Wanyan Xu estaba furioso; aunque sabía que Su Yi mentía, no tenía medios para probarlo. Aún más desafortunado fue la sensación de haber sido arrojado desde las nubes a un oscuro pozo sin fondo, nunca en su vida había experimentado una frustración tan amarga. Agarrando un puñado del cabello largo de Su Yi, con maliciosa intención dijo: "¿Es así? No importa, incluso lo desconocido se convertirá en natural con la práctica; Yo te enseñare" Sin más explicaciones, volvió a meter su cosa en la boca de Su Yi. Usando una mano para sujetar la mandíbula de Su Yi, implacablemente dirigió su cosa para cargar violentamente contra la boca de Su Yi.
Su Yi no iba a ser superado. Aunque en una posición desventajosa, buscó desesperadamente la oportunidad de emplear sus dientes como armas, tratando de hacer contacto con una cosa que parecía tan dura pero que en realidad era muy vulnerable. La furia de Wanyan Xu aún no había disminuido, con una mano ejerció todas sus fuerzas para contener a Su Yi, con la otra siguió frotando y amasando el pecho de Su Yi bruscamente. Bajo su abuso, los dos brotes bermellones estaban hinchados y palpitando de dolor, pero esto no calmó su ira. Las heridas que previamente se habían acumulado en el cuerpo de Su Yi se volvieron a abrir durante la lucha, algunas gotas de sangre gotearon sobre el borde húmedo de la piscina. Él no parecía darse cuenta de sus heridas, en cambio intensificó sus esfuerzos para resistir a Wanyan Xu.
¡Qué truco del destino! ¿Quién hubiera pensado que dos personas nacidas para ser adversarios podrían incluso convertir el juego de amor y sensualidad en un campo de batalla, dando como resultado un confuso lío? Lamentablemente, no importa qué tan duro y resuelto sea Su Yi, estaba destinado a ser el derrotado. Como el estado de ánimo de Wanyan Xu se volvió cada vez más eufórico, Su Yi sintió un chorro de líquido caliente dentro de la boca, incluso antes de darse cuenta de lo que había sucedido, Wanyan Xu le hizo levantar la cara apretando fuertemente su cuello, forzándolo a tragar completamente el ***.
Después de que Su Yi se dio cuenta del origen de este líquido, inmediatamente fue al borde de la piscina y comenzó a vomitar, también se vació la pequeña bilis que tenía en el estómago. Wanyan Xu miró fríamente mientras el cuerpo de Su Yi, plagado de cicatrices, se estremecía con temblores y convulsiones. Una sensación indescriptible de tranquilidad y satisfacción llenó su corazón. Agarrando el cuerpo de Su Yi, él dijo entre risas: "Ya que lo encuentras sucio, seré generoso hasta el final, puedes tener otro lavado". Empujando poderosamente a Su Yi, los dos cayeron juntos en la piscina.
El cuerpo de Su Yi ya estaba frágil por las semanas de maltrato, y había enfrentado a Wanyan Xu en una lucha feroz, además, el impulso de su caída al agua fue muy rápido. Una hoja de negro descendió ante sus ojos, una vez más colapsó en un desmayo. Wanyan Xu llevó su cuerpo al borde de la piscina y lo sostuvo. Usando agua tibia de la piscina, enjuagó delicadamente las heridas que se habían abierto y sangraban, al mismo tiempo se aprovechó de Su Yi. Después de toquetear a Su Yi por menos de una hora, se sintió totalmente relajado y encantado. Subió, agarró una toalla de baño y frotó los cuerpos hasta secarlos. Cargo en sus brazos a Su Yi y lo llevo, entró en su dormitorio real, sin hacer ningún esfuerzo por ocultar su llegada juntos.
Las tres asistentes, Zi Nong, Zi Liu y Zi Nan, estaban en medio de preparar la cama para el uso de su amo, cambiando la ropa de cama y bajando las cortinas. La vista del dúo acercándose los hizo mirarlos con tanta fuerza que sus ojos casi se salieron de las órbitas. Zi Nong tragó varias veces, reuniendo su coraje antes de preguntar audazmente: "Mi Rey, ¿El general Su aún está vivo?" Incluso antes de que el sonido de la voz de Zi Nong se hubiera desvanecido, Zi Liu se apresuró a intervenir: "Su Majestad, por favor no se enoje. Zi Nong quería preguntar si deberíamos enviar a los guardias para llevarlo de vuelta a la cárcel. El patio interior es un lugar restringido después de todo. No solo es un hombre extranjero, sino que también es prisionero de guerra, no es apropiado que él esté aquí... " No pudo continuar con el resto de su palabras, Wanyan Xu las miraba con ferocidad, como si quisiera devorarlas vivas por su insolencia. Después de un largo tiempo, Wanyan Xu fríamente dijo: "No hay necesidad de que te preocupes por mis asuntos. Se quedará aquí esta noche. De hecho, es oportuno que cambies la ropa de cama, trae un conjunto adicional, asegúrese de que esté hecho de un material grueso y cálido. En cuanto a la cena, no voy a ir a cenar con las Concubinas Imperiales. Haz que se sirva aquí, y asegúrate de preparar platos más nutritivos. Humph... tratar de morir por debilitamiento... ¡No lo permitiré!"
