Bakugou estaba arrodillado en el suelo de aquella fría y oscura habitación. Sus muñecas eran sujetadas sobre su cabeza con una cadena que llegaba al techo. La poca cantidad de aire que salía de sus labios era acompañados de una minúscula nube de vapor que sencillamente se perdía en la oscuridad. La herida abierta de su frente y el repugnante olor de alguna sustancia mal elaborada le subieron los mareos. Sus sienes palpitaban con fuerza, y su pecho iba disminuyendo su ritmo lentamente.
Midoriya sacó su móvil luego de haberse sentado en su pupitre y miró con intriga la pantalla, eran verdaderamente poco frecuentes las ocasiones en las que miraba de manera tan viciosa el pequeño artefacto. No se percató de que unos ojos opacos lo observaban con curiosidad, su propietaria se preguntó para sí misma qué mantendría al joven tan concentrado, pero lo único que su timidez le permitió hacer fue sentarse silenciosamente a su lado. Titubeante elevó su mano, pero no llegó a palmarle el hombro al pensar en ello como un acto grosero e irrespetuoso. Bajó la cabeza con la misma lentitud que su mano y llevó un mechón de su oscuro cabello tras la oreja. Se consoló con el pensamiento de que en otra ocasión sería correcto preguntarle por ello.
-¡Hey, Midoriya! -llamó Genki sentándose ruidosamente al lado del joven justo igual que cada clase de Ciudadanía. Materia donde alumnos de diferentes facultades estudiaban en la misma aula. La llamativa llegada de Genki logró sobresaltar a Izuku y la la chica-. ¿Qué estás mirando? -acercó su rostro a las manos que sostenían el celular de su amigo tratando de ver lo que contenía.
-Ah, sólo son unos relatos que encontré por internet -informó sonriendo de oreja a oreja a la par que se rascaba la mejilla y cerraba los ojos-. Habla de un hombre, que cuando el surgimiento de los Quirk aún era muy reciente, logró causar mucha polémica y pugnas entre los que aún eran humanos normales y los superhumanos.
-Eso suena interesante -comentó la joven con su habitual tono débil-. ¿Dónde encontraste eso?
-¡A-Ágata! -exclamó con sorpresa dejando caer el móvil sobre el pupitre e ignorando cuando Genki lo tomó y comenzó a leer-. ¡¿Has estado aquí todo este tiempo?! -Su interlocutora afirmó despacio con la cabeza. Midoriya le miró cohibido, y dobló la postura de su cuello en ademán de disculpa-. Lo lamento, no me percaté de que estabas a mi lado.
-No, no lo hagas. No quise interrumpir tu lectura -dijo desviando la mirada con pena-. ¿C-cómo van tus clases particulares extra? -cambió de tema a la primera oportunidad.
-No muy bien -explicó soltando un suspiro de decepción-. Aún hay cosas que no me quedan claras, bueno, en realidad explican muchas cosas pero no las que quiero saber -de repente un destello apareció en sus ojos. Volteó a verla como si de manera repentina fuera una especie de salvación-. Ágata, ¿puedes ayudarme?
-¿Ayudar? -apenas murmuró por lo perpleja que había terminado tras oír semejante pregunta.
-Quieres ser bióloga, ¿verdad? Si juntamos nuestras teorías y me das tu opinión podrías ayudarme a fortalecer mi hipótesis.
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La Ciudad De Los Muertos [BNHA]
FanfictionIzuku Midoriya decide rendirse ante su meta de lograr convertirse en héroe. Su tristeza, agonía, cólera e impotencia lo someterán a situaciones que nunca imaginó, hasta arrastrarlo a las garras del mal y convertirlo en aquello que juró destruír. «Si...