Había azotado la puerta cuando salió de la casa del humano, su estómago estaba revuelto y sus ideas eran bastante confusas en ese momento, tanto que solo camino sin rumbo, una vez más se perdía a si mismo pero esta vez era por no darse cuenta de lo que tenía en frente, Stiles, ese chico le había dado tanto y el solo lo había apartado, recordaba cuando trato de ayudarlo contra Kate aun si eso le costaba su propia vida, sonrió amargamente "Buen trabajo Derek", si dijo mentalmente.
Ahora sabia cuánta razón tenía Deaton cuando dijo que no habría vuelta atrás. Stiles se había rendido con él y era tiempo de que el hiciera lo mismo.
[...]
Entro al local divisando un par de chicas bailando provocativa mente sobre una pequeña barra de centro, vio a su derecha y en varias mesas había hombres de distintas edades lo que solo le causo tristeza ajena.
- Vamos guapo, sígueme - dijo la mujer mirándolo lascivamente.
Este se acercó más a su cuerpo y la tomo firmemente de la cintura, afianzando su agarre conforme avanzaban hacia el área de habitaciones.
El olor era a sudor y diversas hormonas en el ambiente.
Pero un olor peculiar llego a su nariz, fresas.
Miro a todos lados y nadie estaba en el largo pasillo en que ya se encontraba, de pronto sintió el jalón de su cuello hacia dentro de una de las habitaciones mientras se cerraba la puerta detrás.
- ¿Qué quieres que haga primero? - pregunto la mujer arrojando una prenda a la cama.
Este la miro a los ojos sin intenciones de mas, se rasco el puente de la nariz cerrando los ojos con suma fuerza para poder despertar donde deseaba, una cama cómoda con sabanas a olor fresas que amaba, mientras una cabellera castaña se remolineaba entre sus brazos.
- Hare lo que tú me pidas - señalo acercándose a él.
Cuando menos se dio cuenta las manos de esta ya rodeaban su cuello y sus labios besaban está dejando pequeñas marcas de labial rojo.
- Eres muy guapo - dijo la chica - El mejor cliente que he tenido - sonrió para después morder ligeramente el lóbulo de su oreja - ¿Que te trae por aquí?, ¿Un problema sin solución? - volvió a besar - ¿O acaso un mal amor? - se separó para ver sus ojos verdes - Siempre es la razón de venir a un club como este y me temo que tú no eres la excepción.
Aparto las manos de la mujer de su cuello y la aparto de su cuerpo.
- Stiles - dijo en voz audible lo que confundió a la mujer.
- ¿Stiles? - pregunto sin entender.
- Es la razón que este aquí - confeso pasando de ella y sentándose en la cama mientras llevaba ambas manos a su cabeza.
- Ya veo, eres de esos chicos que les gustan de su mismo sexo - sonrió - No te preocupes no te juzgare, hay muchos clientes con distintos fetiches.
- Stiles no es un fetiche para mí - contesto.
- Si no lo es, ¿Entonces qué haces aquí? - se sentó a su lado - En lugar de estar con él.
Tenía toda la razón, debía estar con él, cuidándolo, protegiéndolo y más que nada apoyándolo tras lo que estaba pasando, pero en cambio a eso solo lo lastimaba más con su simple presencia.
- Le hago mal estando a su lado.
- Vamos, no eres el peor hombre de todos eso puedo asegurártelo, llevaba 5 años de casada cuando mi marido decidió ser me infiel y llevándose a mi hijo con él y su amante cuando llegue al hospital tras haber sido golpeada por el cuándo me entere - pudo percibir el cambio de ánimo de la chica - Pero te aseguro que lo que les esté pasando tiene una solución y buscarla en un lugar como este no te ayudara en absoluto.
Lo sabía de antemano, ¿Pero correría el riesgo a perderle si lo intentaba con Stiles?
Negó con la cabeza alejando esos pensamientos que lo hacían prisionero de sus miedos.
Fue cuando escucho la respuesta más difícil y a la vez sencilla de responder.
- ¿Ese Stiles vale la pena que hayas venido hasta aquí para tratar de hacer algo que sabias que no harías solo para calmar ese dolor?, ¿Ese chico es tan importante para ti? - palmeo un par de veces mientras tomaba la prenda de la cama y la enrollaba en sus caderas - Si lo es entonces solo vete y déjame trabajar querido - le guiño un ojo y se marchó de la habitación.
Alejo sus manos de su cabeza y se recostó en la cama un par de segundos, recordó su sonrisa traviesa en cada entrenamiento, las barbaridades que decía en cada reunión y lo extremadamente inteligente que era.
Había tratado de negar aquel sentimiento desde que se enteró en labios de Kate el lazo que los unía, había hecho hasta lo imposible por controlar aquel sentimiento que luchaba por desbordarse como un río.
Stiles se había convertido en todo para él desde que lo vio caminar por aquel bosque junto a Scott, su lobo y él lo sabían, el olor a fresas que lo caracterizaba se había impregnado tanto en su interior que lo recordaba cada que estaba lejos del humano y eso le bastaba para controlar la ansiedad de salir a buscarlo cada noche.
Fue cuando se puso de pie y decidió que ya no temería mas, que él lo protegería con su vida si fuese necesario, que ya no viviría con el temor a que algo le sucediera por su culpa como siempre sucedía, Boyd, Erika, Laura, sus padres e incluso Paige eran prueba de ello, pero no quería hacer sufrir más al castaño, no quería perderle a él también, así que decidido salió de la habitación topándose con la misma mujer.
- Listo - menciono la chica.
Este asintió alejándose de aquel local y con rumbo a la residencia de los Stilinski.
[...]
Con lo que no contaba era que al estar frente a la entrada la respiración entrecortada del humano y un bésame de sus labios le causarían tanto daño que solo podía azotar la puerta y tratar de recuperar lo que había deseado desde hacía tanto.
Pero verlo besándose con Dean lo termino de destrozar por completo haciendo que su lobo rugiera al sentir el olor a traición envenenarlo poco a poco.
Había llegado a la mansión completamente destruida, se acomodó en las escaleras y se recostó mirando el techo, ya no podía hacer nada, se lo advirtieron y el solo vivía en negación, no podía reclamarle pues no tenía el derecho, no podía llorar porque no aliviaría su dolor, no podía huir porque tenía que encontrar al padre del chico, solo estaba la solución de permanecer cerca, pero apartado de lo que le provocaba.
- Veo que no estás bien sobrino - dijo Peter entrando despreocupadamente.
Este no le respondió, estaba cansado ya de todo.
- ¿Sabes lo que ha sucedido?, te has matado tu solo - dijo.
- Lo sé - contesto.
- Te condenaste al dejar que el lazo se rompiera por culpa de tu negación, ¿Sabes lo que eso significa?
- Moriré.
- ¿Y planeas quedarte tan tranquilo?
- Solo me interesa ahora encontrar al padre de Stiles - se recompuso.
Sus ojos verdes ya no tenían brillo, su lobo se consumía poco a poco y su vida se acortaba cada que eso sucedía, sus días estaban contados.
- Esto también lo involucra a él.
- El estará bien mientras este junto a Dean, conozco perfectamente lo que sucederá así que no necesito que me lo repitas - dijo disgustado.
- Cora no estará de acuerdo con esto - se acercó un poco más recargándose en la pared.
- No tiene por qué enterarse.
- No es tonta, se dará cuenta que algo anda mal contigo al ver por qué no peleas, porque tu esencia se está esfumando y porque el brillo de tus ojos comience a desaparecer, te recuerdo que para encontrar al sheriff se necesita pelear cosa que ya no podrás hacer, por lo que veo tu lobo se renegó a ayudarte y eso no te ayudara.
Se puso de pie y camino hacia su tío.
- No importa, mientras Stiles siga con vida - sonrió por primera vez hacia su tío y se marchó de la mansión, tenía que descansar y pensar para lo que estaba destinado mañana.
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SUPERNATURAL (Teen Wolf)®
Fanfic▶Terminada◀ Una vida sobrenatural no siempre es la mejor opción Autor: Ale Castillo (SDHobrien)