Diario de una huérfana

14. ¿En venenada?

Narra Hanna

Desperté a causa de un fuerte dolor en el estómago, me levanté de la cama y pase mi mirada por toda la habitación, hasta pararme en Alex que estaba durmiendo en una silla al lado de mi cama.

Me levanté de la cama y cogi una manta que tenia encima de mi cama. Le tape, pero cuando acabe de taparlo me tuve que sentar en el suelo mientras me agarraba el estómago de lo que me dolía. No te que unos brazos mientras yo lloraba de dolor.

-¿Que te pasa Hanna?-dijo Alex con voz preocupada, mientras me seguía abrazando.

-Me du-ele el es-toma-go-dije casi sin poder  hablar del dolor.

Alex me levanto del suelo y me tumbo en mi cama.

-No te muevas, en seguida vuelos-dijo y a sentí con la cabeza.

Salio rápido de la habitación, mientras que yo me quedaba viendo el techo, intentando pensar en otra cosa para que no me doliera el estómago, pero no funcionaba, cada vez el dolor era más intenso.

-AHHH-grite.

Blanca vino corriendo a mitacion y se acercó a mi.

-¿Te duele mucho?-preguntó, asentí con la cabeza, Blanca se mordió la muñeca.

-¿Que haces Blanca?-dije confundida.

-Si bebes de mi sangre te sentiras mejor-dijo Blanca y puso su muñeca delante de mis labios, le cogí de la muñeca y bebí de su sangre.

Después de unos minutos de haber bebido de Blanca, se sentó en la silla donde había estado Alex.

-¿Cómo te sientes?-preguntó respirando profundamente.

-Sigo un poco dolorida pero esto bien-respondi mirando el techo.

Alex entro en la habitacion unos segundos mas tarde con un hombre que llevaba un maletín, era de cabello rubio y ojos marrones.

-Hanna este es el Doctor Smith-dijo Alex acercandose a mi.-Va a mirarte para ver lo que te pasa-dijo y le hizo una señal a Blanca para salir de la habitacion.

-Bueno Hanna, voy a ver que te pasa-dijo el Doctor al lado mio y dejó el maletín en el suelo.-Levántate la camiseta, te voy auscultar-dijo y le hice caso.

A cabo de investigarme y en su ojos pude ver preocupación.

-¿Que es lo que me pasa Doctor?-lo mire esperando una respuesta.

-Lo siento, has sido en venenada-dijo y recogió todo en su maletín.

-¿En venenada?-Predunte con confusion.

"¿Pero como?" dijo mi conciencia.