Aunque estas palabras fueron pronunciadas entre dientes, la inteligente Zi Liu pudo detectar un hilo de ternura cálida en su tono. Sin embargo, era demasiado confuso, cualquier sentimiento que Wanyan Xu tuviera solo los había tenido en la infancia. Ver a Wanyan Xu mirar intensamente al inconsciente Su Yi como si estuviera mirando las primeras briznas de hierba primaveral que se ve a través de un manto de nieve, Zi Liu no pudo evitar soltar un profundo suspiro, un oscuro pensamiento surgió en su corazón: "Si su Majestad realmente ha desarrollado sentimientos por este general capturado, para ambos, esto podría traer tanto buena fortuna como un desastre".
Zi Nong no tenía tales dudas; radiante, ella se fue para llevar a cabo las instrucciones de Wanyan Xu. Wanyan Xu llamó a Zi Liu, pidiéndole que tratara las heridas de Su Yi. Solo entonces Zi Liu se atrevió a preguntar, aunque con vacilación: "Maestro, ¿Será sometido el general Su a más duros castigos para forzar su rendición?"
Wanyan Xu se rió entre dientes y dijo: "La tortura es ineficaz contra él; He encontrado un mejor método para atormentarlo. A partir de ahora, no hay necesidad de llevarlo de vuelta a la prisión".
Zi Nan se acercó y dijo: "Maestro, hace un momento, La señora Yin lloraba lastimosamente en el palacio, parece que el joven príncipe heredero ha estado haciendo algo malo. Su señoría dice que ruega el perdón de Su Majestad por no haber cuidado del Príncipe Heredero y tiene que solicitar que se le dé el cuidado de Su Alteza Real a otra concubina imperial".
Asintiendo con la cabeza, Wanyan Xu respondió: "Lo entiendo. *La Princesa heredera murió joven, he estado ocupada con asuntos del estado y olvidé guiar bien a Shuo Er, lo que hizo que desarrollara una personalidad fría e insensible. Ya es tan astuto a una edad tan temprana, ¿Cómo podría controlarlo la señora Yin? Envíalo esta noche, él cenará conmigo".
(N/T: La princesa heredera es la madre del Príncipe Heredero, probablemente ella murió antes de ascender al trono, por eso su título es de una princesa en vez de una reina)
A Zi Nan le gustaría mucho decir que el Príncipe Heredero es astuto porque siempre estaba pegado al lado de Wanyan Xu, y había obtenido ese rasgo de su padre. Pero, por supuesto, Zi Nan nunca se atrevería a articular semejante pensamiento. Ella sabía que el pequeño príncipe heredero Wanyan Shuo amaba pasar tiempo con su padre; quizás el palacio real estaría en paz solo cuando estuviera con Wanyan Xu. Después de que Zi Nan se fue para instruir a los sirvientes del palacio para convocar al Príncipe Heredero, Wanyan Xu le preguntó a Zi Liu: "¿Recibiste algún informe del campo de batalla de Yu Cang? El rey de Qi es tonto, y ninguno de los ministros que le sirven es un comandante talentoso. Solo confiar en que el río Yangtze proporciona una barrera defensiva natural es inútil. Con la habilidad de Yu Cang, él debería poder prevalecer sin gastar demasiado esfuerzo".
Toda la cara de Zi Liu se iluminó, y en un tono alegre dijo: "Las deducciones del Maestro son correctas. El general Yu Cang envió mensajeros para decir que habían llegado a Jiangnan. Ha pasado un tiempo desde que ordenó a los mensajeros partir, por lo que esos cobardes comandantes deberían haberse rendido por ahora. Shifu dijo una vez que conquistar Zhongyuan es su ambición de toda la vida. Solo es cuestión de tiempo antes de que el Rey de Qi y su corte se rindan y sean ejecutados. La gran ambición del Maestro pronto se cumplirá" Su voz apenas se había desvanecido antes de que ella escuchará un gemido emanado desde arriba de su cabeza. Su Yi se había despertado sin que nadie se diera cuenta, ahora, se apoyaba en un brazo, girando su cuerpo hacia un lado, hacía un sonido de "waa", y rápidamente escupía una bocanada de sangre fresca en el suelo.
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