Prologo

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Alec

Era viernes por la noche, yo no solía salir los fines de semana, los que hacen eso son mis hermanos Isabelle y Jace, y por esa misma razón me había tocado ir por Max a casa de su amigo, no estaba tan lejos de la nuestra pero si lo suficiente como para irme caminando, así que tome el coche de mis padre, y fui por él, llegue como en veinte minutos a la otra casa, como dije no estaba tan lejos, estacione el coche y me baje para tocar la puerta, y me abrió la madre de su amigo.

-Buenas noches, amm vengo a buscar a Max- le dije

-Oh claro déjame le hablo- dijo y se alejó de la puerta

Me quede ahí parado observando a mi alrededor, tenía esa manía de observar cada detalle de cada lugar al que iba, y este era bonito y cómodo.

-¡Alec!- la voz de Max me saco de mi trance

-Hola- me agache para poder estar a su altura y recibir su abrazo- ¿Te divertiste?

-¡Si! Mucho- estaba feliz como siempre que lo dejaban venir a ver a sus amigos

-Bueno vámonos- le dije y me puse de pie- hasta luego señora y gracias

-No hay de que cuando quieran venir son bienvenidos

-Gracias

Le quite el seguro al auto y abrí la cajuela para meter la mochila y los juguetes de Max, la cerré y fui a abrirle la puerta de la parte de atrás, voltee a verlo y el solo me estaba viendo con ojos de cachorro.

-Max, sabes que todavía no te puedes ir adelante- le dije tratando de que entendiera

-Alec, por favor, solo una vez- me rogo y siguió viéndome de la misma forma- ¿Siiiiiii?

-Max

-Prometo que me portare bien y no le diré nada a nuestros padres, anda Alec por favor

-Está bien, pero es la única vez ¿entendido?

-¡Si!- grito emocionado y solamente me reí

Cerré la puerta de la parte de atrás y le abrí la del copiloto, se subió de un brinco y yo le acomode en sillón y le abroche el cinturón, le cerré la puerta, para dirigirme a la otra y entrar, cerré la puerta, le puse los seguros y me puse el cinturón para después encender el auto e irnos, las calles estaban casi vacías, y no era de sorprender pues la mayoría está en fiestas o en su casa durmiendo, no supe en qué momento se quedó dormido Max pero se veía muy tierno, llegamos a un semáforo teníamos el verde así que me pase como si nada, oí un claxon y después sentí un fuerte golpe en mi lado derecho, donde estaba Max, sentí como rodo el auto hasta que choco con algo y se detuvo dejándonos de cabeza, me dolía todo, no podía moverme.

-Max- susurre y gire un poco mi cabeza para verlo, tenía casi toda su cara llena de sangre y seguía con los ojos cerrados, sentí como la desesperación se apoderaba de mí, podía pasarme a mí lo que fuera pero a él no- ¡Max! ¡Max contéstame!- ni una repuesta ni ningún movimiento de su parte, las lágrimas comenzaron a salir de mis ojos- ¡Max! ¡Por favor respóndeme! ¡Max!- grite y fue lo último antes de que todo se volviera negro

Amor sin mentiras (malec)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora