Almas Unidas//Niall Horan [1].

CAP 8

Narrator's POV

La melliza asintió e introdujo la llave en la cerradura para luego girarla, esta hizo un 'click' y se abrió levemente, se miraron entre los tres con interrogante, y Marshall dijo-yo entro primero, digo, soy el único hombre

-¿no que era las damas primero?-preguntó su hermana levantando una ceja

-quiero protegerlas-le respondió-ahora-tomó aire-voy a entrar

Dicho eso Sky entro al cuarto secreto dejando a ambas mujeres desconcertadas ante su actitud de héroe, pasaron los segundos en completo silencio, hasta que el chico habló

-¿chicas?-murmuró con una pisca de miedo desde adentro-ti-tienen que ver esto

Peters observó a su prima queriendo saber que pensaba, la pelinegra sólo se encogió de hombros y entró; ___(tn) quiso quedarse a fuera, pero su prima la jaló del chaleco hacia dentro. Miró a su al rededor aturdida, habían símbolos extraños en las paredes hechos con sangre, notas con diferentes idiomas y fotografías esparcidas en el suelo.

Marshall tomó una foto ensangrentada- Peters, esta mujer se parece muchísimo a ti

(T/N) se acercó lentamente a su primo y observó la foto en detalle

-no lo creo-susurro aterrada

La pelinegra se acercó a su hermano y prima para observar la fotografía-woow, es igualita a ti-la miró-coml dos gotas de agua

-¡cállate!-exclamó con el poco aire que tenía.

Marshall giró la fotografía y se encontraron con una escalofriante frase: Charlotte Peters, otra victima la cual debo asesinar.

-ti-tiene tu apellido-dijo Marceline aterrada

-debe ser una de la generación antigua de cualquier Peters, no es que sea de esta familia Peters-murmuró la ojiazul

-es de tu familia Peters

-¿como lo sabes?-preguntó a la defensiva

-mira-apunto a una ceja de Charlotte-tiene la misma mar de todos los Peters sobre la ceja, es como un sello

Marks tenía razón, (T/N) se sintió mareada por la falta de aire y todo su al rededor, esta sólo hizo un gesto avisando que se iba y salió por la puerta, al estar lejos de aquel pasillo comenzó a sentirse mejor; recordó que cuando era niña le pasaba exactamente lo mismo, por eso no le gustaba subir al segundo piso. Con lo que había descubierto ese día, sabía el porqué le sucedía.