Amigos heterosexuales

4

—Wow, sí hablabas encerio de tener suficiente lubricante. —Bromeó. Por la postura de tortuga bocarriba en la cama de Taehyung cualquiera diría que estaba secuestrado y apunto de violárselo, pero no, no era violación si el se moría por ello.

—Tres litros de pura calidad. —Taehyung también le apoyó la broma. Se sintió bien. Se inclinó dejándola a un lado de la estrecha cama y tiró de sus piernas. Las uñas o mejor dicho las manos de Tae eran cerilla sobre su piel de pólvora. —¿Listo?.

—¿No tuviste suficiente con correrte en mi cara y ahora me quieres follar?. —Bromeó Jungkook, otra vez.

—Oye. —Taehyung le hizo un puchero demasiado comestible para su salud mental. —Soporté el jaleo de dilatarte como una princesa además de que tú te corriste dos veces, no puedes ser tan injusto.

—Creia que te gustaba. —Le pasó las manos por los brazos. Taehyung estaba entre sus piernas con su polla alegremente apuntado hacia arriba y la suya propia estaba peor. Lo quería. Quería a esos 22 (como se enteró hace poco) centímetros jodiendo dentro de él y quería verle correrse como nunca.

—Y me encantó, pero es súper tedioso. Dilatar a un hombre es sexy, sí pero si el chico es feo te la baja.

—¿Y yo soy feo?.

Taehyung se río sensual y bajó la mirada, él siguió los ojos de su mejor amigo y lo pilló con la mano llena de lubricante llenándose el pene con él. No pudo evitar apretar los muslos de emoción, emoción o miedo, no supo adivinar. Lo deseaba, pero algo en su interior decía que cuatro dedos no se comparaban con esa polla.

—¿Y si esperamos un poco más?. —Gimió. Taehyung elevó la mirada con una ceja alzada.

—Tú me rogabas que te follara cuando tenía mis dedos dentro tuyo, Jeon.

Se sonrojó ante el recuerdo. Parecía una puta total suplicando por más.

—Si, lo sé pero... ¿Y si lo intentamos otra noche?, cuando no duela tanto.

—Dolerá la vez que lo intentemos. —Su mejor sexy amigo se inclinó hacia adelante apoyando sus brazos a los costados de Jungkook. Le miró la cara atentamente y sin evitarlo dejó un casto beso correspondido en sus labios. —Pero si no quieres ahora, está bien.

—No, ese beso me convenció. —Habló no muy seguro. —Pero... Sé gentil.

—No prometo nada.

Inhaló profundo y no se atrevió a mirar.

Taehyung alineó su polla contra la rosada entrada de Jungkook dejando círculos sobre ella, estimulándola con suavidad. Comenzó entonces a adentrarse violando la resistencia natural del cuerpo de un hombre, la conocía, por algo él mismo no se atrevía a ser pasivo. Le escuchó quejarse y tomó equilibrio deteniéndose. Tenia la mitad de la cabeza de su polla dentro.

—Jeon... —Advirtió.

—Si, ya... Entendí...

—Si lo ago lento dolerá mas.

—Alzo rápido entonces.

Era justo lo que quería. Movió las caderas hacia adelante y se metió con mas rapidez que antes. La estrechez de su mejor amigo le estaba volando la cabeza por lo que tuvo que detenerse a sí mismo durante unos segundos. Se echó mas lubricante. Cuando decidió proseguir la metió toda de un sólo golpe oyendo el lloriqueo de Jungkook, eso le dolió el alma. Le apartó un poco los muslos y se inclinó hasta su cara, le pasó los dedos por la mandíbula mientras suaves lágrimas caían por sus ojos.

—Lo siento, lo siento... —Pegó su nariz a la mejilla de Jungkook y respiró suave.

—T-tranquilo. —Respiró agitado enredando sus manos en el pelo de Taehyung. —N-no es tu culpa t-tener la polla tan grande.