y durmió.
Despertada por el hambre, intentó hacerse un gran sándwich con lo mejor que encontrara, acompañado de un vaso con leche.
Al terminar, limpió el área donde comió, apagó las luces que estuvieran prendidas y subió a su habitación, pero antes, desde las escaleras divisó la hora en el reloj de la pared, algo así como pocos minutos para las 12. Hizo algunos cálculos y concluyó que tardó una hora o casi dos en cenar.
Llegó a su habitación, y se dirigió hacia la ventana, la abrió y apenas sintió una fría brisa.
-¿Y si enserio viene?- pensó y se recargó para seguir viendo el oscuro panorama -En ese caso, le hubiera dicho que viniera más temprano- dijo en bajo -Si llegamos a resolver ese caso, podría trabajar como detective privada en las vacaciones de verano- dio una risa corta -No, que absurdo-
-¿Hablas sola?- respondió alguien desde el techo.
-¿Eh?- volteó hacia arriba pero no veía nada.
Pero de pronto alguien cayó hasta golpear la nieve.
-¡Maldita sea Kenny!- trató de no gritar _____ viendo al suelo.
-¡Hola! ¿Nos vamos?- dijo el rubio mientras hacía ángeles de nieve.
La chica se alejó de la ventana, tomó una sudadera que tenía en su cama y se la puso, luego, bajó hasta la puerta principal, tomó las llaves de una mesita y dejó su teléfono.
-Vaya, que discreto- mencionó mientras salía y cerraba su hogar.
-Está bien- Kenny se levantaba y se sacudía la nieve -No seas amargada-
-No soy amargada- guardó las llaves en su bolsillo y se cubrió con el gorro de su prenda.
-Cierto, debí ser más cuidadoso, pude despertar a tus padres- empezaron a caminar.
-No hay problema con eso, es solo que estás como Mysterion y actuaste como niño-
-Tranquila, mamá- tratando de no reír.
-Lo siento, tenía que regañar a alguien-
-¿A qué te refieres?-
-Uh... mi hermano no está y usualmente me enojo con él-
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Decapitated | South Park | Kenny & Tú
Fanfiction{South Park fanfic} _____ Kahler, una pelirroja de South Park y de buena familia. Fue en aquella masacre de personas con conjuntivitis en Halloween que supo que el niño que lo inició todo, obviamente no era normal. Tuvo suerte, ella no salió por dul...
