La Sultana Haydee

XVII

La sultana Amirah se encontraba en el jardín junto a sus hermanos, los tres siendo custodiados por los guardias y las criadas de sus madres. La sultana Helize no quería que el príncipe Baec estuviera con sus hermanos, eso la molestaba mucho y la princesa Amirah era muy consiente de aquello, tan solo con siete años era una niña reservada, seria y muy inteligente

Desde que tenia uso de consciencia sabia el conflicto entre las sultanas, pero había algo que llamaba la atencion de la señorita Safiye, la encargada del harem ante la ausencia de la sultana Haydee, ella notaba la tristeza que siempre mostraba en su rostro la pequeña sultana desde la marcha de su tía, la sultana Haydee

Sus hermanos nunca la dejaban de lado y la querían mucho, ella eso lo sabia claramente, pero era muy distinto su conexión como hermanos varones, príncipes y guerreros a comparación de ella, siendo la única sultana hija de su padre. Su madre siempre se encontraba triste lejos del sultán y cuando este estaba cerca, ella se ponía muy hermosa para el pero el casi nunca la miraba, su padre el sultán, estaba muy ocupado para prestarle atencion a ella

La única que siempre estaba con ella, era la sultana Haydee pero ahora esta tambien se había marchado. Sin decir absolutamente nada se puso de pie e hizo una reverencia ante sus hermanos para marcharse, estos no le prestaron mucha atencion ya que se encontraban en una disputa sobre guerras y caballos

Con una criada detrás de ella, la sultana Amirah se dirigió a los aposentos de su padre, donde extrañamente fue recibida, siempre que iba con su madre y hermano, su padre se encontraba muy ocupado

La señorita Safiye le había comentado al sultán el extraño estado en el que se encontraba la sultana Amirah, y claro que el se preocupo por ella

-Su majestad-la niña hizo una reverencia y el sultán sonrió para hacer una seña para que ella se sentara junto a el 

-Mi bella luna-el sultán sonrió y tomo su rostro en sus manos para besar la frente de su pequeña hija, ella permanecía seria, sin mostrar expresion alguna. De la misma manera que su padre frente a sus esposas, el sultán frunció el ceño al ver a su hija

-Padre-

-¿Que te ocurre mi bella luna? La señorita Safiye me dijo que no estas bien-el sultán se mostraba preocupado

La sultana Amirah observo el despacho de su padre, había muchos papeles y cartas por todos lados, libros de aquí para haya, el típico olor a incienso, y las cortinas que parecían bailar al moverse por el viento que entraba desde el balcón

-Quería pedir permiso para pasar unos días en el palacio de la sultana Haydee-pidió sorprendiendo de sobre manera a su padre, el sultán entonces entendió la actitud de su hija pero eso no disminuyo su sorpresa al querer marcharse del palacio

El sultana tomo una profunda respiración y se tenso, la sultana Amirah vio temerosa a su padre esperando y rogando a Ala una respuesta positiva

-¿Es por eso que estas triste?-pregunto el sultán y la sultana asintió con la cabeza

-Estoy sola, padre-murmuro la niña

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-¿Que esta ocurriendo señorita Safiye?-pregunto la sultana Ishbel mientras se detenía frente al Harem, donde los hombres cargaban algunos baúles. En ese momento tambien se asomaba la sultana Helize y la sultana Ishbel la invadió una esperanza-¿La sultana Helize se marcha?-pregunto y la señorita Safiye se mostró incomoda

La señorita Safiye era una mujer mayor de cincuenta años, había sido la criada de la sultana Hatice, la madre del sultán Ishmad y la sultana Haydee, ella los había criado y cuidado desde que nacieron y ahora era la encargada del Harem y como una madre para el sultán

-No sultana-negó-La sultana Amirah ha recibido el permiso del sultán para pasar unos días en el palacio de la sultana Haydee-La sultana Ishbel palideció y su corazón latio con fuerza y rapidez, presa del miedo y angustia

¿Por que su majestad enviaría a su hija al palacio de su hermana? Se pregunto la sultana con miedo

La sultana Helize abrió los ojos, sorprendida tambien para luego sonreír, el sultán comenzaba a deshacerse de sus hijos, no le importaba mucho pero si le tomaba por sorpresa, todas las criadas murmuraban entre ellas mirando a las sultanas y a los hombres que sacaban los baúles hacia el carruaje

En ese momento entraron los príncipes Baec y Beyazid entraron del jardín y fruncieron el ceño al ver los baúles y a las sultanas allí, ellos bien sabían que eso no significaba nada bueno

-¡Atención!-se escucho-¡Su majestad, el sultán Ishmad y la sultana Amirah se encuentran aquí!-

En ese momento entro el sultán sosteniendo la mano de la sultana Amirah quien ya vestía su habitual abrigo para viajar, detrás de ellos los guardias del sultán y las criadas de la sultana que ya tambien estaban listas para partir. Todos hicieron una reverencia ante el sultán

-Su majestad-la sultana Ishbel se acerco al sultán y a su hija-¿Que esta ocurriendo?-pregunto

-¿Amirah? ¿A donde vas?-preguntaron los principes

-Amirah se ira a pasar unos días en el palacio de la sultana Haydee-informo el sultán, este se encontraba molesto por que podría parecer indiferente ante sus esposas pero en realidad estaba muy atento a ellas y el conflicto entre ellas

El que la sultana Amirah hija del sultán se marchara fuera el palacio real, no estaba en las costumbres, una sultana solo podría abandonar el palacio cuando se casara o cuando el mismo sultán la exiliara, no era normal aquello, pero nadie se atrevía a cuestionar su palabra. Ni siquiera la sultana Ishbel, madre de la sultana Amirah

Fue una total sorpresa para la sultana Haydee, la llegada de su sobrina, Amirah, pero la recibió gustosa con los brazos abiertos, entendía bien la situación de Amirah, y mas aun esta siendo una niña. Pero el tenerla allí en su palacio tambien le hizo anhelar la presencia de sus demás sobrinos y un sudor frió recorrió su cuerpo, temerosa de que algo le ocurriera al príncipe Beyazid y al príncipe Onur

Aunque estando el sultán allí, estaba segura de que Helize no se atrevería a hacer nada al respecto, pero eso tampoco le aseguraba que no lo planeara