Me enamoré de mi genia de la lampara

Capitulo 18: Deseo Decimo Primero

Narra Astrid

Atravesé el portal y aparecí en la habitación, todo se veía y se sentía tan lejano.

Luego recordé la última vez que estuve aquí, recuerdo cuando le grite a Hipo y viceversa.

Me sentí mal conmigo, no debí haberle gritado pero estaba frustrada.

Su hermana me había visto, me asuste aunque no debía de hacerlo, los únicos que nos ven son: el “amo”, a los que el “amo” quiere que nos vean, los animales y niños.

Esto se debe a que ellos tienen mucha imaginación y con el tiempo creen que nosotros somos un producto de su imaginación y se olvidan de nosotros o buscan una manera de escusar nuestra existencia.

Di vueltas y no había nadie, estaba por irme cuando algo en la mesa llamo mi atención.

Me acerque y me di cuenta que era el cuaderno que le deje a Hipo. Lo abrí y me enfade cuando leí los primeros deseos. Se que el solo se preocupa por si mismo al igual que todos los demás humanos se que nunca va a cambiar.

Estaba por cerrarlo cuando un deseo color morado llamo mi atención, no podía ser cierto o ¿si? Leí el deseo y toda la ira que tenia se esfumo como por arte de magia.

Lo había hecho, había ayudado a alguien más me sentí extremadamente feliz y una sonrisa de oreja a oreja apareció en mi cara.

- Has vuelto- escuche una voz que provenía de atrás. Me quede sin aire en mis pulmones.

Era Hipo

Narra Hipo

Volvió

Lo hizo

No puedo creer que halla vuelto, no se  porque pero me sentía muy feliz, ansioso y nervioso.

Como odio sentirme así

Ella esta de espaldas a mi y por lo que supongo tiene el cuaderno que me dio.

Me acerque lentamente

- Me gusta este deseo- se dio la vuelta pero en ningún momento me miro, estuvo todo el tiempo con la mirada en el cuaderno.

Sin mirar lo que señalaba supe de que estaba hablando e inmediatamente me sentí orgulloso de saber que a ella le había gustado.

No dije nada solo la mire, estaba con la misma ropa de siempre pero había algo distinto en ella y no sabia que era.

Después de unos segundos ella por fin alzó la mirada y me perdí en el mar de sus ojos.

- Hola Hipo- Algo estaba mal en mi, esperé que ella dijera algo más y cuando no lo hizo me sentí mal.

-¿Hola?- la mire directo a sus ojos- Después de que te vas por una semana, y no tengo ningún contacto contigo vienes y me dices hola- estaba un poco enojado.

- Yo...- no dijo nada mas, solo me miro y apenada clavo sus ojos en otro lado- ...necesitaba resolver unos asuntos.

-¿Y para eso te vas una semana?- ¿por que estaba enojado con ella?

-Hipo enserio ya tuve suficiente con la ultima pelea, ahora solo quiero ir a descansar- se dio la vuelta y camino a la lámpara

No se porque pero camine a ella y le agarre del brazo haciendo la girar y que quede frente mio.

- Astrid lo siento, no debí haberte gritado- había planeado este discurso casi por 3 días- estaba furioso conmigo y me desquite con la primera persona que me topé