Capitulo 19:Deseo Decimo Segundo

169 11 4
                                    

Narra Hipo

Estaba haciendo mis tareas como siempre cuando escuche un grito proveniente de Cami, mis padres no se encontraban ya que fueron a una cena de reconciliación.

Corrí lo mas rápido que pude y encontré a Cami, en el suelo y la silla estaba de costado aplastándole la cintura.

Le quite la silla y la amarque, se abrazo a mi cuello y siguió llorando la lleve a su cuarto y la recoste.

Después de un rato dejo de llorar pero estaba con la mirada perdida.

- Cami, linda ¿que sucedió?

Me miró y tartamudeando dijo

-intente coger... el cereal de la repisa pero algo...el freno no... La silla se viró... Y yo...- volvió a llorar y la abrace fuerte.

-Ya pequeña

-Odio estar en sillas de ruedas, Hipo lo odio, yo quiero que esto cambie, desearía que ese auto nunca me hubiese atropellado- lloro mas fuerte.

- shhh, tranquila- sus palabras me estaba matando no quería verla así.

Después de tanto llorar se quedo dormida, la arrope y la deje dormir.

Al salir decidí entre llamar a mamo o no.

No quería arruinarles la velada así que decidí no hacerlo.

(...)

Había llegado mama y me había dado él sermón del año por no haberla llamado.

Al final llamaron al Médico Especialista para revisarla.

Mire él reloj, en este momento ella ya debía de estar haciéndose los exámenes.

-Hipo es una grandísima idea- me alabo Astrid desde la cama donde se hallaba sentada

-¿Puedes hacerlo?- le mire a los ojos y ella me devolvió el gesto.

- Es un deseo puro Hipo, claro que puedo- a mi mente me llegaba esa frase una y otra y otra vez "odio estar en sillas de ruedas" no iba a dejar esto ahí yo iba a ayudar a mi Hermanita.

-Hazlo- no aparte la vista y ella tampoco lo hizo cuando chasqueo los dedos.

-Tengo que decirte que ella no caminara de la noche a la mañana pero ahora sus huesos están aptos para hacerlo- le Sonreí de verdad.

-Te lo agradezco de corazón

-No hay nada de que agradecer- la mire y encontré algo familiar en sus ojos y de repente un flasback apareció en mi mente

-Sabes que eres importante para mi, ¿lo sabes verdad?- estaba abrazando a una chica que parecía ser rubia

-Claro que lo se- dijo ella abrazando me mas fuerte.

-Hipo ¿estas bien?-no me di cuenta de que Astrid se encontraba junto al frente mío

-Si solo...-mi celular empezó a sonar ella me sonrió.

Saque mi celular y vi quien me estaba llamando y mi cara se iluminó cuando lo hizo.

-Mérida, hola ¿como estas?

-Oh, nada aquí súper aburrida como siempre

-oh

-me preguntaba si quieres hoy salir

-claro, en donde

-en el parque cerca de ese monumento aburrido.

-esta bien nos vemos allá

Me enamoré de mi genia de la lampara Donde viven las historias. Descúbrelo ahora