Almas Unidas//Niall Horan [1].

CAP 40

Ella estaba completamente sonrojada, lo cual me causaba mucha ternura

—eso suena bonito

ella alzó la mirada y se dio cuenta que sonreía—¿por qué sonríes?—me preguntó alzando una ceja

reaccione y alcé ambas cejas nervioso—porque...ahm...

ella se dió cuenta de mi nerviosismo y se acercó más a mí—¿ahm?...

—porque yo...—deje de observar sus hermosos ojos y observé sus bien formados labios

Peters estaba muy cerca mío, diría casi pegada a mí; podía oler su aroma y oír su corazón latir, lo cual me ponía más nervioso

—Niall—susurró

—¿sí?

en ese momento lo sentí, sentí sus labios sobre los míos, formando un tierno beso, el cual duró hasta que nos faltó el aire. Ella empezó a separarse lentamente de mí y le sonreí

—me gustas, Niall

no sé cómo explicarlo, pero, sólo deben saber que ese momento fue unos de los más felices de mi larga vida.

...

Luego de su confesión le pedí una cita, la cual obviamente aceptó, le pedí el auto prestado a Louis y paseamos por la ciudad de noche, no fue algo elegante ni caro, pero fue perfecto para ambos.

○○○

El fin de semana paso rápido, lo único que en realidad hice fue estar hablando de (T/N) con mi grupo, los cuales aburridos me escuchaban, en ese momento me di cuenta que tenía buenos amigos, ya que nunca me hicieron callar.

Al llegar a la secundaria caminé hacia mi casillero y deje lo poco que traía en él, a los pocos metros se encontraba mi chica concentrada ordenando su casillero, me acerqué lentamente a ella y la abracé por la cintura, tomándola por sorpresa

—hey—dejó los libros en el casillero y tocó mis manos—, estas helado, ¿no tienes frío?

la solté y me alejé un poco de ella, normalmente para ella estoy a temperatura humana porque bebo sangre antes de juntarme con ella, pero esta vez no lo hice, por lo que debo estar muy helado; así que rápidamente negué y le pregunté cambiando el tema

—¿tienes hambre? Puedo invitarte un desayuno.