XV

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Desde aquello aprendiste

que la gente nunca es

lo que uno espera,

aprendiste que nunca debes esperar

nada de nadie,

no te ilusiones,

que nunca hay que dar

todo lo que uno tiene

a alguien,

porque cariño,

cuando le das todo

le das la oportunidad

de lastimarte,

ya no porque sepa

tus pensamientos más oscuros,

sino,

porque cuando le das todo

y se va,

te deja sin nada,

todo aquello que llenaba

se ha ido

y ahora

tan solo te queda un vacío.

Aprendiste a dejar ir

sin dolor

cuando alguien se iba,

no porque no lo quisieras,

sino porque,

se ha ido tanta gente

que hizo tanto bien,

que apenas tardarás

en olvidar a alguien

el cual no le ha llegado

ni a la suela de los zapatos

a la gente por la que sufriste,

lloraste,

y te arrastraste

por no perder.

Aprendiste

a no confiar en nadie,

porque la gente te falla,

te abandona,

te traiciona.

Porque la gente,

promete demasiadas cosas,

y luego ni siquiera

son capaces de cumplirlas.

Juegan con temas como;

el amor,

el tiempo,

la distancia,

la lealtad

y

la inseguridad de uno mismo.

Prometen quererte

por encima de todo

y todos.

Prometen estar para siempre,

pase lo que pase.

Prometen ir contigo,

si tú tienes que partir.

Prometen estar contigo

a pesar

de lo que el resto diga.

Prometen demasiadas cosas,

prometen ilusiones

y esperanzas

que se acaban marchitando

porque mediante pasa el tiempo,

ni siquiera recuerdan,

que con las flores

hay que tener constancia,

porque una vez la pierdes;

la flor muere.

Debido a esto,

muchas veces creemos extrañar,

cuando tan solo recordamos.

Hay una gran diferencia,

entre ambos puntos,

que parecen estar

unidos.

Extrañar,

significa anhelar algo

y muchas veces,

ese algo tiene

una colonia específica,

una risa peculiar,

un llanto característico

y un adiós indescriptible.

Sin embargo,

recordar,

significa pensar en aquello

que tuviste,

pero que por un motivo,

ya no tienes.

Tan solo pasan imágenes

por tu mente,

recuerdos que tuviste

junto a alguien.

Y esto uno debe

parar a pensarlo

detenidamente,

porque siento decir,

que por idénticos que parezcan,

ambos desencadenan

sentimientos opuestos.

Si extrañas;

no superaste a esa persona.

Si recuerdas;

superaste a esa persona.

Dolor crónicoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora