Diario de una huérfana

26. Papá

Desperté al sentir el tato de una mano en mi mejilla, se sentía también que no tenía ganas de abrir los ojos.

-Hanna se que estás despierta-susurró Alex en mi odio, sonreí y abrí los ojos.

-¿Por qué me despiertas sigo teniendo sueño?-dije y me tapé con las sábanas hasta la cabeza.

-Lo hago porque es hora de ir a entrenar-dijo y sentí como se levantaba de la cama.-Pero si no quieres ir no te obligaré-dijo, abrió la puerta y la cerró.

De repente sentí mucho peso en cima mío, intenté moverme pero no pude.

-¡ALEX!-grite a todo pulmón.

-El no vendrá a ayudarte-dijo una voz masculina que no reconocía.

-¿Qui...en eres?-dije tartamudeando.

-¿Quien crees que soy?-dijo con seguridad en la voz.

-Papá-dije esta vez más segura.

-Estado-dijo él y me quito las sábanas que me cubrían.-Hola hija-sonrió con maldad.-Valla no pensaba que fueras tan...-hizo una pausa para mirarme de arriba a bajo.-Guapa-acabó diciendo.

-¿Que es lo que quieres de mi?-dije y me aleje de él.

-Ya sabes lo que quiero-dijo y me agarro del brazo, me subió a su hombro, pero no me deje llevar tan fácilmente, ya que le di una patada en el estomago.

Me tiro al suelo y sin pensarlo salí de mi habitación corriendo para pedir ayuda. Pero al parecer no había nadie en ninguna parte de la casa.

-Ellos no podrán salvarte esta vez-escuche que decía mi padre en alguna parte de la casa.

"¿Como?¿Ya nos habíamos visto antes?"

Esas preguntas se me pasaron por la cabeza. Corrí hasta la salida, pero la puerta de la casa no se abrí.

-Como sigas escapando de mi todos tus amigos morirán y quiero que sepa que empieza por esa humana, ¿como se llama?-dijo pensativo-Así Nicole-dijo y me di la vuelta al sentirlo detrás de mi.

-Como le toque un pelo te matare-dije con rabia haciendo que mis colmillos salieran.

-Valla así que si te has convertido en un vampiro-soltó una carcajada.-Bueno no importa acabaré contigo y luego acabaré con tu madre-se acercó a mi haciendo que mi espalda chocara contra la puerta.

-Eres un hijo de pu...-fui interrumpida, porque me pegó un puñetazo y seguido de eso me puso un trozo de cinta en la boca haciendo que callara. Me subió a su hombro y me llevo hasta su coche, para luego tirarme en el maletero.