La Sultana Haydee

VII

Los últimos tres días el palacio estaba sumido en un gran caos por los preparativos de la boda de la sultana Haydee, la sultana Ishbel se había encargado de todo mientras la sultana Haydee descansaba y recuperaba sus fuerzas. La sultana Ishbel junto a la señorita Zira la encargada del Harem se habían encargado de todos los preparativos para tener todo a la perfección en tan poco tiempo

Los guardias siempre estaban alertas en las puertas de los aposentos de la sultana donde descansaba, el pasha Murad no había conseguido encontrar al hombre quien le había estado enviando las cartas a la sultana.

En esos momentos se encontraban las criadas ayudando a vestir a la sultana, con el habitual corona de rubís, el hermoso vestido rojo y su cabello perfectamente peinado, bien maquillada y con las mejores joyas, la sultana se veía hermosa

Cuando las criadas terminaron se marcharon dejando a la sultana sola con sus pensamientos. Era extraño para ella estar en esa situación, antes era ella la que estaba entre los invitados viendo como Ishbel y Helize se casaban con su hermano pero ahora ella era la novia

Tenia algo de miedo pero tambien seguridad, después de todo ella era una sultana y no tenia por que temer, era la mujer con mas influencia y poder en el imperio Otomano

La puerta de su recamara se abrió y entro la señorita Zira para escoltarla al harem donde se celebraría la boda por parte de las mujeres

-¿Esta lista, sultana?-pregunto la señorita Zira y la sultana asintió con la cabeza para que luego la mujer acomodara el velo sobre su rostro. Ambas salieron de los aposentos escoltadas por los guardias y las criadas

Desde los pasillos se escuchaba la música y las risas, al entrar las mujeres detuvieron su baile y las demás se pusieron de pie para dar la bienvenida a la novia, en el centro del salón se encontraba la sultana Ishbel y la sultana Helize, ambas sonreían contentas pero por distintos motivos

La sultana Ishbel por el cariño que le tenia a la sultana Haydee y la sultana Helize por la alegría de por fin deshacerse de la sultana Haydee del palacio

La sultana Haydee caminaba con la frente en alto y con su siempre orgullo por el salón, con el rostro sin mostrar emoción alguna al igual que el sultán, al estar frente a las sultanas estas hicieron una reverencia

-Espero que Ala los ilumine y sean muy felices-deseo la sultana Ishbel

-Y que su matrimonio sea largo y prospero-deseo la sultana Helize, luego de las palabras esta fue a sentarse junto a las demás mujeres y la sultana Haydee se sentó en medio del salón extendiendo sus manos mientras la sultana Ishbel ponía en ellas una moneda de oro en cada una

Esa tradición debía de hacerlo su madre o su suegra pero como ambas estaban muertas, la tarea le era correspondida a la primera esposa del hermano

Luego de las monedas una criada sostenía una bandeja la cual esta contenía bolas de alheña, la sultana Ishbel coloco una de esas en las manos de la novia encima de una moneda. Luego la sultana Ishbel envolvió las manos de la sultana Haydee en una gasa roja y un guante del mismo color hasta que la henna endurezca las mujeres se pusieron a bailar y cantar alrededor de la sultana Haydee

Del otro lado del salón se encontraban reunidos los hombres en su propio festejo, comiendo y charlando entre si, aunque el festejo era algo incomodo pues varios de los hombres estaban en desacuerdo con la boda y detestaban al novio, pues había conseguido desposar a la sultana mas bella

-Pasha Zeheb-llamo el sultán y este se puso de pie

-Su majestad-hizo una reverencia y el sultán hizo una seña con la mano y uno de los guardias se acerco, llevaba un cofre en sus manos y el sultán lo abrió para entregarle el contenido al pasha Zeheb

Se trataba de una daga de plata con un hermoso rubí incrustado

-Esta daga es para que defiendas a la sultana y a la familia que formen, espero que Ala ilumine sus caminos que ahora son uno solo, que sean muy felices, te estoy entregando uno de mis tesoros mas preciados, no me defraudes-dijo el sultán 

-Prometo no decepcionarlo su majestad, la cuidare y defenderé con mi vida-el sultán asintió

En ese momento entro el juez con el Corán y dio comienzo a las formalidades, sentado frente a el se encontraban los dos testigos del novio. Luego de terminar allí, se dirigió hacia la sultana quien tambien estaba preparada con sus dos testigos quienes eran la señorita Zira y la sultana Ishbel

-Acepta este matrimonio-pregunto el juez

-Acepto-respondieron ambas mujeres

-¿Acepta este matrimonio?-pregunto por segunda vez

-Acepto-

-¿Acepta este matrimonio?-

-Acepto-

-Firmen aquí-pidió y ambas mujeres lo hicieron

Oficialmente la sultana estaba casada con el pasha Zeheb

En el momento en el que se marcho el juez se escucho por los pasillos al abrirse las pueras

-¡Atención! ¡El sultán Ishmad!-

Todas las mujeres se pusieron de pie y bajaron la mirada para hacer una reverencia ante el sultán, este con una sonrisa se dirigió a su hermana la sultana Haydee, levanto su velo y beso su frente

-Eres la novia mas hermosa que mis ojos hayan visto-declaro el sultán y la sultana sonrió

-Su majestad-detrás del sultán entro un guardia que en sus manos sostenía un cofre, el sultana se dirigió a el para que se acercara a la sultana mostrando su contenido

Se trataba de una hermosa tiara con diamantes de Esmeraldas, el color favorito de la sultana

-Lo mande hacer especialmente para ti-comento el sultan

-Es muy hermoso-

-No tanto como tu hermana mía-sonrió el sultán

Todos observaban la escena con especial atención, en especial la sultana Helize que muerta de los celos por ver como el sultán le regalaba una hermosa tiara y a ella nunca nada. Como la llamo la novia mas hermosa cuando tampoco expreso esas palabras con ella el día de su boda

Ella creía que el sultán la amaba con locura en un principio, creyó que el mundo seria suyo al parir al príncipe Baec, pero no

El sultán la trataba como a una criada mas, como a su primer esposa sin algún rastro de amor, amor que ella tanto deseaba

Y ese amor y atención que en esos momentos estaba recibiendo la sultana Haydee