La Familia Kim

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Todo parecía marchar bien, JungKook fuera del hospital sin algún riesgo, NamJoon seguía concentrado en seguir el legado de la familia en volverse un gran empresario. YoungSoo pensaba que irse a Busan sería una magnífica idea, ya tenía una casa a la cual se podía alojar después de tomar ese vuelo a su futura ciudad, hasta había conseguido una escuela donde sus hijos estudiaran, su trabajo era igual que el anterior, claro con menos responsabilidades. Su plan era perfecto.

Él estaba listo para el cambio que estaba por ocurrir, pero no estaba seguro de que sus hijos ya estuvieran totalmente seguros de su decisión. Él se sentía algo culpable al dejar su ciudad, ese magnífico lugar donde vio nacer a sus dos hijos, se tuvo que mudar desde su ciudad natal: Degú para ir con SunHee a vivir en Seúl, donde vio cuando su mujer se moría, ahí había vivido los mejores y también los peores momentos de su vida.

Se encontraba en su habitación. Ya tenía echas sus maletas. Sólo se iban a ir a la tumba de su amada esposa y madre de sus dos hijos, luego compraban algo de comer y tomaban el vuelo hacia Busan.

— Papá, ¿Puedo ir con SeungRi para despedirme?—Kook se asomó en la puerta de su padre, preguntándole. Soo asintió. —Vuelvo en una hora.

Era lo menos que Young podía hacer, también le iba a decir a su hijo mayor que si quería irse a despedir que lo hiciera, pero Nam se negó.

 —¿Seguro que no te despedirás de nadie?—Soo le insistió a su hijo.

— Estoy seguro papá...— NamJoon dejó la palabra en el aire y se quedó pensando. — ¿Me puedo ir ahora a Busan? Hay un tren que sale en quince minutos y si tomo un taxi tal vez llegue.

— ¿Por qué tienes tanta urgencia con Busan?

— Quisiera ver cómo va a ser la casa, mi escuela y conocer un poco más la ciudad, ver si los lugares en los que estuve siguen ahí, ¿Me puedo ir?, ya hasta anote la dirección en este papel. No me puedes decir que no ahora que ya tengo todo listo toti —Nam le siguió insistiendo.

— Ve.

Era la primera vez en años que su hijo le decía toti, los recuerdos que tuvo con él le llegaron a la mente, en especial esa vez cuando Nam se subió por primera vez a un avión pilotado por su padre, el apenas tenía cuatro años, nunca olvidaría ese día.

Se puso a pensar que casi no convivía con JungKook por que la mayor parte del tiempo que tenía libre estaba con el pelinegro. Se sentía algo culpable.

Soo vio cómo su hijo tomaba un taxi junto con sus maletas y se dirigía a la estación de trenes. Tuvo un sentimiento ligero de que su decisión fue buena, ya que al menos uno de sus hijos mostraba una gran euforia y ganas de estar en Busan. Su hijo menor se mostraba indiferente, parecía que le daba igual si se mudaran o no.

***

JungKook sentía como la soledad le llegaba al no estar cerca de su hermano. Se sentía solo aunque estuviese al lado su padre, era casi un extraño para él. Él único que lo llego a conocer más a su padre era su hermano NamJoon, y eso fue gracias a que era el mayor y el futuro heredero de la ex empresa de su papá.

Esperaba una llamada de su hermano antes de que subiera a su tren, pero ninguna llego. Él creía que lo había dejado, luego tuvo la esperanza de que su hermano contestara sus llamadas, pero luego noto que Nam había dejado su teléfono. << ¿Habrá huido?>> Kook pensaba eso. Pensaba que su hermano había escapado de todos los problemas que estaban pasando. Él creía que su Hyung lo había dejado a un lado como una persona con un animal que pertenecía a las calles.