❝you are my bunny❞ • kookmin (pausado)

11.

"heroine"

—Hay que guardar un poquito para papi. —pidió el pequeño casi en un murmuró inaudible.

Jeon subió como su corazón se aceleraba ante tal ternura. No era amante de los niños pero Bae tenía ese encanto que atrae a todos como Jimin, sin duda eran dos gotas de agua.

—Bueno, te serviré en un platito y el resto lo guardaremos para que comas luego con papá ¿si? —cuestionó con tono suave.

El más pequeños asintió mientras jugueteaba con sus regordetes dedos. Su padre tenía razón, Jeongguk era una linda persona y muy cariñosa aunque se mostraba algo frío y tímido, eso realmente le llamaba la atención.

Jeon buscó entre las cosas algún potecito para ponerle helado al pequeño y también una cuchara para tal. Abrió los potes y colocó dos bolas de helado de cada sabor en un tarro de plástico, no quería darle uno de vidrio ya que no sabía si sabría manejarlo bien sin que s ele cayera. Mejor prevenir que lamentar. Colocó una cucharita de metal en éste y se lo entregó al pequeño que estaba ansioso esperando dicho helado.

—Gracias. —una sonrisa se formó en los labios del pequeño que Jeon respondió rápidamente con otra a cambio.

—No hay de que, pequeño. —apretó la mejilla de éste suavemente, le había sido inevitable; la ternura que emanaba el niño le hacía derretir por dentro. —Come, no tengas vergüenza.

Baehyung levantó la cucharita con algo de dificultad pero rápidamente se la llevó a la boca disgustando el delicioso sabor a la menta con chispas, era algo fuerte pero le gustaba demasiado. Jeon por su parte se sentó al lado de éste y le miraba comer realmente satisfecho al saber que le gustaban tales sabores de helado.

Le fue inevitable no sentir demasiada vergüenza al comer sabiendo que tenía a alguien mirándolo entonces dejó la cuchara al lado del plato y bajo su vista a alguna parte del suelo.

—¿Qué tienes? —preguntó al notar el cambio de actitud del pequeño. —¿Ya te has llenado?— continuo preguntando pero recibió una suave negación. —¿Qué es?

—...

—¿Es porque te estoy viendo? —cuestionó en forma divertida.

La cabeza del pequeño subió y bajo, asintiendo.

—Oh, no lo haré más. —se disculpó y tomó su celular para ver quien sabe que.

Baehyung volvió a continuar comiendo el dichoso helado. Tomo una gran porción de helado de menta y acercó hasta el peli negro para ofrecerle, sabía que era de mala educación no compartir, ademas quería alimentarle.

A Jeon le fue inevitable no soltar una pequeña risita. Bae era el niño más bonito que nunca había conocido. Quito la vista de su teléfono móvil y abrió la boca esperando recibir aquel gustoso helado.

—Gracias, cariño. —agradeció con una pequeña sonrisa que hizo brillar los marrones ojos del pequeño con mucha emoción y felicidad.

Bae no podía estar sintiéndose más a gusto con Jeongguk.